Una irresponsabilidad adolescente provoca un incendio en un chalé de Huesca
Los jóvenes accedieron a la casa aprovechando que estaba vacía, y echaron gasolina en un vaso de cristal para posteriormente prenderle fuego al mismo
Cuatro menores, con edades comprendidas entre los 14 y los 17 años provocaron un peligroso incendio en el chalé de un notario en Castiello de la Jaca (Huesca). Ahora, el juez condena a los padres de los mismos a pagar una multa de más de medio millón de euros, tal y como indica Heraldo de Aragón .
La gracia de unos adolescentes en Huesca les va a costar cara a sus progenitores, concretamente 557.563 euros. Gracia que, les haría a estos críos cuando decidieron colarse en el chalé de un notario de Zaragoza, situado en Castiello de la Jaca (Huesca), con el objetivo de hacer ‘travesuras’ en su interior.
Se trataba de la segunda residencia del escribano, a la que solo acudía algunos fines de semana, o en períodos vacacionales. De esta forma, y siendo conscientes de ello, los menores accedieron a la vivienda por la puerta trasera, que sabían, estaba rota, y podía abrirse fácilmente.
¿De qué manera accedieron al interior y cómo se produjo el incendio?
Una vez dentro de la parcela, los jóvenes se hicieron con una piedra, que estamparon contra una puerta para acceder a su interior. Así, lograron entrar en la bodega del chalé del notario, un amplio espacio en el que el propietario guardaba numerosas botellas de vino de gran valor, así como diferentes bebidas alcohólicas.
De esta forma, se bebieron varias botellas de vino entre los cuatro y permanecieron fumando en el interior de la bodega durante un rato. Más tarde se movieron por el interior de la vivienda, y llegaron al salón, lugar en el cual se les ocurrió la brillante idea de llenar un vaso de cristal con gasolina y prenderlo fuego.
Claro está, se produjo una violenta llamarada que trataron de sofocar, inútilmente, con el agua del grifo. Este hecho produjo que el inflamable líquido, ya incendiado, se derramase sobre la mesa de madera, que también ardió al instante.
Muy asustados, y como último intento de sofocar el fuego, recurrieron a utilizar el edredón de una cama, que únicamente sirvió para avivar mucho más las llamas. Tanto es así, que los menores de edad, para ponerse a salvo abandonaron corriendo el inmueble, que quedó a la deriva y a merced de las llamas.
Juicio para los menores
Ante la jueza que les juzgaba por los hechos, los menores de edad admitieron haber estado en el interior del inmueble la noche del incendio, pero alegaron que creían que se trataba de una vivienda abandonada. Esto fue descartado por la Señoría, dado que la casa había sido construida escasos años antes, y permanecía en perfecto estado y cuidado.
Por otro lado, la Guardia Civil realizó un registro de los dispositivos móviles de los menores, una vez fue destapado el suceso. De esta forma, pudieron corroborar que los menores habían estado fumando y bebiendo dentro de la bodega del chalé, tal y como demostraban varios vídeos de la galería del teléfono.
Como consecuencia, se les acusa de diferentes delitos de imprudencia grave, así como de allanamiento de morada. Si ya de por sí se trata de menores, la peor parte viene para sus responsables civiles, en este caso sus padres, que deben de afrontar una multa de 557.563 euros.
En cuanto al ‘castigo’ para los jóvenes, uno de ellos, recién cumplida la mayoría de edad, deberá de realizar tareas socioeducativas; mientras que otro deberá acudir durante 12 meses a un centro de día supervisado. Por otro lado, los dos restantes permanecerán doce meses bajo libertad vigilada.