Los Cebada Gago protagonizan un tercer encierro tenso con un herido por asta
El tramo de Telefónica fue el más peligroso, con un astado que hizo por embestir a varios corredores
Los toros gaditanos de Cebada Gago hicieron honor a su fama de peligrosos en el tercer encierro de los Sanfermines. Una carrera accidentada y algo más larga (2 minutos y 53 segundos) de las vividas hasta ahora en esta edición de las fiestas de Pamplona. El sprint al coso de la capital navarra se saldó con cinco solicitudes de traslado a centros hospitalario, incluida una herida por asta en brazo izquierdo y dos contusiones con deformidad.
La manada arrancó el recorrido muy agrupada, pero el orden rápidamente se rompió. El grupo comenzó a disgregarse a la altura de la Plaza Consistorial y en la curva de Mercaderes un astado colorado rompió filas e hizo alarde de velocidad y de derrotes a lo largo de Estafeta. La calle más larga del encierro fue escenario de tensiones pero también de buenas carreras por parte de algunos mozos.
Hacia el final tuvo lugar uno de los momentos de mayor peligro de la carrera, cuando simultáneamente un animal resbaló en el último tramo de Estafeta y otro morlaco viró y embistió a varios corredores en Telefónica, que tuvieron que ayudarse mutuamente para no ser empitonados. La llegada a la plaza también fue más caótica que en jornadas pasadas, con esos dos mismos hermanos negros rezagados y que se volvieron hacia los mozos antes de enfilar toriles.
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