La Asamblea Nacional de Francia aprueba prohibir los castigos físicos a los niños
La Asamblea Nacional de Francia ha aprobado una proposición de ley para prohibir cualquier tipo de castigo corporal a los niños, con tan solo un voto en contra, de una diputada de extrema derecha, y tres abstenciones. La propuesta quiere prohibir “la violencia física y verbal, los castigos corporales y los sufrimientos morales infligidos por los titulares de la autoridad paternal”.
La Asamblea Nacional de Francia ha aprobado una proposición de ley para prohibir cualquier tipo de castigo corporal a los niños, con tan solo un voto en contra, de una diputada de extrema derecha, y tres abstenciones. La propuesta quiere prohibir “la violencia física y verbal, los castigos corporales y los sufrimientos morales infligidos por los titulares de la autoridad paternal”.
Según los datos de la Fundación para la Infancia, el 85% de los padres en Francia recurren a castigos físicos con fines supuestamente educativos.
Si se finaliza la tramitación de la medida, que incluye la prohibición de los cachetes que algunos padres defienden como parte de la educación de sus hijos, Francia se convertirá en el país número 55 del mundo en prohibir los castigos corporales a los niños.
La iniciativa, que cuenta con el apoyo del Gobierno de Emmanuel Macron, partió del partido centrista MoDem y supone un nuevo intento de asentar esta medida en la legislación, después de que el año pasado fuera anulada una disposición de contenido similar por motivos formales.
La propuesta, que ahora debe continuar su tramitación parlamentaria, va acompañada de una demanda al Gobierno para que haga un estudio sobre el estado de la cuestión para septiembre del año 2019.
El texto se incluirá en las disposiciones que se leen a las parejas en el momento de celebrar la boda y se indicará que “los titulares de la autoridad parental la ejerzan sin violencia”. Además, destacará que los padres “no deben utilizar con los hijos medios como la violencia física, verbal o psicológica, los castigos corporales o la humillación”.
Los partidarios de esta ley argumentan que estas prácticas, entre las cuales están los cachetes, tienen consecuencias para la salud física y mental para los niños.