¿La mágica sopa de puerros de 'Emily in Paris' realmente sirve para adelgazar?
La famosa serie de Netflix ha avivado la fama del puerro y asocia su consumo con la pérdida de peso gracias a un caldo. Vemos si es real o ficción
Si has visto la segunda temporada de Emily in Paris sabrás de lo que hablamos. En el cuarto episodio, una pareja de agricultores franceses aparecen en la agencia donde trabaja Emily –la protagonista, interpretada por Lilly Collins– para intentar incrementar las ventas del puerro en Estados Unidos.
Los clientes, que presentaron el puerro como «un alimento versátil, propio de la gastronomía francesa y que merece un reconocimiento internacional», no sabían bien cómo podía encajar este producto entre los americanos.
Al final, y tras un intercambio de ideas, los trabajadores de la agencia de publicad y marketing decidieron que deberían orientar la campaña hacia la ‘mágica sopa de puerros para adelgazar‘, ya que «a los americanos les encantan las dietas milagro y los atajos».
«No hay método mágico para perder peso, sería algo que Gwyneth Paltrow diría en Goop», dice Emily, y los agricultores se emocionan por el hecho de que podrían aparecer en la famosa página web de la actriz estadounidense –en la que, por cierto, existe realmente un artículo dedicado a los efectos diuréticos de la mágica sopa de puerros, así como una empresa que te lo lleva a casa ya hecho–. Emily duda sobre ello, ya que «no hay dietas milagro que sean sanas» y, además, la sopa de puerro «tarda mucho en hacerse».
Por eso, al final, deciden comercializar sopa de puerros ya hecha y embotellada, algo que, según la agencia publicitaria y los propios agricultores franceses, encantará a los americanos.
Todo esto ha puesto a la sopa de puerros en primera línea y, curiosamente, la realidad vuelve a superar a la ficción, y no solo por Goop, sino porque realmente existe y sí que sirve para adelgazar. Te lo contamos en las siguientes líneas.
La mágica sopa de puerros ya existía antes de ‘Emily in Paris’
El término «mágica sopa de puerros» no se sabe muy bien cuándo nace –y es mucho antes de que Paltrow la mencionase–. Se estima que la artífice de su creación fue Mireille Giuliano, autora francoamericana y ex ejecutiva corporativa de LVMH, quien lo habría citado por primera en su bestseller Las mujeres francesas no engordan, publicado a principios de los 2000.
En su libro, Giuliano cuenta que las francesas disfrutan comiendo pan y pasteles, bebiendo vino y tomando comidas de tres platos, y que a pesar de eso no aumentan de peso. Todo ello gracias a estrategias sencillas y una docena de recetas de lo más suculentas que la autora explica en su libro, y en el que se incluye la ya famosa mágica sopa de puerros.
Al respecto, Giuliano explica en su texto que los puerros son un diurético suave, y que beber una taza de la consabida sopa cada dos o tres horas, durante 48, proporcionaría una pérdida de grasa inmediata. La sopa en cuestión no puede tomarse durante más de dos días.
La receta
Así, Giuliano fue la que (se cree que) inventó la sopa de puerros para adelgazar, y por eso la receta que expone en su libro es la que se utiliza de manera universal:
- Compramos 1 kilo de puerros y cortamos las hojas superiores de color verde oscuro y la raíz.
- Cortamos los puerros en rodajas y los enjuagamos con agua fría en un colador para eliminar la suciedad.
- Introducimos los puerros en una olla grande y los cubrimos con agua.
- Los cocinamos a fuego lento, sin tapa, durante 20-30 minutos.
- Pasado ese tiempo, colamos el caldo en un recipiente con una tapa herméticamente cerrada.
- Por último, añadimos unas gotas de aceite de oliva virgen extra, zumo de limón y un poco de sal y de pimienta. Y ya estaría.
Cuando ya tenemos la sopa mágica, la guardamos en el frigorífico y la tomamos, como hemos dicho, cada dos o tres horas durante dos días. Todo ello según lo que cuenta la autora.
¿Realmente nos ayuda esta sopa a perder peso?
«Dado que la dieta mágica de la sopa de puerros consta, únicamente, de consumir caldo durante 48 horas, es probable que experimentemos algo de pérdida de peso», asegura el nutricionista Gavin Van De Walle, quien afirma que una taza de esta sopa aporta apenas 15 calorías.
Así, pues, si echamos cuentas, en 48 horas habremos consumido solo 240 calorías, lo que prácticamente se considera como ayunar. Durante este estado, nuestros músculos y el hígado agotan el glucógeno y el agua del cuerpo –o, lo que es lo mismo, entramos en cetosis–, lo que, irremediablemente, nos hará adelgazar rápido en los primeros días.
Sin embargo, no perderemos grasa, como afirma la autora, ya que al cuerpo no le da tiempo. Además, una vez que retomemos nuestra dieta habitual, es más que probable que recuperemos todo el peso perdido los días precedentes.
A pesar de todo esto, y como cualquier plan de choque o dieta detox, sí que es recomendable la mágica sopa de puerros si queremos ‘limpiar’ o ‘desintoxicar nuestro cuerpo, añade Van De Walle, quien afirma que también tiene riesgos, como la posibilidad de «padecer trastornos alimentarios».
Los puerros son muy buenos para la salud
Al margen de todo ello, los puerros son muy sanos, ya que contienen mucha agua (el 90%) y muchos minerales (hierro, magnesio, calcio y potasio), vitaminas (A y C) y fibra. Además, vitamina E, que es esencial para mantener la elasticidad y el brillo de la piel.
A esto se suma que son ricos en compuestos organosulfurados, que tienen fuertes efectos antioxidantes, antiinflamatorios y de fortalecimiento del sistema inmunológico, lo que se ha asociado con un menor riesgo a padecer enfermedades cardíacas, diabetes y algunos tipos de cánceres.
Más allá de la sopa: otras formas de consumir puerros
Los puerros, como bien dijeron los agricultores de Emily in Paris, son versátiles, lo que le permite cocinarlos e incorporarlos a nuestra dieta de numerosas maneras.
Normalmente, solo se consumen las partes blancas y claras de los puerros (el tallo), ya que las hojas de color verde más oscuro son amargas. A pesar de eso, muchos utilizan esas hojas para darle sabor a caldos caseros.
Así, pues, podemos comer puerros:
- En sopa, como te hemos detallado con anterioridad.
- Asados (los limpiamos y los metemos en el horno con verduras).
- En una ensalada.
- Como acompañante del hummus (riquísimo) o de otras salsas sanas.
- En purés (los puerros quedan muy bien en puré con patatas).
Como vemos, la mágica sopa de puerros realmente existe y sí que ayuda a adelgazar, pero, como dice Emily, las dietas milagro no son la solución a largo ni a medio plazo.