Europa pide confinar a las mascotas para evitar la expansión de la viruela del mono
Si se produce transmisión de humano a animal y el virus se propaga entre los diferentes animales, existe el riesgo de que la enfermedad se vuelva endémica
En los últimos días ha saltado la voz de alarma en todo el país después de que se informara de la detección de varios casos de la conocida como viruela del mono, una enfermedad viral zoonótica, que se transmite de animales a humanos, con síntomas similares a los observados en el pasado en pacientes con viruela, aunque clínicamente menos grave. En este contexto, el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) ha pedido que las mascotas mamíferas de los ciudadanos infectados por el virus del simio permanezcan en cuarentena para evitar que la enfermedad se convierta en endémica en todo el continente. Actualmente, el virus solo es endémico en 12 países de África Central y Occidental: Benín, Camerún, República Centroafricana, República Democrática del Congo, Gabón, Ghana (identificada solo en animales), Costa de Marfil, Liberia, Nigeria, República del Congo, Sierra Leona y Sudán del Sur.
La población europea no ha recibido desde la década de 1980 ninguna vacuna contra esta enfermedad, al considerar que la viruela había sido erradicada. Sin embargo, Europa se enfrenta ahora al virus con millones de habitantes sin inmunizar y una gran preocupación derivada de la vulnerabilidad de los más pequeños.
Hasta el momento se han confirmado ya más de 150 positivos fuera del continente africano, 36 de ellos en España. En total, 14 países europeos ya han notificado positivos, entre los que se encuentran Bélgica, Francia, Italia, Suecia, Alemania, Suiza, Austria, Escocia, Noruega, Dinamarca y Eslovenia. También han detectado casos en Canadá, Australia, Estados Unidos e Israel.
Colaboración entre salud pública humana y veterinaria
El organismo de control de enfermedades europeo ha advertido de que, si se produce transmisión de humano a animal y el virus se propaga entre los diferentes animales, existe el riesgo de que la enfermedad se vuelva endémica. Para evitarlo, la institución sanitaria propone una colaboración estrecha entre las autoridades de salud pública humana y veterinaria para gestionar a las mascotas expuestas al contagio y prevenir que esta afección llegue a un entorno salvaje o, con mayor riesgo, a animales dedicados a la alimentación humana.
Prevención a nivel europeo y búsqueda de vacunas
El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades ha recordado que la transmisión entre personas se produce por el contacto estrecho y el intercambio de fluidos, por eso es importante aislarse en casa y comunicarlo tanto a los centros de salud correspondiente como al entorno más cercano. De esta manera, los países de la Unión Europea deberán centrarse en una acción a tres bandas que permita una rápida identificación, rastreo de contactos y notificación de nuevos casos de la viruela del mono. Además, debe mejorar la capacidad de diagnóstico para los ortopoxvirus (la familia a la que pertenece esta enfermedad) y a revisar la disponibilidad de vacunas contra la viruela, antivirales y equipos de protección personal para los profesionales sanitarios.
El laboratorio danés Babarian Nordic está suministrando vacunas a Reino Unido y España. Mientras, la Agencia Europea del Medicamento (EMA), ya está analizando posibles tratamientos y vacunas disponibles contra la viruela del mono.
Cómo se contagia la viruela del mono
La llamada Monkeypox se transmite a las personas por distintos animales salvajes. Sin embargo, la enfermedad tiene también una propagación secundaria, más limitada, a través de la transmisión de persona a persona. En los casos iniciales, la infección se produce por contacto directo con la sangre, los líquidos corporales o las lesiones de la piel o las mucosas de animales infectados.
A pesar de su propagación, la viruela del mono presenta una tasa de letalidad que se sitúa entre el 1% y el 10% y la mayoría de defunciones se producen en niños pequeños, tal y como ha informado la Organización Mundial de la Salud (OMS). Asimismo, los grupos de edades más jóvenes parecen ser más susceptibles a esta enfermedad símica.
No existe un tratamiento específico recomendado para la viruela del simio. Sin embargo, varios estudios de observación han demostrado que la vacunación contra la viruela con la vacuna vaccinia tiene una eficacia de alrededor del 85 % en la prevención de la viruela del simio. Por desgracia, este tipo de vacunas ya no está disponible para el público en general.
Los síntomas más comunes
El período de incubación de la viruela del simio suele ser de seis a 13 días, pero puede oscilar entre cinco y 21 días. La enfermedad suele durar entre dos y cuatro semanas. De la misma manera, la infección se puede dividir en dos periodos.
- Periodo de invasión: con una duración de entre cero y cinco días, se caracteriza por ser un tiempo en el que el paciente presenta fiebre, dolor de cabeza intenso, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor de espalda, dolores musculares y falta de energía. En concreto, la inflamación de los ganglios linfáticos es una característica distintiva de la viruela símica en comparación con otras enfermedades como varicela, sarampión o viruela común, que inicialmente pueden parecer similares.
- La erupción de la piel generalmente comienza entre el primer y el tercer día después de la aparición de la fiebre. La erupción tiende a concentrarse más en la cara y las extremidades que en el tronco.