'The First Descendant': ¿hubiera tenido tanto éxito de no ser gratuito?
El nuevo ‘free to play’ de Nexon ha tomado el mercado por asalto, con más de 240.000 jugadores simultáneos en Steam
Captura de pantalla de 'The first descendant' | Nexon
Parece que estamos ante la sorpresa del verano, y algunos incluso dirían que se trata de la ganga del año. Este nuevo título free to play multiplataforma de la desarrolladora Nexon ha logrado hacerse con un buen número de seguidores durante su primera beta, batiendo récords hasta el punto de obligar a ampliar los servidores del juego, y obligando a que la compañía regale mejoras debido al atasco sufrido en algunas operaciones de micropagos no completadas.
Yendo al grano, The First Descendant es un shooter multijugador de acción futurista en tercera persona al estilo Destiny, juegos a los que se viene denominando looter-shooter por tener un gameplay basado en disparos con recompensas de botín. Algo parecido a lo que pasó con el rock y sus derivados: trash, hardcore, metal, etc., que a la gente le gusta redefinir. La trama no puede estar más de moda entre los shooters de ciencia ficción:
«Los Vulgus cruzaron el espacio-tiempo hacia nuestra dimensión, destrozaron nuestros castillos y utilizaron a los humanos como sacrificio o sujetos de experimentación. Después aparecieron los colosos, destruyendo nuestro planeta tal y como lo conocíamos. Los humanos que lograron sobrevivir se reunieron en Albion, donde se preparan para la última batalla».
Pues ahí estamos nosotros, en Albion, eligiendo uno de los cuatro personajes disponibles para empezar la aventura. Cada uno de ellos dispone de características y habilidades diferentes en cuanto a defensa, ataque, habilidad especial, barrera anti-disparos… En total podremos obtener hasta veinte descendientes —así se llama a los héroes— a base de encontrar determinados objetos como cápsulas, células mejoradas, estabilizadores y códigos del personaje; o bien comprándolos en la tienda, que es la forma más rápida.
Pero claro, de algún sitio han de obtener beneficios los creadores en un juego gratuito de estas características. Efectivamente, de los micropagos. Existen personajes que podremos comprar, siempre y cuando paguemos por ellos hasta 90 euros en el caso de los más avanzados y pintureros. Los entusiastas del farmeo van a disfrutar de lo lindo con los numerosos menús para mejorar los personajes y las armas, como un álbum de cromos vacío, pero no tan fácil de completar, pues bucear entre tanta extraña información puede resultar extenuante. No me interesa nada saber cuáles son las características de una partícula de ion poliatómico, solo me interesa saber para qué vale o cómo conseguirla si acaso.
Una vez en la gigantesca base militar de Albion, recorreremos sus estancias y largos pasillos para conocer los lugares principales por los que más de una vez pasaremos, pues, al fin y al cabo, será nuestro cuartel general entre misión y misión. Buscaremos personajes para conversar con ellos sobre algún objetivo e iremos directamente a la terminal de operaciones de infiltración para buscar el próximo objetivo en el mapa y teletransportarnos al lugar exacto de los nueve destinos que podemos encontrar.
Diferentes localizaciones con un gran acabado tanto en interiores como en exteriores, al igual que el de los personajes, diseñados con mimo, no tanto los enemigos. Curiosa la semejanza de algún personaje femenino de sensual vestimenta con Eve, la protagonista de Stellar Blade. Ambos juegos pertenecen a estudios coreanos, y quizá el paradigma de pegar tiros con una jovencita en minifalda y una mochila de osito resulte importante para ellos.
A la hora de la acción, podemos portar hasta tres armas que intercambiaremos con un golpe de botón, pero dispondremos de un arsenal ingente para adquirir y sus correspondientes modificaciones, armas ligeras, rifles de francotirador y armas pesadas, aparte del gancho que tenemos disponible desde el primer momento para encaramarnos a las alturas. Justo es decir que el manejo del arma es una delicia, suave, cómodo y efectivo, esto se traduce en que lo más satisfactorio es precisamente eso, los momentos en los que nos dedicamos a la acción, entre horda y horda de enemigos. Lo mismo ocurre ante los jefes finales, contra los que habrá que emplearse a fondo estudiando sus movimientos para idear un plan de ataque sólido.
Hasta cuatro jugadores en cooperativo pueden efectuar misiones conjuntas, aunque también tenemos la posibilidad de escoger entre privado y público algunas de las operaciones. A pesar de solo disponer de dos modos de dificultad, es un juego que se hace bastante asequible desde el primer momento para ir progresando sin demasiado esfuerzo.
The First Descendant está disponible para Xbox One, Xbox series, PlayStation 4, PlayStation 5 y PC.
