El rey emérito, Juan Carlos I, ha decidido permanecer en Abu Dhabi, donde se encuentra desde hace meses, y pasar allí las Navidades, según ha informado la Casa Real.
Lo más importante: el emérito ha trasladado un mensaje a sus allegados en el que explica que, ante su condición de persona de riesgo, prefiere no exponerse al virus. Sin embargo, el diario Ara informa de que el verdadero motivo es que ingresó la semana pasada en la clínica Cleveland de Abu Dhabi tras haberse contraído la COVID-19, extremo que ha desmentido la Casa Real.
Hace solo unos días, el rey emérito tenía la intención de volver a España desde los Emiratos Árabes Unidos para pasar las Navidades «con sus hijas», según informó la COPE, pero este jueves se ha conocido que no regresaría a España «por razones relacionadas con la pandemia de la COVID-19».
Juan Carlos I se encuentra en los Emiratos Árabes Unidos desde que en agosto comunicara en una carta pública a su hijo, Felipe VI, su decisión de abandonar España ante la repercusión pública de «ciertos acontecimientos pasados» de su «vida privada». Tras días de incertidumbre en los que ni el Gobierno ni la Zarzuela comunicaron el paradero del monarca, se confirmó que se había trasladado a Abu Dhabi. Su decisión venía motivada por la investigación a la que se está viendo sometido por parte de la Justicia suiza por tener supuestamente dinero oculto en el país.
Posteriormente, Juan Carlos I abonó a Hacienda un total de 678.678.393,72 euros para regularizar su situación fiscal en España. Lo hizo, según su abogado, mediante una declaración tributaria voluntaria «sin requerimiento previo», para satisfacer una deuda tributaria.
