Un tratado obliga a España a ceder agua de dos embalses a Portugal pese a la sequía y el coste
La situación ha puesto sobre la mesa la necesidad de adecuar a las circunstancias climáticas del momento un convenio hispanoluso que data de hace 24 años
Los tratados internacionales hay que cumplirlos, incluso aunque las circunstancias no acompañen y la escasez de agua sea uno de los problemas económicos, sociales y ambientales que más preocupa en España estos meses. Los dos mayores embalses de la Cuenca Hidrográfica del Duero, el de Almendra, en el río Tormes, entre Salamanca y Zamora, y el de Ricobayo, en el río Esla, en Zamora tendrán que ceder en las próximas semanas más de la mitad del agua que tienen embalsada a Portugal para dar cumplimiento al convenio de Albufeira de regulación de caudales entre ambos países.
El acuerdo, que obliga al envío a Portugal de unos 870 hectómetros cúbicos del agua embalsada en los pantanos españoles de la cuenca del Duero, de los que unos 650 proceden de esos dos grandes embalses, ha generado importantes críticas de organizaciones agrarias y regantes, que no dudad en hablar de «expolio». Además, ha puesto sobre la mesa la necesidad de adecuar a las circunstancias climáticas del momento un convenio hispanoluso que data de hace 24 años.
A lo largo de las dos próximas semanas, antes de que el 30 de septiembre concluya el actual año hidrológico, España deberá haber cumplido con ese convenio y para ello tendrá que ceder a la cuenca portuguesa del Duero la cantidad de agua embalsada estipulada como mínimo anual en el acuerdo rubricado en noviembre de 1998 en la ciudad lusa que le da nombre, según datos de la Confederación Hidrográfica del Duero.
Para ello, y con el fin de que no se vea comprometido el abastecimiento de medio centenar de poblaciones de la comarca zamorana de Sayago que toman el agua del embalse de Almendra, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a través de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), se ha visto obligado a realizar una actuación de emergencia que cuenta con un presupuesto de 1,65 millones de euros.
Y es que, el que es el mayor pantano de la cuenca del Duero y el tercero con más capacidad de España, se encuentra este miércoles al 32,6% de su capacidad, con 865 hectómetros cúbicos y de él está previsto traspasar a Portugal 400 hectómetros cúbicos, lo que lo dejaría en cerca del 18% de su capacidad, sin contar con la incidencia de la pluviometría de las próximas semanas. En el segundo mayor embalse del sistema Duero, el de Ricobayo, está previsto que pierda otros 250 hectómetros cúbicos a lo largo de este mes, más de la mitad de su llenado actual, para quedarse en un 16% de su capacidad total.
Los regantes hablan de «expolio»
Los planes de la CHD para dar cumplimiento al marco de colaboración entre España y Portugal para la gestión de aguas del Duero contemplan igualmente desembalsar antes de finalizar el mes desde la provincia de León 120 hectómetros cúbicos de agua del embalse del Porma y 130 del de Riaño, que se suman a las aportaciones de agua ya realizadas desde los embalses salmantinos de Santa Teresa, Águeda e Irueña.
Desde Iberdrola, que tiene la concesión del aprovechamiento hidroeléctrico de los embalses de Almendra y Ricobayo, su delegado en Castilla y León, Miguel Calvo, ha indicado a preguntas de los periodistas en Zamora que es la CHD la que ordena esos trasvases por lo establecido en el convenio de Albufeira y la compañía hidroeléctrica cumplirá con lo que ordena la Confederación, sin que tengan mayor margen de actuación.
La asociación de comunidades de regantes de la cuenta del Duero (Ferduero) ha llegado a calificar de «expolio» esos trasvases de agua y ha lamentado que se hayan acordado sin diálogo con los regantes, a pesar de que ambos embalses están destinados a la producción hidroeléctrica principalmente.