Blue Monday 2024: ¿por qué hoy (15 de enero) se celebra el día más triste del año?
Al permitirnos sentir y comprender la tristeza, facilitamos procesos fundamentales como el duelo y el crecimiento personal
Blue Monday
El calendario está lleno de días destacados y conmemoraciones. Sin embargo, el tercer lunes de cada enero, desde 2005, se ha convertido en una de las fechas más tristes en muchas partes del mundo.
Este día ha sido reconocido como el «día más triste del año», una jornada para expresar y compartir la tristeza, la nostalgia y el desánimo, emociones básicas del ser humano de las que no debemos huir.
En contraposición al «Yellow Day» o «día más feliz del año», celebrado el 20 de junio para celebrar la positividad en nuestras vidas, surgió el «Blue Monday» para normalizar las emociones tristes que han sido durante años rechazadas.
¿Por qué se considera el tercer lunes de enero el día más triste del año?
La idea de que reconocer el tercer lunes de enero como el ‘día más triste del año’ se originó a partir de una fórmula matemática creada por el psicólogo británico Cliff Arnall en 2005.
Esta fórmula considera varios factores, como el clima, las deudas después de las festividades, el tiempo transcurrido desde la Navidad, la falta de motivación y la necesidad de un giro en nuestras vidas.
La fórmula de Arnall: la arquitectura detrás del Blue Monday 2024
La fórmula es la siguiente: 1/8C+ (D-d) 3/8xTI MxNA.
La C hace referencia al clima, la D a las deudas contraídas durante las fiestas, d es el dinero que cobraremos a final de enero, T es el tiempo que ha pasado desde la Navidad y la I es el tiempo que ha transcurrido desde el último intento de dejar un mal hábito. Además, M son las motivaciones que aún nos quedan y la NA representa la necesidad de actuar para cambiar todo lo negativo que rodea nuestras vidas.
Blue Monday: ¿un día triste o una campaña de marketing?
Esta fórmula y la idea de que existe un «Blue Monday» carecen de validez científica sólida. La fórmula de Arnall ha sido, muy criticada por expertos en salud mental, quienes consideran que simplifica en exceso la complejidad de las emociones humanas y no tiene una base empírica significativa.
La noción del «Blue Monday» se ha perpetuado más como una campaña de marketing que como una realidad psicológica. Las emociones son experiencias subjetivas y no se pueden reducir a un solo día del año.
Por qué el color azul protagoniza este día
La elección del color azul puede haberse basado en la connotación cultural de este color con la melancolía y la tristeza. A lo largo de la historia en algunos lugares, se ha utilizado la expresión «estar con el ánimo azul» para describir sentimientos de tristeza o depresión.
A pesar de que también se asocia con la serenidad, el color azul ha sido inesperadamente vinculado con la tristeza en el ámbito emocional. Esta conexión tiene sus raíces en el siglo XVIII, cuando se mencionaban los «demonios azules» que las personas afirmaban ver durante estados depresivos.
Esta asociación podría haber surgido debido a la conexión con elementos como la lluvia o el cielo nublado, que comúnmente se perciben como melancólicos.
La tristeza, una emoción para abrazar
La tristeza, lejos de ser una emoción a evitar, es una experiencia humana legítima que merece ser acogida y abrazada. Al permitirnos sentir y comprender la tristeza, facilitamos procesos fundamentales como el duelo y el crecimiento personal.
Esta emoción no solo valida nuestras respuestas a desafíos y pérdidas, sino que también nos conecta emocionalmente con los demás, fortaleciendo lazos de apoyo.
Al aprender a manejar la tristeza, no solo cultivamos la resiliencia emocional, sino que también encontramos motivación para realizar cambios positivos en nuestras vidas. En lugar de rechazarla, puede ser una guía valiosa para entender nuestras necesidades, valores y metas, contribuyendo así a un bienestar emocional más completo y equilibrado.
