La Agencia Europea del Medicamento tarda 18 meses más que EEUU en aprobar un fármaco
El documento realiza un pormenorizado análisis de la legislación y normativa existente en materia de transparencia y conflicto de intereses de la EMA
La Agencia Europea del Medicamento (EMA) tarda 18 meses más que EEUU en aprobar un fármaco, eso es lo que se desprende del último informe que se ha presentado este jueves por parte de Europa Ciudadana, que a través de su nuevo trabajo La Agencia Europea de Medicamentos: cómo superar errores del pasado compara la forma de operar del organismo europeo con su homólogo estadounidense.
El texto realiza una comparativa con su homólogo en Estados Unidos, la Food and Drug Administration (FDA), que tarda seis meses en aprobar nuevas terapias y medicamentos, frente a los dos años de la EMA. El principal motivo de esta diferencia temporal es, según el informe, la flexibilidad de la FDA frente la EMA, ya que la agencia americana cuenta con mecanismos de aprobación acelerada para fármacos eficaces contra enfermedades incurables, mientras que los de la EMA son más rígidos.
«La Agencia Europea de Medicamentos (EMA), organismo regulador europeo, no está preparada para hacer frente a una nueva crisis sanitaria como la vivida recientemente». Así lo ha indicado José Carlos Cano Montejano, presidente de Europa Ciudadana y profesor de la Universidad Complutense de Madrid, en la presentación del informe. El autor expresó que «tras dos años del inicio de la pandemia, la EMA apenas ha modificado sus procedimientos que, como demuestra el informe, son lentos y poco transparentes».
El documento realiza un pormenorizado análisis de la legislación y normativa existente en materia de transparencia y conflicto de intereses de la EMA. Cano Montejano ha adelantado algunas de las conclusiones, entre las que destacó la necesidad de avanzar hacia la transparencia y muy especialmente en la agilidad de la propia institución. «El informe plantea una serie de premisas dirigidas a un mejor funcionamiento de la EMA, basadas en unos procedimientos más transparentes, más ágiles y, en definitiva, beneficiosos para la salud de los ciudadanos y la defensa de los derechos de los solicitantes», ha señalado.
Según ha explicado el presidente de Europa Ciudadana, el documento realiza una serie de propuestas de mejora regulatoria dirigidas a revisar los procedimientos internos de la EMA para «aportar claridad, transparencia y eficiencia en su labor». Todo ello «sin olvidar que el objetivo final es facilitar el acceso a los medicamentos a los enfermos».
Como ejemplo, el informe pone de relieve el caso de la farmacéutica española PharmaMar, que recurrió ante el Tribunal General de la Unión Europea la negativa de la Comisión Europea y de la EMA a comercializar uno de sus medicamentos. En su sentencia, el Tribunal General concluyó que la composición del grupo asesor científico de la EMA no era imparcial, al incurrir dos de sus componentes en causas de incompatibilidad objetiva. Esta decisión revocó la decisión del Ejecutivo comunitario a la autorización de comercialización del fármaco de la compañía.