Cantabria somete a consulta pública previa la redacción del nuevo Plan de Gestión del Lobo
El anuncio del Gobierno regional ofrece un plazo de 15 días para que los interesados puedan presentar sus aportaciones
El Gobierno de Cantabria ha iniciado este lunes un proceso de consulta pública para la futura redacción del Plan de Gestión del Lobo, cuyo objetivo principal es la actualización del censo de manadas y ejemplares en la región. Esta revisión también incluirá un registro actualizado de los daños ocasionados por estos animales y una revisión del sistema de control de ejemplares, teniendo en cuenta los recientes cambios en la legislación estatal.
El anuncio, publicado en el Boletín Oficial de Cantabria, ofrece un plazo de 15 días a partir de este martes para que los interesados puedan presentar sus aportaciones.
En el contexto de la gestión del lobo, el control de ejemplares se considera una herramienta más dentro de un conjunto de medidas que buscan no solo compensar los daños en las explotaciones ganaderas, sino también fomentar un cambio en la percepción de este animal por parte de la ciudadanía.
Estas medidas incluyen la aplicación de estrategias preventivas y el reconocimiento de los servicios ambientales que proporciona la ganadería extensiva. La finalidad es minimizar el conflicto social y reducir la tensión en el manejo de esta especie.
Participación ciudadana
La actual vigencia del Plan de Gestión del Lobo es indefinida, pero debe ser revisado cada cinco años para evaluar su eficacia y realizar las modificaciones necesarias. Esta revisión se ha vuelto imprescindible tras la inclusión del lobo en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, una medida adoptada por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, que prohíbe la caza de estos animales y somete cualquier control de ejemplares a un régimen de excepciones.
La Consejería de Desarrollo Rural, dirigida por María Jesús Susinos, ha destacado la importancia de esta revisión, dada la expansión de la población de lobos y el incremento de los daños reportados. El nuevo Plan, que será formalizado mediante un decreto, deberá adaptarse a las condiciones dictadas por la normativa nacional y considerar un sistema de control adaptativo que responda a futuros cambios legislativos.