El Sevilla se 'abraza' a su competición fetiche para salvar la temporada tras ganar a la Juve
Los goles de Suso y Lamela ponen al equipo hispalense en la final de la Europa League en la que se enfrentará a la Roma de Mourinho
Los jugadores del Sevilla celebran el segundo gol del partido. | Reuters
Del infierno a la gloria en apenas dos meses. El Sevilla FC se ha clasificado para la final de la Europa League este jueves después de vencer a la Juventus de Turín (2-1), en un partido en el que la constancia y la cabeza fría le ha servido al equipo hispalense a remontar un partido que se le había puesto muy a la contra después del gol de Vlahovic en el minuto 65.
Tres años después y después del paso de tres entrenadores por el banquillo esta temporada, el Sevilla completa la hazaña en su competición fetiche. Es difícil entender el embrujo que une a los hispalenses con esta competición, pero después de estar la mayor parte de la temporada coqueteando con el descenso, jugarán la final del próximo 31 de mayo en Budapest.
Envueltos en un ambiente que los ha llevado en volandas todo el partido, el Sevilla de Mendilibar ha sabido manejar el partido a excepción de esos momentos de duda en la segunda parte, cuando un gran Vlahovic logró picar la pelota por encima de Bounou y enviarla al fondo de la red. Tras ello, escasos minutos más tarde, un zurdazo imparable de Suso puso las tablas en el marcador y forzó una prórroga en la que los de Nervión remataron el partido.
Un centro desde la banda izquierda puesto con exquisitez por Bryan Gil en el punto de penalti encontró la cabeza de Eric Lamela, que con un gran testarazo logró poner por delante por primera vez al Sevilla en el partido de vuelta.
Así pues, el Sevilla se enfrentará el próximo 31 de mayo en Budapest a la Roma de Jose Mourinho.
La Roma contiene al Bayer Leverkusen
Por su parte, la AS Roma se clasificó para disputar la final de la Liga Europa, merced a su empate sin goles en casa del Bayer Leverkusen y haciendo bueno su ventaja del 1-0 del partido de ida, en un ejercicio de contención ante las constantes embestidas sin premio del equipo alemán.
El BayArena vivió el segundo duelo en ocho días entre el español Xabi Alonso y el portugués José Mourinho, como jefes de banquillo en dos equipos con trayectorias similares este curso. Así, ambos luchan en sus Ligas por ocupar posiciones que den acceso a competición europea, pero sabedores del suculento atajo a través de esta Liga Europa.
Con ello en mente, el cuadro de Leverkusen salió a por todas en ataque para remontar el gol de renta que lucía su rival. Incluso estrelló un balón en el travesaño de la portería romana, al cuarto de hora, por obra de Moussa Diaby tras una internada en el área y que culminó con un potente derechazo.
Más de una veintena de disparos realizó el Bayer Leverkusen, todos infructuosos, mientras que el equipo visitante solamente tiró una vez y ni siquiera fue a puerta. De tal modo, a la conclusión del partido, la frustración de Xabi Alonso en el banquillo alemán contrastó con la alegría de un José Mourinho que lleva a la Roma hacia nuevos hitos.
La pasada campaña, un gol de Nicolò Zaniolo dio a la escuadra ‘giallorossa’ su primer título europeo oficial, venciendo al Feyenoord (1-0) en la final de la Conference League. Ya en el año 1961, la Roma conquistó la Copa de Ferias, pero dicha competición no cuenta con el reconocimiento de la UEFA a todos los efectos.
