¿Piensa realmente Telecinco en 'Operación Triunfo' para dar un revulsivo a la cadena?
Alessandro Salem rebaja el entusiasmo de Mediaset España por su coste e irregularidad: la última edición del ‘talent show’ marcó un gris 12,2%
Concursantes de la última edición de 'Operación Triunfo'. | Zuma Press
El relevo de Paolo Vasile por Alessandro Salem al frente de Mediaset España no ha conllevado una revolución en materia de contenidos para Telecinco, que sigue la hoja de ruta marcada por el directivo que lideró este proyecto que ha sumado beneficios en 22 años por valor de 3.600 millones de euros, 178 en 2022.
La contención de gasto en contenidos, los buenos números de los canales temáticos (principalmente, Energy, FDF y Divinity) y su liderazgo grupal en el campo del target comercial explican la competitividad económica del grupo, a pesar de la crisis de su matriz, Telecinco, que apunta una caída de más de cinco puntos en dos años y encadena 17 derrotas consecutivas mensuales frente a su principal rival, Antena 3.
La pérdida de Pasapalabra, la incapacidad la compañía para encontrar un sustituto de garantías al judicializado Gran Hermano y el desgaste de Sálvame invitaron al propio Vasile a trazar un plan que pasa por girar hacia contenidos más blancos. Véanse el lanzamiento de los concursos vespertinos 25 palabras y Reacción en cadena, y los preparativos de un serial diario que podría competir contra El hormiguero en el access prime time, Mía es la venganza.
‘Operación Triunfo’, ¿símbolo de una nueva etapa?
Salem ha tanteado el mercado con la intención de buscar nuevos productos de corte blanco y familiar que contribuyan a que Telecinco aumente su competitividad y rebaje su dependencia de los formatos del corazón o realities.
Fuentes de Mediaset apuntaban en un principio a la posible compra de Operación Triunfo como «símbolo de la nueva etapa». Pero en los últimos tiempos, explican, «han crecido las dudas sobre la idoneidad del formato por su alto precio y escasa regularidad».
La última entrega de este reality show musical, emitida por TVE en 2020, tuvo un coste para la Corporación pública de 14.021.044 euros, IVA incluido, que incluyó 14 galas en directo de 150 minutos, 14 entregas del programa El chat de OT, de 60 minutos, 65 resúmenes diarios de 25 minutos y 65 vídeos compactados de cinco minutos de duración pensados para difundir en las redes sociales.
La audiencia del formato no estuvo a la altura de su precio al promediar 1.655.000 espectadores y el 12,2% de share. Este dato apuntó a la fama que estigmatiza a OT que, tal y como señalan fuentes del sector, «es un formato con datos irregulares que solo funciona de forma cíclica».
Estas mismas voces apuntan que cinco de las once entregas que se han emitido en España desde su estreno en el año 2001 no han cumplido sus expectativas: la tercera edición emitida por TVE, que provocó que el programa no fuese renovado, la séptima y octava en Telecinco, que también aparcó su producción, y la undécima, emitida por la pública hace tres años.
OT, además, es noticia por haberse convertido en objeto de controversia en los últimos tiempos porque sus creadores, Josep Maria Mainat y Toni Cruz, han demandado a la productora Veranda TV por el supuesto del plagio del formato. Ambos productores, ya fuera de Gestmusic, sostienen que Veranda TV ha plagiado OT con Eufòria de TV3.
Mainat afirma que este concurso «ha sido exportado a más de 70 cadenas de TV de todo el mundo, y todas han reconocido nuestra autoría. Es desconcertante que el plagio suceda precisamente en Cataluña y en TV3«. «La propiedad intelectual de una idea es de sus autores y nadie puede violar este derecho haciendo pasar éxitos ajenos como creaciones propias», lamentan ambos productores.
Veranda TV, por su parte, ha lamentado «la extemporaneidad de la denuncia», ya que TV3 estrenó Eufòria hace más de un año y la querella se presentó hace unos días.
Nueva etapa
La nueva Telecinco no está cerrada a comprar a factorías alejadas de su ecosistema de ‘productoras de confianza’, ya que Salem ha iniciado una ronda con empresas que en los últimos años habían sido vetadas por su antecesor.
Boomerang TV, tras llevarse La Voz a Atresmedia, y Shine Iberia, liderada por Macarena Rey (implicada indirectamente en los conflictos entre Mediaset y Pasapalabra) han recibido audiencia por parte del nuevo CEO de Mediaset España, tal y como desveló El Confidencial Digital.
El interés de Mediaset España en relación con Shine Iberia se habría focalizado en Me resbala, que salió de Atresmedia en 2021, ya que la salida de la joya de la corona de la productora, Masterchef, «no es fácil de que salga de TVE«, explican desde el grupo radicado en Fuencarral.
Y es que la Corporación pública abonará al menos casi 35 millones de euros a Shine Iberia durante 2022 gracias a las distintas versiones de Masterchef y al fallido talent musical Cover Night, que se emite sin demasiado brillo en las noches de los sábados.
Cambios en la cúpula
La compra de un killer format por parte de Mediaset España podría marcar el rumbo de una nueva etapa en la que Telecinco está apostando por el inmovilismo en su parrilla, quizá porque la mano derecha de Vasile, Manuel Villanueva, se mantiene al frente de Contenidos.
Salem sí que ha rejuvenecido el cuadro directivo de la mano del fichaje Eduardo Escorial (nuevo director de Programas de actualidad), María Zambrano (que lidera los datings y realities) o Sandra Fernández (recién estrenada al frente del área de Comunicación).
Por contra, Leonardo Baltanás ha perdido el cargo como encargado de la producción de Contenidos; Mariano Blanco ha salido de la dirección de Programas de actualidad al igual que su número dos, Gemma Carrasco; Baldomero Toscano ha dejado de ser el director de Programas de entretenimiento; Miguel Santiago Vila del área de Nuevos proyectos; y Mirta Drago de Comunicación.
