Ni en invernaderos, ni en el campo: la fórmula perfecta para cultivar el romero en casa
El romero es una hierba muy versátil en la gastronomía, especialmente en para aderezar guisos y carnes al horno
El romero (Rosmarinus officinalis) es una planta aromática mediterránea de uso muy popular tanto en la cocina como en la medicina natural. Cultivarlo en casa no solo garantiza poder añadir esta hierba para condimentar tus guisos y aderezar tus carnes, sino también preparar remedios caseros. O aprovechar sus propiedades beneficiosas para la salud dándole un uso medicinal.
Cultivar romero en casa es una excelente forma de tener siempre a mano una hierba fresca y aromática, ideal para enriquecer tus platos y aprovechar sus múltiples beneficios medicinales. Su cultivo es sencillo, y con los cuidados básicos de luz, riego y protección contra el frío, esta planta se mantendrá durante mucho tiempo. Además, tanto sus usos culinarios como medicinales la convierten en una planta esencial en cualquier casa.
Cómo cultivar romero
El romero es un arbusto resistente y fácil de cuidar, ideal para quienes se inician en la jardinería. Aunque es posible sembrarlo a partir de semillas, la forma más sencilla de plantarlo es mediante esquejes, ya que las semillas tardan mucho en germinar. Usa una maceta pequeña con buen drenaje. Para evitar el encharcamiento, cubre el fondo con una capa de grava o piedras de río.
A continuación, añade tierra enriquecida con turba y caliza, ya que al romero le beneficia la tierra ligeramente alcalina. Planta el esqueje en la maceta y asegúrate de que esté en una zona con buena iluminación. El romero necesita luz, pero durante las primeras semanas es mejor evitar la luz solar directa, especialmente en las horas de mayor intensidad.
Durante las primeras semanas, mientras al esqueje le nacen las raíces, es importante mantener la tierra húmeda pero no empapada. Pasadas tres semanas, el riego debe ser más espaciado, ya que el romero tolera bien la sequía. Cuando las raíces se hayan establecido, puedes trasplantar el romero a una maceta más grande. Asegúrate de que la planta siga recibiendo suficiente luz, preferentemente en una ventana soleada. No es necesaria la poda, pero si tu planta de romero crece mucho y ocupa demasiado espacio, puedes podar las ramas que superen los 40 centímetros de longitud.
Si vives en una zona donde las temperaturas bajan mucho en invierno, es recomendable mantener el romero en el interior de casa, ya que esta hierba aromática no tolera bien las heladas.
Uso culinario del romero
El romero es una hierba muy utilizada en la gastronomía, especialmente en la cocina mediterránea. Su aroma fuerte y su sabor ligeramente amargo lo convierten en el condimento ideal para sopas, carnes y guisos. Aunque también es utilizado para decorar los platos.
El uso de romero es un clásico en los platos de carne asada, especialmente de cordero, pollo y cerdo. Puedes agregar ramas frescas o secas al asar o hacer un guiso de carne de añojo para darle un aroma único. También se puede adobar un costillar combinando el romero con otras hierbas aromáticas. Como guarnición, las patatas condimentadas con romero al horno es uno de los acompañamientos más tradicionales de los asados en España.
Además, el romero nos permite preparar aceites y vinagres aromatizados con esta planta aromática. Solo hay que añadir unas ramas de romero fresco en una botella de aceite de oliva o vinagre, y dejar macerar durante unas semanas. Así, la ramita de romero se mantendrá siempre en buen estado.
También es utilizado para hacer infusiones. La más popular es la infusión de romero mezclada con limón y miel, que se sirve muy caliente, casi humeante. Así está planta desprende todas sus propiedades.
Uso medicinal del romero
Además de sus usos culinarios, el romero tiene una larga historia de empleo en la medicina tradicional debido a sus propiedades beneficiosas para la salud. Por ejemplo, es conocido por estimular la producción de bilis, lo que facilita la digestión de las grasas. Por eso, beber una infusión de romero después de las comidas puede ayudar a aliviar la indigestión y la hinchazón.
Los aceites esenciales del romero tienen efectos antiinflamatorios y se pueden utilizar para aliviar dolores musculares y articulares. Para ello, se puede preparar una infusión concentrada y aplicarla con un paño sobre la zona afectada. Como el romero es conocido por mejorar la circulación sanguínea, lo que puede ayudar en el tratamiento de problemas como la sensación de manos y pies fríos. O masajear las extremidades con aceite de romero, que es una técnica tradicional para activar la circulación.
El romero también se utiliza en cosmética natural. Su infusión se emplea como suavizante para el cabello, ya que se cree que fortalece el cuero cabelludo, reduce la caída del cabello y estimula su crecimiento. Por otra parte, inhalar el aroma del aceite esencial de romero o añadir unas gotas en un difusor puede tener efectos relajantes y mejorar la concentración. Y algunos estudios han sugerido que el romero puede ayudar a mejorar la memoria y la claridad mental.