La caída de Rafael Amargo: de ganar premios a ser detenido (de nuevo) por tráfico de drogas
Amargo fue detenido en una sala de Alicante, acusado de dos delitos contra la salud pública y atentado contra agente de la autoridad
El bailarín y coreógrafo Rafael Amargo. | EFE
Rafael Amargo, el bailarín, coreógrafo y director de teatro español conocido por su estilo vanguardista y su creatividad, no parece levantar cabeza. Después de ser detenido por presunto tráfico de drogas en noviembre de 2020, un delito del que fue absuelto pero que desencadenó su caída en desgracia, Amargo ha vuelto a ser arrestado este jueves por la Policía por el mismo motivo. Las autoridades le acusan esta vez de vender «personalmente» drogas como metanfetamina en su casa, con una conversación con un supuesto comprador como prueba de cargo principal.
Así se refleja en el atestado policial, al que ha tenido acceso EFE este viernes, elaborado por la Policía Judicial de la Comisaría del distrito Centro de Madrid, tras una denuncia interpuesta el pasado mes de julio por los vecinos del artista en el inmueble de la calle Espíritu Santo del barrio de Malasaña de la capital. Estos vecinos se quejaron de un supuesto tráfico de drogas, con un constante trasiego de politoxicómanos que entraban y salían del edificio y que en ocasiones se quedaban a dormir en el rellano.
Tras la denuncia, los investigadores dispusieron numerosos dispositivos de vigilancia en el entorno de la casa del bailaor, donde varios clientes fueron identificados por los agentes de paisano, que lograron intervenirles distintas sustancias estupefacientes que supuestamente acababan de adquirir en la vivienda de Amargo. En concreto, realizaron cuatro intervenciones de metanfetamina y una de mefedrona.
Uno de los compradores interceptado por los policías, el 3 de octubre de 2022, accedió a que le tomasen declaración y manifestó que contactó con un tal «Rafa» para adquirirle tres gramos de metanfetamina y uno de mefedrona por un precio de 210 euros. El toxicómano describió a la persona que le vendía droga en un piso de la calle Espíritu Santo como «Rafa el del teatro» y, tras aportar sus características físicas, mostró a los agentes la conversación de WhatsApp en la que le había encargado los narcóticos.
A través de mensajes como «¿Lo voy pidiendo ya? y «No tardes, que está esto aquí ya, y el chaval se quiere llevar su dinero», enviados supuestamente por Amargo a su cliente, la Policía determinó que el bailaor actuaba como «intermediario» y que era él quien «personalmente estaría llevando la distribución», según recoge el atestado.
Delito contra la salud pública
Los investigadores relatan que, en el transcurso de las pesquisas, Amargo y su mujer se fueron a vivir a un apartamento turístico de la capital. El modus operandi que relata el atestado es similar al que consta en la causa abierta contra Amargo a finales de 2020, cuando el detenido fue acusado de vender droga. Entonces se le atribuyó un delito contra la salud pública, por el que la Fiscalía le pide 9 años de prisión de cara al juicio, fechado para junio de 2023.
Además, las diligencias de investigación llevadas a cabo ahora también constatan que el presunto traficante que proveía de droga al bailaor era un hombre dominicano que vivía en un piso ubicado en la calle Teruel del distrito de Tetuán, junto con otro sospechoso de vender estupefacientes. El pasado mes de febrero, la Policía registró esta vivienda y encontró distintas cantidades de metanfetamina, éxtasis, ketamina, sildenafilo, cocaína rosa y blanca, CB2, así como material para su venta.
Este segundo arrestado, que estaba en otra habitación en la que se intervino dinero en efectivo, quedó en libertad provisional tras pasar a disposición judicial. Amargo fue detenido la noche de este jueves en una sala de Alicante. Está acusado de los delitos contra la salud pública y atentado contra agente de la autoridad, ya que supuestamente se resistió al arresto.
