‘Respect’, ‘Think’ y ‘Baby I love you’, suenan con más fuerza que nunca en las calles de Detroit, la ciudad que vio crecer y convertirse en cantante a ‘la reina del soul’, Aretha Franklin. Su funeral ha sido celebrado este viernes y se ha convertido en un gran tributo musical, que ha contado, entre otros, con las actuaciones de Ariana Grande. También han intervenido el expresidente Bill Clinton –que ha acudido junto a su esposa, Hillary Clinton– y el reverendo Jesse Jackson, entre otros.
Franklin murió la semana pasada, a los 76 años, a causa de un cáncer de páncreas en esa ciudad, donde comenzó su carrera cantando de niña en el coro de góspel de la iglesia bautista New Bethel. Su despedida ha sido en el Greater Grace Temple
“Apoyaba a los movimientos sociales, pagaba por sus cumpleaños, no le importaba pasar calor si iba a cantar… era la reina del mundo”, ha expresado una de sus amigas y oradora del evento. “Nuestra relación con Aretha comenzó como groupies de ella…sí, ella es la voz del siglo…pero también trabajó por años. Ella vivió con coraje, no sin miedo, pero superando sus miedos; con poder, no sin debilidades, pero superándolas”, ha dicho Clinton en un mensaje dirigido a los jóvenes.
El martes y miércoles miles de admiradores acudieron al Museo de Historia Afroamericana para darle un último adiós. La ‘reina del soul’, hasta en el féretro, ha lucido como una artista. Cada jornada ha llevado un vestido distinto y, quienes la han visto, afirman que descansa con una gran sonrisa. El martes la vistieron de rojo con zapatos de charol a juego; el miércoles, de celeste con calzado dorado; y ayer, de rosa. Así se despide a una reina de la música.