Corinne Diacre, seleccionadora francesa de fútbol femenino, está entre la espada y la pared
Varias renuncias de jugadoras, entre ellas la capitana Wendie Renard, han precipitado una situación abocada a la dimisión de la entrenadora nacional
Vientos de cambio en la Federación francesa de fútbol. El pasado 28 de febrero, el ahora expresidente del ente deportivo galo, Noël Le Graët, anunciaba su dimisión, salpicado por varias acusaciones de acoso sexual. Este hombre fuerte del fútbol francés, que ya fue apartado de su cargo en enero por diversas razones, entre las que destacan su mala gestión y sus continuas salidas de tono –por ejemplo, sus polémicas declaraciones sobre Zinedine Zidane–, lleva tiempo en el foco. Sobre todo, desde que salieran a la luz los resultados de una autoría que resaltaban su gestión centralista y su «comportamiento inapropiado hacia las mujeres». Le Graët, que lo niega todo, dirige ahora la oficina de la FIFA en París.
El sustituto de le Graët es, de momento, Philippe Diallo, quien ejercía como vicepresidente de la Federación. Su primer desafío tiene que ver con el equipo nacional femenino, y es que deberá resolver cuanto antes la situación de la seleccionadora Corinne Diacre, después de que varias jugadoras internacionales, entre ellas la capitana del equipo, anunciaran su retirada de la Selección en un gesto público contra la entrenadora.
Diallo prometió el pasado martes que resolvería la situación «en un plazo muy corto», apremiados por la celebración, este verano, del Mundial de Australia-Nueva Zelanda. «He querido que un grupo de miembros del Comité Ejecutivo pueda hacer una auditoría con todas las partes y hacer algunas recomendaciones en un plazo muy corto, para preparar lo mejor posible la Copa del Mundo», anunció. Se espera que el futuro de Diacre, en el cargo de seleccionadora nacional desde 2017, se dilucide en los próximos días.
Quién es Corinne Diacre, una leyenda del fútbol femenino francés
Corinne Diacre es una leyenda del fútbol femenino francés. Durante su carrera como futbolista, jugó como defensa central y es considerada una de las mejores jugadoras de la historia del balompié galo. Diacre militó la mayor parte de su carrera en el ASJ Soyaux, equipo en el que fue una pieza clave en la defensa, convirtiéndose en leyenda y capitana del equipo. Con su Selección, jugó 121 veces, otro hito. Teniendo en cuenta el periodo en el que desarrolló su carrera, principalmente los años 90 y principios de los 2000, nunca pudo disfrutar de una carrera profesional, algo que no cortó sus ganas de hacer algo grande en el fútbol francés.
Una vez retirada, en el 2007 emprendió su carrera como entrenadora. Diacre dirigió a varios clubes, incluyendo el ASJ Soyaux, el equipo de su vida. Es en el Clermont Foot 63 donde hace historia. El equipo, que militaba entonces en la Segunda División francesa, decidió contratarla como primera entrenadora, convirtiéndose en la primera mujer en dirigir a un equipo profesional de fútbol masculino en Francia. Lo hizo durante tres temporadas.
Su trabajo como entrenadora de la Selección francesa femenina de fútbol es lo que la ha convertido en un personaje mediático en Francia. Fue en agosto de 2017 cuando fue nombrada seleccionadora, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar ese puesto.
Bajo su dirección, la Selección francesa llegó a los cuartos de final del Mundial de 2019, donde jugaba en casa, pero finalmente fue eliminada por Estados Unidos, que terminaría proclamándose campeona del mundo una vez más. Diacre también llevó al equipo a la Eurocopa de Inglaterra de 2022, donde las galas llegaron a semifinales, en las que fueron eliminadas por Alemania. La Selección francesa siempre está en la terna de favoritas, sin embargo nunca logra alcanzar una final o ganar un trofeo, y eso que cuenta con algunas de las mejores jugadoras del mundo en sus posiciones.
Métodos polémicos
A pesar de los numerosos obstáculos que Corinne Diacre ha superado a lo largo de su carrera, incluyendo los techos de cristal en el mundo del fútbol, y de su amplia experiencia como entrenadora –a diferencia de Jorge Vilda, cuyo currículum se limita a la RFEF–, la seleccionadora francesa no ha escapado de la controversia y las críticas, en particular por parte de algunas de sus jugadoras.
Algunas de las que han estado a las órdenes de Diacre han criticado públicamente su enfoque, calificándolo de demasiado disciplinado y riguroso, alegando además que puede ser excesivamente severa. Otra controversia relacionada con Diacre tiene que ver con sus decisiones tácticas. Algunos de sus críticos argumentan que cuenta con jugadoras que no están en su mejor forma o que no se ajustan bien al estilo de juego del equipo. También ha habido críticas por no dar oportunidades a ciertas jugadoras, especialmente aquellas que juegan en la liga francesa, lo que ha derivado en acusaciones de favoritismo y de falta de equidad en el seno de la Selección.
Además, en septiembre de 2021, varias exjugadoras de la Selección francesa femenina de fútbol acusaron públicamente a Diacre de comportamiento inapropiado, acoso y discriminación. Estas acusaciones incluían comentarios sexistas y racistas, algo que llevó a la Federación gala a iniciar una investigación.
Avalancha de renuncias
La previsible caída de Diacre se ha visto precipitada por las renuncias en el seno de la Selección francesa. La capitana, Wendie Renard, anunció el viernes de la semana pasada que quería dar «un paso atrás» en el equipo nacional y que no participaría en las condiciones actuales en el Mundial que se celebrará en julio. La decisión de la capitana fue secundada por dos de las grandes estrellas del equipo, que siguieron sus pasos. Hablamos de Kadidiatou Diani y Marie-Antoinette Katoto, dos de las atacantes del combinado galo. Esas condiciones, claro está, tienen que ver con Corinne Diacre.
El anuncio de las tres jugadoras cayó como una bomba, a solo cinco meses de una Copa del Mundo en la que las francesas esperan conseguir su primer título internacional, para el que tendrán que enfrentarse a Brasil, Panamá y Jamaica en la fase de grupos. Renard no especificó las razones de su marcha, pero todo el mundo entendió a qué se refería, y la lectura fue que se abría un nuevo capítulo en su complicada relación con la seleccionadora, quien le quitó el brazalete de capitana a su llegada en 2017, para después devolvérselo en septiembre de 2021.
Poco después, Katoto y Diani publicaron un comunicado similar al de su compañera. Ambas pidieron «cambios necesarios» en la dirección del equipo nacional, en sendos comunicados publicados en las redes sociales. «Las palabras de nuestra capitana Wendie me empujan a hablar de la situación en el equipo», rezaba el mensaje de Katoto, actual estrella del PSG.
No son las primeras jugadoras que se apean de la Selección de Corinne Diacre. No es, ni siquiera, el primer caso de estas características. Hace unas semanas, publicábamos en THE OBJECTIVE un artículo en el que explicábamos que el caso de ‘las 15 rebeldes’ de la Selección española no es aislado en el mundo del fútbol femenino. Cada vez más federaciones, como la canadiense, la española y, ahora, la francesa, viven sus particulares conflictos. En algunos casos, las denuncias son más explícitas. Las canadienses y las francesas, por ejemplo, han hablado claro, como ya hicieron en su día las estadounidenses. Las españolas, sin embargo, no han terminado de explicar los motivos que están detrás de su descontento, algo que ha generado polémica e incomprensión por parte de algunos aficionados.
El caso de Francia tiene sus peculiaridades. Lo que es meridiano es que no se entiende cómo una Selección que tiene su base en una de las mejores ligas del mundo –si no la mejor– no alcance cotas más altas. No podemos olvidar que el equipo más laureado en Europa es francés, el Olympique de Lyon, que aunque cuenta con un buen número de jugadoras extranjeras, también tiene a otras tantas francesas y una importante cantera nacional. La búsqueda de la excelencia, el ansia competitiva y la lucha contra conductas tiránicas llevan a estas jugadoras a elevar la voz en un mundo que cada vez las escucha más. ¿Pasará en el caso del conflicto de nuestra Selección? No parece posible, la RFEF ha blindado al seleccionador. La Federación francesa, por el contrario, sí parece estar lista para escuchar a sus jugadoras y dar el siguiente paso.