Juana Rivas ingresa en una prisión de Granada para cumplir su condena
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Juana Rivas ha ingresado en el Centro de Inserción Social (CIS) Matilde Cantos de Granada para cumplir la condena firme a dos años y medio de prisión por no haber entregado a sus hijos al padre en el verano de 2017, según ha informado este viernes su abogado, Carlos Aránguez.
En contexto: Juana Rivas, que también ha solicitado el indulto al Gobierno, está condenada en firme por haber permanecido en el verano de 2017 un mes en paradero desconocido junto a sus dos hijos para no entregarlos al padre, el italiano Francesco Arcuri, quien en 2009 fue condenado por lesionarla y al que ella volvió a denunciar por maltrato en 2016.
El letrado ya avanzó que esta vecina de Maracena (Granada) no iba a «eludir» el ingreso en la cárcel decretado por el Juzgado de lo Penal 1, aunque volvió acusar a este órgano de no «atender ninguno de los argumentos» que le ha trasladado como parte, entre otros los recursos de reforma y apelación que ha presentado contra su encarcelamiento.
«Estos son momentos muy difíciles. Jamás en mi vida hubiera pensado que nos pasaría algo así. Creo que principalmente esta condena es para mis hijos. Voy a cumplir con una decisión que considero muy injusta, pero que no voy a desobedecer» ha indicado Juana Rivas a través de un comunicado remitido por su abogado, Carlos Aránguez.
El letrado ha asegurado que utilizará «todas las vías legales» para que esta situación «dure el menor tiempo posible» y que sea estimado el recurso presentado contra el auto que, el pasado 27 de mayo, ordenó la detención y entrada en prisión de Rivas, que debía ingresar en la cárcel antes de este próximo sábado, 12 de junio. El abogado de Rivas también confía en que pronto pueda obtener el tercer grado penitenciario y que logre el «indulto total» que ha solicitado al Gobierno.
«No tuve más remedio que entregar a mis hijos a Arcuri. La justicia así me lo exigió. Pero en cambio, mi denuncia por maltrato contra él estuvo 13 meses guardada en un cajón. Para después de 30 meses más, ser archivada sin escucharme siquiera», ha lamentado Rivas, que asegura tener «fe y esperanza» en que el Gobierno le conceda el indulto.
Los hechos tuvieron lugar en el verano del 2017, cuando la madre permaneció un mes en paradero desconocido junto a sus dos hijos para no entregarlos al padre con el argumento de protegerlos frente a él, el italiano Francesco Arcuri, quien en el 2009 fue condenado por lesionarla y al que ella volvió a denunciar por maltrato en el 2016. Tras varios requerimientos para que devolviera a sus hijos y después de que su expareja denunciase la desaparición, la acusada entregó a los dos niños un mes después en Granada.
La Audiencia de Granada y el Juzgado de lo Penal número 1 de Granada apreciaron que la acusada había cometido dos delitos de sustracción de menores, uno por cada niño, incumpliendo las resoluciones judiciales que le obligaban a su entrega al padre que ostentaba la custodia de los mismos por disposición judicial.
El Tribunal Supremo consideró finalmente que, aunque el artículo 225 bis del Código Penal siempre se refiere al «menor», en singular, el título donde se ubica la norma, alude a las relaciones familiares, de ahí que finalmente la condenara por un solo delito a la pena de dos años y seis meses de prisión, además de la pérdida de la patria potestad.