Un tribunal de Moscú ha condenado este lunes al líder opositor ruso Alexei Navalny a 15 días de prisión, acusado de organizar la concentración pacífica que el domingo congregó a miles de personas en la capital rusa. La protesta contra la corrupción fue duramente contestada por la policía, que detuvo a cerca de un millar de personas.
De nada han servido las peticiones de la Unión Europea y de Estados Unidos al Kremlin para que ponga en libertad a los detenidos, en cumplimiento de los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución rusa de libertad de expresión y de reunión.
Navalny fue condenado por resistirse a su detención durante la manifestación, poco después de ser multado con 20.000 rublos (unos 325 euros) por haber organizado una concentración no autorizada, según la decisión del tribunal Tverskoi de Moscú.
«Llegará el momento en el que seremos nosotros quienes les juzguemos», escribió en Twitter el opositor y bloguero anticorrupción, que prevé enfrentarse a Vladimir Putin en las elecciones presidenciales de 2018, al inicio del proceso judicial.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, denunció el movimiento de protesta como «una provocación y una mentira», destacando que las autoridades habían prohibido la mayor parte de las manifestaciones.
Junto a Navalny fueron detenidas al menos 1.030 personas en Moscú, según las últimas cifra facilitadas este mismo lunes por las autoridades. La mayoría fueron puestas en libertad por la noche tras ser acusadas de cometer una «infracción administrativa» por participar en una manifestación no autorizada. Entre los detenidos había muchos menores, según la organización no gubernamental OVD-Info. El Kremlin también acusó a los organizadores de haber prometido a los menores «recompensas financieras en caso de detención por las fuerzas del orden» durante las protestas, aunque no aportó ninguna prueba al respecto.
Denuncias de corrupción
Navalny instó a los ciudadanos a manifestarse tras publicar un informe en el que acusa al primer ministro Dmitri Medvedev de estar al frente de un imperio inmobiliario financiado por oligarcas. La investigación se presentó en formato audiovisual y fue vista más de 12,5 millones de veces en YouTube pero no provocó reacciones por parte de las autoridades.
«La gente no ha obtenido las respuestas que exigían sobre la corrupción y es por eso que seguiremos saliendo a la calle», declaró Navalny ante el tribunal.
Durante la manifestación del domingo, su organización, el Fondo de Lucha contra la Corrupción (FBK), anunció que había sido objeto de un registro y que sus empleados fueron trasladados a comisarías.
En octubre de 2013, Navalny obtuvo un inesperado 27,2% de los votos en las elecciones municipales de Moscú, pero su candidatura a la presidencia podría no concretarse por su reciente condena a cinco años de prisión en suspenso por un presunto delito de desvío de fondos.