El 70,3% de la población asturiana ya ha sido inmunizada contra el coronavirus con las dos vacunas. Así, el Principado se ha convertido en la primera comunidad autónoma en superar el 70% que inicialmente se planteó para conseguir la inmunidad colectiva frente a la COVID-19, listón que ahora se está revisando al alza.
Las cifras: con las 4.000 personas que el jueves recibieron su segunda dosis son ya 716.159 los residentes en el Principado con la pauta completa, un 70,3% de la población total y el 76,67% de la población diana (mayores de 12 años). Asturias se ha adelantado así al objetivo marcado a nivel nacional de conseguir que a finales de este mes esté inmunizada el 70% de la población, si bien la expansión de la variante delta, con una capacidad de contagio más elevada, ya ha llevado a la OMS a advertir de que será necesaria una mayor cobertura para frenar el avance de la COVID-19.
En Asturias se han administrado desde el inicio de la campaña de vacunación 1.492.677 dosis que han permitido que 819.606 personas hayan recibido al menos una dosis, lo que representa el 80,45% del conjunto de la población. El avance de la vacunación ha favorecido también que en las últimas dos semanas se haya reducido la incidencia acumulada en más de un 32% y que Asturias sea ahora la única comunidad autónoma en la que este indicador se encuentra por debajo de los 300 casos por cada 100.000 habitantes.
La incidencia acumulada en Asturias pasó el jueves de 301 a 283 casos por cada 100.000 habitantes, un porcentaje que se sitúa más del 40% por debajo de los 483 de la media nacional. La ocupación de camas hospitalarias por pacientes COVID-19 se sitúa en el Principado en el 3,7%, mientras que en las unidades de críticos es del 10,74%, unos porcentajes que en el conjunto del país prácticamente se doblan al situarse en el 8,06 y el 20,79%, respectivamente.
No obstante, el consejero de Salud, Pablo Fernández, ya ha anunciado que se seguirá manteniendo un elevado ritmo de vacunación y administrando todas las dosis que se reciban porque, pese a la mejora de los datos, Asturias sigue en riesgo alto de transmisión del virus y en riesgo medio en cuanto a la presión asistencial.