Un monje cisterciense del monasterio de Poblet (Tarragona), de 68 años, ha sido detenido, acusado de un delito de tocamientos sexuales a una menor de edad que habría cometido el pasado 15 de agosto, y el abad de la comunidad, Octavi Vilà, ya le ha apartado cautelarmente de toda actividad, según han informado a Efe fuentes del monasterio. Tras prestar declaración ante el juez, el monje ha quedado en libertad con cargos.
Lo más importante: se trata del primer caso de abusos que afecta a la comunidad cisterciense de este emblemático monasterio real, uno de los más grandes de Europa, y ha causado una profunda consternación entre los integrantes de la orden, que han sido informados por el propio abad, quien no ha revelado la identidad del acusado para preservar su presunción de inocencia mientras dure la investigación.
El abad, que recibió este miércoles la información de los Mossos d’Esquadra del motivo de la detención del monje, ha ordenado abrir una investigación canónica previa, y, de acuerdo con el Consejo del Monasterio, ha prohibido cautelarmente al monje ejercer sus derechos capitulares, hacer cualquier actividad pastoral y abandonar la clausura. El abad también ha retirado al monje todos sus derechos capitulares y ha informado de los hechos a la Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano, a la que trasladará el resultado de la investigación lo antes posible.
Además, ha expresado la «plena colaboración» con las autoridades policiales y judiciales para aclarar los hechos y depurar las responsabilidades que se pudieran derivar, aunque ha pedido respetar el derecho a la presunción de inocencia del acusado.
El monje salió de la misa a las 12:30 horas del pasado día 15 de agosto acompañando a los padres de la niña y, en la plaza del monasterio, ante numerosas personas, le hacía bromas y cosquillas a la menor delante de sus padres.En un momento dado, la niña se levantó la falda que vestía y, al parecer, el monje la habría tocado, momento que un turista alemán captó con su cámara fotográfica. Al ver la foto y consultarlo con juristas de su país, le aconsejaron que llevara la fotografía a la policía y por eso presentó la denuncia con la foto ante los Mossos.
El monje quedó arrestado este miércoles tras ser citado a declarar en la comisaría de Valls (Tarragona), está pendiente de pasar en las próximas horas a disposición judicial y se le acusa de un delito contra la libertad sexual por tocamientos, según han informado a Efe fuentes de los Mossos d’Esquadra.
En un comunicado, la comunidad cisterciense de Poblet ha mostrado su «solidaridad y apoyo a todos aquellos que se puedan sentir afectados con estos hechos, particularmente con la familia de la menor». «Nos duele profundamente esta situación y manifestamos de manera contundente el compromiso y la voluntad de luchar contra todo tipo de abusos en la Iglesia», subraya el comunicado.
«Este Monasterio -añade-, lugar estimado por los catalanes y gente de todo el mundo por la acogida religiosa y cultural que aquí se presta, con las oportunas medidas de prevención que se están implementando, debe ser siempre un lugar absolutamente seguro para la infancia y la juventud. Nos encomendamos a vuestra oración», concluye el texto.
Por su parte, el presidente del patronato de Poblet, Tòfol Trepat, ha asegurado que «no es creíble un abuso de menor a las 12:30 de la mañana delante de la Iglesia abacial, ante los padres, que, además, son amigos de Poblet». «Soy el primero en criticar la pederastia, pero lo que ha pasado con este caso es una caza de brujas. Creo saber que todo está aclarado, pero el mal ya está hecho», ha declarado Trepat.
El Monasterio de Santa María de Poblet se encuentra situado en la comarca tarraconense de la Conca de Barberà, entre las poblaciones de Vimbodí, término municipal al que pertenece, y de L’Espluga de Francolí, resguardado en la vertiente norte de las montañas de Prades. Este conjunto arquitectónico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1991, se puede contar entre los monumentos monásticos más importantes de Europa y en él reposan los restos de varios reyes de la corona catalano-aragonesa.