Las vacunas reducen la probabilidad de sufrir covid persistente, según varios estudios
Varios estudios internacionales muestran también que la vacuna puede mejorar los síntomas de las personas con esta dolencia
Las vacunas no solo protegen contra una infección grave por covid-19 o la muerte por este virus, sino que también reducen a la mitad la probabilidad de sufrir covid persistente con la pauta completa. Así lo han determinado diferentes estudios realizados hasta enero de 2022 y analizados ahora por la Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido.
Además, varios de los estudios analizados, realizados tanto en Reino Unido como en otros países, muestran que la media de las personas que se vacunan cuando ya sufren los síntomas del covid persistente, mejoran.
La mitad de probabilidad con dos dosis de la vacuna
La Organización Mundial de la Salud (OMS) definió en octubre la covid persistente como una dolencia que «ocurre en personas con antecedentes de infección probable o confirmada por SARS CoV-2, generalmente tres meses desde el inicio de covid-19 con síntomas y que duran al menos dos meses y no se pueden explicar con un diagnóstico alternativo».
Su causa todavía no está identificada y los síntomas no son los mismos para todos los afectados, pero lo que sí están dejando claras las investigaciones hechas hasta ahora es que esta complicación del coronavirus se puede prevenir con los programas de vacunación.
«La mayoría de estos estudios sugiere que las personas vacunadas con una o dos dosis tenían menos probabilidad de desarrollar síntomas de covid persistente tras la infección en comparación con las personas no vacunadas, tanto a corto plazo como a largo plazo», señala la Agencia de Seguridad Sanitaria británica.
Además, apunta que los estudios revisados demuestran que las personas con dos dosis de los preparados de Pfizer, AstraZeneca o Moderna o con una dosis de la de Janssen tenían alrededor de la mitad de posibilidades de sufrir covid persistente que las personas sin vacunar o con una sola dosis.
«Eso es lógico porque al final los vacunados van a tener casi siempre enfermedad menos grave y en la enfermedad menos grave también estaría incluido que tenga un menor riesgo de padecer complicaciones, entre las que se encuentra la covid persistente», explica a THE OBJECTIVE Jaime Jesús Pérez, vocal de la Asociación Española de Vacunología (AEV).
Señala también que los resultados de estos estudios, aunque no haya datos de este tipo recopilados en España, se podrían aplicar perfectamente a nuestro país, puesto que no debería haber una diferencia entre los efectos en la población.
Mejora de los síntomas
Aunque esto es algo menos estudiado, también hay resultados que muestran que, tras la vacuna, los síntomas de la covid persistente mejoran en un mayor número de pacientes que aquellos que empeoran o no notan diferencia.
En análisis de la Agencia de Seguridad Sanitaria británica hace referencia a cuatro artículos que comparan los síntomas de la covid persistente antes y después de la vacunación. Tres de ellos reportan una mejoría en un número mayor de pacientes que aquellos que empeoran.
Además, otros tres artículos centrados en personas sin vacunar con covid persistente muestran que las que deciden vacunarse después son menos propensas a seguir mostrando síntomas que quienes siguen sin vacunar.
«Los datos apuntan a que la vacuna puede beneficiar a los pacientes que tienen covid persistente», señala Jaime Jesús Pérez, que explica que aunque todavía hay poca evidencia científica, sí se está viendo esta relación en los pacientes con esta dolencia.
Esto podría ser, explica, porque las vacunas «activan el sistema inmune de forma que consiguen una reducción de los síntomas en aquellas personas que ya habían sido infectadas antes de vacunarse».
Por eso, recomienda la dosis de refuerzo que corresponda a todo el mundo, pero «incluso un poco más» a las personas con estos síntomas de larga duración, porque aunque «no es algo matemático», es cierto que «la media de las personas mejora».
Un 10% de los infectados con síntomas de larga duración
En España, las autoridades sanitarias estiman que aproximadamente el 10% de las personas que han sido contagiadas por covid-19 sufren esta enfermedad.
Su causa se desconoce por el momento, aunque hay teorías, por lo que los pacientes van de especialista en especialista para tratar los diferentes síntomas, que muchos de ellos ni siquiera tienen en común. Alteración del olfato, fatiga, pérdida de memoria, dificultad para respirar… y así hasta 200 secuelas distintas registradas hasta ahora.
La Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria y la asociación Long Covid ACTS han desarrollado una guía clínica para atender a estos pacientes y con el objetivo de «visibilizar la enfermedad».