El Frente Polisario avisa de «consecuencias» si se juega algún partido del Mundial en el Sáhara
«Será un nefasto acto con graves consecuencia para la paz y la seguridad en la región», ha asegurado Brahim Ghali
El secretario general del Frente Polisario, Brahim Ghali.
El Frente Polisario ha advertido de «graves consecuencias» si se incluyen los territorios saharauis ocupados por Marruecos en el Mundial de fútbol de 2030, que acogerá el país magrebí junto a España y Portugal.
«Será un nefasto acto con graves consecuencia para la paz y la seguridad en la región, especialmente a la luz del actual estado de guerra que vive la región», en referencia a la ruptura del alto el fuego entre las partes desde noviembre de 2020, ha apuntado el secretario general del Frente Polisario, Brahim Ghali.
Ghali ha remitido una carta al secretario general de la ONU, António Guterres, en el que ha condenado los actos con los que Marruecos «quiere imponer los hechos consumados por la fuerza en los territorios saharauis ocupados» con la intención de «normalizar» y «legitimar la ilegalidad ocupación» de su país, que la ONU considera como «territorio pendiente de descolonización».
Por otra parte, Ghali ha pedido a los países organizadores «cumplir con sus obligaciones y abstenerse de emprender cualquier acción o cualquier forma de asistencia al Estado ocupante marroquí que pueda conducir a la consolidación de una situación ilegal en el territorio del Sahara Occidental».
La antigua colonia española del Sáhara Occidental fue ocupada por Marruecos en 1975 pese a la resistencia del Frente Polisario, con quien se mantuvo en guerra hasta 1991, cuando ambas partes firmaron un alto el fuego con vistas a la celebración de un referéndum de autodeterminación.
Pero las diferencias sobre la elaboración del censo y la inclusión o no de los colonos marroquíes ha impedido hasta el momento su convocatoria. Además, tras una acción militar marroquí contra activistas saharauis en Guerguerat, el 14 de noviembre de 2020, el Polisario consideró el alto el fuego roto.
Los saharauis sufrieron un revés cuando el Gobierno español apoyó el plan de autonomía marroquí, un cambio de postura que fue calificado de traición por el Frente Polisario y que desató también las críticas de Argelia.
