La Fundación del Español Urgente (FundéuRAE) ha presentado este lunes las candidatas a convertirse en la palabra del año 2020, elegidas entre los más de 250 términos a los que ha dedicado algunas de sus recomendaciones diarias sobre el uso del español.
En contexto: esta será la octava ocasión en la que la Fundación, promovida por la Agencia Efe y la RAE, elija su palabra del año. La primera de ellas fue escrache, en el 2013, y siguieron selfi(2014), refugiado (2015), populismo (2016), aporofobia (2017), microplástico (2018) y los emojis (2019).
Antes de la elección definitiva, que tendrá lugar el martes 29 de diciembre, la Fundación del Español Urgente da a conocer una lista con 12 candidatas que deben cumplir varios requisitos.
Por un lado, que sean términos que hayan estado, en mayor o menor medida, presentes en el debate social y en los medios de comunicación. Por otro, que, por su formación, significado o dudas de uso, ofrezcan interés desde el punto de vista lingüístico y hayan sido, por tanto, objeto de alguna de las recomendaciones que ha publicado diariamente la FundéuRAE durante el año.
Con estos criterios, la Fundación ha elegido las 12 candidatas de este año:
• Coronavirus
• Infodemia
• Resiliencia
• Confinamiento
• COVID-19
• Teletrabajo
• Conspiranoia
• Un tik tok
• Estatuafobia
• Pandemia
• Sanitarios
• Vacuna
Desde el sustantivo coronavirus[contexto id=»460724″], término común para referirse a cualquier virus de la familia Coronaviridae y que desde el mes de febrero se ha venido empleando para hacer referencia al SARS-CoV-2, al nombre de la enfermedad que este causa, COVID-19, sigla que ha dado rápidamente la vuelta al mundo, se está lexicalizando a una velocidad inusitada y ha provocado también muchas dudas con respecto a su género gramatical.
Las semejanzas y diferencias entre los términos epidemia y pandemia han colocado a esta última entre las 12 elegidas, así como al sustantivo teletrabajo, que el Diccionario de la lengua española define como «trabajo que se realiza desde un lugar fuera de la empresa utilizando las redes de telecomunicación para cumplir con las cargas laborales asignadas».
El confinamiento, que ha obligado a la reclusión forzosa de los habitantes en sus casas durante tantos meses este año, es otra de las voces seleccionadas. También la voz infodemia, que da nombre a la sobreabundancia de información (alguna rigurosa y otra falsa) sobre un tema.
Además, este año ha estado muy presente en nuestras vidas la aplicación TikTok, tanto que el sustantivo tiktok, escrito en minúscula y con letra redonda, se considera válido para referirse a los vídeos cortos que se comparten con ella.
Otro de los neologismos que se encuentra entre las palabras elegidas es estatuafobia, un término empleado en las informaciones sobre las protestas contra la discriminación racial y que significa «aversión o rechazo a las estatuas», así como la voz conspiranoia, adecuada para referirse a la tendencia a interpretar determinados acontecimientos como fruto de una conspiración, y muy citada en las noticias sobre las elecciones en Estados Unidos.
La lista de 12 candidatas la completan las voces resiliencia, la capacidad de adaptación y recuperación frente a una situación adversa; sanitarios, acortamiento válido y frecuente de personal sanitario, y vacuna, protagonista de las portadas de estos últimos meses.