THE OBJECTIVE
El archivo del buitre

Los humos de José María García contra Lorenzo Sanz (y van…)

Van siendo muchas recogidas de cable de Supergarcía

El 12 de abril de 2011 José María García fue anunciado como fichaje de Veo7 por el director de aquella cadena de televisión, a la sazón Eduardo Inda, que, arropado por su jefe de entonces, Pedro J. Ramírez, aseguró que García participaría todas las semanas en La Vuelta al Mundo.  

En aquella primera intervención en Veo7 Supergarcía dio espectáculo, como se esperaba, poniendo a caer de un burro a sus enemigos de siempre, José María Aznar, el Grupo Prisa y Florentino Pérez (que le volvió a demandar, causando que García le tuviera que abonar otros 12.000 euros). El punto destacado de esa intervención es que José María García aseguró que tenía pruebas de que Esperanza Aguirre estaba financiando una escisión regional al Partido Popular. Algo que, de ser verdad, hubiera valido, como poco, su expulsión del PP. García aseguró que la semana siguiente traería a las pruebas, los testigos, de tal afirmación. Un primer indicio de que esa afirmación categórica iba a desvanecerse es que el periódico El Mundo recogió al día siguiente la intervención de Supergarcía en su tele, describiendo como había zurrado a Aznar, a Florentino y a Prisa pero curiosamente –o no tanto– no hizo ninguna referencia a sus acusaciones contra Esperanza Aguirre. Ni que decir que la semana siguiente volvió a aparecer García ni aparecieron las pruebas ni los testigos prometidos

En una ocasión este juntaletras coincidió con García y al preguntarle por qué no reapareció con aquellas pruebas, este se justificó con el cierre de Veo7. Esa intervención fue el 12 de abril y La Vuelta al Mundo siguió emitiéndose hasta julio de este año, y luego aún quedaría una temporada con la marca de Con el Mundo a Cuestas de Veo-TV.

El 11 de febrero de 2018 José María García era entrevistado por Jordi Évole en La Sexta, ahí acusaba sin pelos en la lengua a un constructor que «había ocupado cargos importantes en el ministerio» de haberle confesado que había sobornado al Partido Popular a cambio de que le adjudicaran contratos en la Constructora. El diálogo con Évole a continuación no tiene desperdicio:

Évole: Financiaba ilegalmente a ese partido ese constructor…

García: Un constructor importante y poderosísimo…

Évole: ¿Había tenido cargos políticos? ¿Igual había sido ministro?

García: Había sido ministro.

Évole: ¿En otra época de este país? Son muchas pistas. ¿Empieza por Villar y acaba por Mir? 

García: Empieza por V y acaba por R. 

No daba su DNI, pero si dice que ha sido un constructor muy importante y poderoso, propiedad de alguien que ha sido ministro cuyo apellido empieza por V y acaba por R, no parece que pudiera haber muchas dudas al respecto.

Villar Mir, cuya familia se despide estos días definitivamente de cualquier vínculo con su antaño querido imperio, se tomó muy mal aquello y, aparte de llamar en el Congreso «completo mentiroso» a García, le metió una demanda.

Supergarcía tuvo que ir a declarar a la Audiencia Nacional y, a la salida, explicó a los tribunales lo que había afirmado ante el juez. Aquellas declaraciones no tuvieron desperdicio: «Yo no he dado ningún nombre. La deducción de Villar Mir es una deducción de Jordi Évole. (…) No tengo la constancia de que fuera Villar Mir, no tengo ninguna prueba de que fuera Villar Mir».

¿Pero a qué prueba se refería si según sus declaraciones a Salvados era el propio Villar Mir el que se lo había dicho a la cara? O, si queremos ser puristas, el propio «exministro constructor cuyo apellido empezaba por V y acababa por R» el que le había reconocido que pagaba mordidas al PP. Todo quedaba en humo.

Esta semana los lectores de THE OBJECTIVE han podido saber que Supergarcía aseguró en COPE que tenía una caja fuerte con una grabación que demostraba que durante la etapa de Lorenzo Sanz el Real Madrid había vendido un partido del Castilla, vinculándolo en el escándalo tanto al propio Sanz como a sus hijos y asegurando estar dispuesto a contarlo todo. La familia Sanz anunció inmediatamente medidas legales contra Butanito. Una jornada después García volvía a intervenir en el mismo programa de radio para pedir disculpas y asegurar que tanto Sanz como su familia eran honradísimos. Eso sí, sin aclarar qué era ese audio y a quien implicaba entonces, aunque visto la solidez de sus acusaciones se comprende que no quiera dar nombres.

Alguien que, por méritos propios, quiere quedar en la historia del periodismo quizá debería reflexionar si le conviene seguir aquel consejo del personaje de cómic: «Menos humos, señor».

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D