¿Cuál es el perfil de los incendiarios de los disturbios por Hasél en Madrid y Barcelona?

Grupos de jóvenes de perfiles diversos han incendiado las calles, sobre todo de Madrid y Barcelona, en protesta por la detención del rapero Pablo Hasél. Si bien el perfil de los jóvenes –e incluso menores– es diverso, los Mossos han confirmado que han identificado a independentistas revolucionarios, antisistema y grupos de la ultraizquierda.

En contexto: Pablo Hasél fue detenido e ingresado en la prisión Ponent de Lleida el 16 de febrero para cumplir una condena de nueve meses por delitos de enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona. Desde su detención, se han producido tres noches consecutivas de protestas –no comunicadas ni autorizadas– y altercados con decenas de detenidos y heridos en Madrid y Cataluña.  

«Es una amalgama de personas violentas y agresivas que, con el pretexto de una manifestación lícita, causan disturbios», informó este jueves el comisario portavoz de los Mossos, Joan Carles Molinero, en una rueda de prensa, refiriéndose a un perfil «muy variado» formado por personas de «diversas características y edades». Sin embargo, en las marchas, los servicios de información han detectado personas vinculadas al independentismo revolucionario, con amplia experiencia de incidentes callejeros en los últimos años, como el intento de asalto al Parlament. En Cataluña han sido detenidas 51 personas.

Por su parte, en Madrid, la policía ha identificado a miembros de «grupos de ultraizquierda». «El miércoles fueron convocados por el Movimiento Antirrepresivo de Madrid (MAR), que aglutina a grupos de extrema izquierda y de ultraizquierda, y acudieron anarquistas (los más violentos y sin estar adscritos a nada ni nadie), miembros de Izquierda Castellana (partido castellanista y antifranquista), de Distrito 14 (barrio de Moratalaz) o de Distrito 104 (Latina)», detallan fuentes policiales a El País. Solo en la noche del jueves, en la capital de España, fueron detenidas 19 personas, seis menores; el miércoles fueron 13, entre ellos, un miembro del movimiento Rodea el Congreso, una persona asociada al movimiento Yo No Pago, famoso por sugerir a los ciudadanos que se colaran en el Metro, a modo de «insurrección económica», en protesta «contra los recortes sociales», o cuatro miembros de Bukaneros, grupo de aficionados del Rayo Vallecano. Todos han sido puestos en libertad.

La actuación de los manifestantes, que en sus concentraciones en apoyo a Hasél claman a favor de la libertad de expresión, ha dejado numerosos contenedores quemados, daños en el mobiliario urbano y motocicletas dañadas, así como varios establecimientos con los cristales rotos. En algunas zonas, el fuego de los contenedores ardiendo en barricadas, como en las calles Bailén, Aragó, Girona y València, ha llegado a algunos árboles y semáforos, por lo que han tenido que intervenir los Bomberos para evitar que pudiesen afectar a los vecinos.

En los alrededores de la plaza Tetuán, donde ha comenzado la manifestación, la policía autonómica ha levantado varias actas de denuncia a personas que llevaban en sus mochilas esprays y pelotas de golf y una persona ha sido denunciada por llevar petardos y elementos de pirotécnia. Además, los manifestantes han atacado la fachada de la sede de El Periódico, donde han arrojado piedras, han roto cristales y han efectuado algunas pintadas.

Por su parte, los heridos también se cuentan por decenas. En Barcelona 55 personas han sido atendidas por sanitarios (31 de ellas mossos) y una joven de 19 años ha perdido un ojo.