¿De dónde viene la droga de Barbate? Así es la ruta que sigue desde el origen a su destino final
En 2023, España aumentó en un 33% el total de cocaína incautada en un solo año
Persecución de una narcolancha en aguas de Ceuta. | Antonio Semperes (Europa Press)
El reciente suceso del puerto de Barbate (Cádiz) que provocó la muerte de dos guardias civiles tras ser embestidos en su embarcación por una narcolancha ha puesto al narcotráfico en el foco público. Pero, ¿de dónde viene toda la droga que llega a las costas españolas? ¿Cómo se esquivan los controles policiales?
Los puertos gaditanos no son las únicas vías de entrada que utilizan las organizaciones criminales para el tráfico de sustancias estupefacientes en España y en Europa. Se ha de realizar una separación entre las drogas más consumidas, por norma general, en el país y en el continente. Por un lado está el hachís, cuyo principal proveedor es Marruecos, desde donde los narcotraficantes introducen la sustancia por diferentes puertos de la costa mediterránea española. En segundo lugar se encuentra la cocaína, mayoritariamente de origen latinoamericano, e introducida en España por costas mediterráneas o por la comunidad autónoma de Galicia.
Cabe destacar que la vía más barata para los narcotraficantes de introducir drogas en España es la portuaria, debido a que, dotados de potentes naves, es muchísimo más sencillo esquivar y huir de las autoridades en caso de ser detectados. En información aportada por el Ministerio de Interior, fijando Cádiz, Huelva, Málaga, Almería, Granada y Sevilla como zonas de recopilación de datos, desde agosto de 2018 a finales de 2023, Guardia Civil y Policía Nacional han incautado un total de 1.452 toneladas de hachís y 109,7 toneladas de marihuana. Esto evidencia que, la cercanía de las costas españolas con el principal país productor de estas sustancias provoca que, semana tras semana, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se jueguen su vida en la lucha contra el narcotráfico.
En cuanto a la cocaína, los datos sobre las cantidades incautadas son menores (106,7 toneladas) en la zona, posicionando a las costas valencianas y catalanas como los principales puntos de entrada de la sustancia a España. Y es que, en el pasado 2023, el país batió récords de incautación de cocaína en su historia. De esta forma, más de 70.000 kilogramos de dicha sustancia estupefaciente han sido intervenidos por Guardia Civil y Policía Nacional. En otras palabras, en 2023, España aumentó en un 33% el total de cocaína incautada en un solo año.
Los puertos españoles por los que más cantidad de esta droga se introdujo en el país fueron Valencia, Algeciras, Barcelona, Vigo y Las Palmas. El principal motivo por el que la Comunidad Valenciana lidera este ranking es que cuenta con el puerto español con mayor flujo comercial diario de todo el país; así como por ser el más grande, tal y como ha informado la Fiscalía General del Estado: tres terminales y 130 líneas regulares.
Según estos datos recopilados por el Ministerio del Interior, en cinco años, Guardia Civil y Policía Nacional han ejecutado en Cádiz, Huelva, Málaga, Almería, Granada y Sevilla 22.207 operaciones policiales contra los grupos criminales que operan en dichas zonas, de las que 17.580 están ya judicializadas y 2.760 de ellas lo son por blanqueo de capitales y otros delitos financieros. Por otra parte, 19.907 personas han sido detenidas o investigadas por delitos de narcotráfico o contrabando, interviniendo también 7.190 medios de transporte: 5.760 vehículos terrestres, 1.421 marítimos y 11 aeronaves.
El origen de estas drogas
El país que más cocaína produce es Colombia, seguido por Perú y Bolivia. Sin embargo, el país cafetero lidera este podio con amplia diferencia de sus seguidores. Colombia no para de aumentar, año tras año, sus cultivos de hojas de coca. Sus crisis internas, así como la de su país vecino, Venezuela, provoca que en las fronteras haya tal caos que no se pueda controlar ni regular el tráfico de drogas… por no hablar de la corrupción. Los narcotraficantes tienen a sueldo a la mayoría de los agentes policiales, bien por dinero, o bien por amenazas. Los cárteles encuentran cada vez más facilidades para colocar su droga en las costas latinoamericanas, y de ahí embarcar rumbo a Europa.
Para llegar a España, estas redes del narcotráfico llegan primero a las costas africanas, a través de barcos y/o avionetas. Todos estos transportes están trucados para que puedan cruzar el océano sin necesidad de repostar. Una vez en África, la droga se introduce directamente en contenedores (Algeciras, Valencia, Barcelona), o se tira al mar en fardos, localizados con pequeñas boyas, recogidos en narcolanchas que después llegan a la costa esquivando los controles policiales (Galicia, Campo de Gibraltar, Almería…).
Por otro lado, Gibraltar, territorio bajo soberanía británica, es un lugar en el que las organizaciones del narcotráfico pueden lavar su dinero con mayor facilidad. Así, al ser Marruecos el mayor productor mundial de hachís, las costas mediterráneas no dejan de ser protagonistas del desembarco de dicha sustancia, ya sea en los puertos comerciales o a través de planeadoras de los narcos, utilizando métodos similares a los anteriormente mencionados con la cocaína.
