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¿Qué diferencias existen entre ser diestro o zurdo? Esto dicen las estadísticas

La preferencia por usar la mano derecha en lugar de la izquierda se debe al funcionamiento diferenciado del cerebro

Mano derecha | Unespash

Las estadísticas muestran que aproximadamente una de cada diez personas es zurda, lo que significa que utilizan su mano izquierda como dominante.

Aunque pueda parecer que las diferencias entre las personas zurdas y diestras son insignificantes, en realidad existen notables discrepancias a nivel cerebral.

¿Cuáles son estas diferencias?

En términos físicos, no hay diferencias evidentes a simple vista. Sin embargo, las disparidades reales se hacen evidentes cuando se activa y se mueve una extremidad, lo que involucra el funcionamiento del cerebro. Por ejemplo, al utilizar el brazo derecho, se activa la corteza cerebral izquierda y viceversa.

Cada individuo tiene una preferencia por un lado del cuerpo, lo que se conoce como lateralidad, y usualmente esto se manifiesta alrededor de los 5 años de edad.

Esta inclinación puede estar influenciada por diversos factores, como causas evolutivas, genética e incluso la médula espinal.

La preferencia por un lado del cuerpo puede ser evidente en tareas cotidianas, como escribir o comer, y puede variar de una persona a otra.

En el caso de los ambidiestros, que representan solo el 3% de la población, su cerebro no muestra una clara dominancia por ninguno de los lados. Esto significa que no hay una especialización completa en ninguna de las extremidades para realizar tareas motoras.

¿Tienen diferente coeficiente intelectual?

La investigación indica que la diferencia en el coeficiente intelectual (CI) entre personas zurdas y diestras es insignificante.

Las discrepancias en la inteligencia entre estos dos grupos en la población general son tan pequeñas que no se consideran relevantes. Y es que ser zurdo o diestro no parece tener un impacto notable en la capacidad intelectual.

Mano izquierda. (Fuente Istock)

Los factores que influyen en el CI son variados y complejos, y la preferencia manual parece tener una influencia limitada en este aspecto.

Otras investigaciones

El estudio ofrece una visión detallada de la presencia de personas zurdas en diferentes niveles de capacidad cognitiva, aunque no llega a una conclusión definitiva.

Otros datos sugieren que los diestros podrían tener una ligera ventaja intelectual sobre los zurdos. Por ejemplo, un estudio de 2017, que involucró a 2,400 personas y se publicó en Neuroscience and Behavioral Reviews, encontró que, en promedio, los diestros tenían un coeficiente intelectual ligeramente más alto que los zurdos. Sin embargo, no se determinó si la preferencia manual estaba directamente relacionada con la inteligencia.

Dos investigadoras de la Universidad de Atenas en Grecia realizaron un análisis combinado de múltiples estudios para abordar esta cuestión. Llevaron a cabo tres análisis combinados donde comparaban:

  • Personas zurdas versus personas diestras.
  • Personas zurdas y ambidiestras versus personas diestras.
  • Personas ambidiestras versus personas diestras.

¿Algunos son mitos o verdad?

Personalidades icónicas como Miguel Ángel, Picasso, Leonardo da Vinci, Marilyn Monroe, Napoleón Bonaparte, Alejandro Magno, Jimi Hendrix y Paul McCartney eran zurdos.

A lo largo de la historia, las personas zurdas han recibido atención, a veces negativa, e incluso se les ha instado a cambiar su preferencia por la mano derecha debido a supersticiones.

A pesar de ello, surgieron mitos sobre las personas zurdas, como la idea de que viven menos tiempo o son inherentemente más creativas e inteligentes.

Para indagar en esta cuestión, un estudio comparó el rendimiento matemático de más de 2,300 estudiantes diestros y zurdos de entre 6 y 17 años.

El estudio destacó que los zurdos mostraban una habilidad sobresaliente en la resolución de problemas matemáticos más complejos, tales como la asignación de una función a un conjunto de datos.

Esta ventaja se observó especialmente en tareas que requerían un razonamiento abstracto y la capacidad de pensar de manera creativa para encontrar soluciones innovadoras.

Los investigadores sugirieron que esta inclinación hacia la creatividad y la resolución de problemas complejos podría atribuirse a diferencias en la estructura y el funcionamiento del cerebro de las personas zurdas en comparación con las diestras.