Negligencias y mentiras: Luis de la Fuente 'regala' a Brahim a Marruecos
Si la RFEF puede reunirse con Yamal o con Le Normand, por qué no destilar una pizca de interés en el hispano-marroquí
Brahim Diaz durante un partido con el Real Madrid | Europa Press
No se dejen intoxicar. Brahim Díaz deseaba jugar con la selección española y si no lo vamos a ver vestido con ‘La Roja’ en los duelos frente a Colombia y Brasil (ni nunca más) es, simple y llanamente, por decisión del seleccionador Luis de la Fuente. Díaz, malagueño de nacimiento y con sangre ibérica y marroquí corriendo por las venas, siempre tuvo claras sus prioridades.
Y no lo digo sólo por la icónica instantánea que corre por las redes portando la camiseta nacional con 10 añitos. Lo destaco porqué acudió a todas las convocatorias de ‘La Rojita‘ desde su más tierna infancia. Sub 17, Sub 19 o Sub 21, daba igual: lo importante era jugar con España. Nadie tenía que contárselo a Luis de la Fuente. De hecho, se trata del entrenador que más veces lo citó para las categorías inferiores. Lo cual, hace todavía mas inexplicable su proceder.
El seleccionador sabe que Brahim renunció a jugar el Mundial de 2018 con Marruecos por esperar a España. Conoce que repitió modus operandi en Qatar 2022 entonando un segundo «no» a los africanos y que, incluso, negó una tercera vez a nuestros mediterráneos vecinos en la pasada Copa de África. Todo con un único objetivo: jugar con la selección española. Algo que ya no va a suceder por la negligente postura de la RFEF.
¿Sobrados de talento?
Cualquiera podría pensar que España va sobrada de talento después de renunciar en los últimos tiempos a futbolistas seleccionables como Alejandro Garnacho, Nico Paz o el propio Brahim Díaz pero lo cierto es que no es así. Es más, el combinado nacional, en los últimos tiempos, se ha caracterizado por lo contrario. Nacionalizó a los franceses Le Normand y Laporte por la escasez de centrales y se llegó a reunir con el también marroquí Lamine Yamal para dejarle claro que no se decidiese por ‘Los leones del Atlas’ ya que Luis de la Fuente bebía los vientos por él.
Este último aspecto, el de colmar de ‘cariño selectivo a jugadores que dudan’ , ha supuesto la gota que ha colmado el vaso para un Brahim por el que nadie de la Federación se interesó como debería. Aunque previamente sucedieron más cosas. Convocar a Bryan Zaragoza, tras una buena actuación contra el Barça, por delante del madridista otra de ellas.
La cuestión que todo futbolero se plantea en estos momentos es el porqué de renunciar gratuitamente a un pelotero como Brahim Díaz y regalárselo a Marruecos. Llámalo, pruébalo, obsérvale sobre el terreno de juego y, sino te encaja, no lo vuelvas a citar. ¡Pero guárdate esa bala de plata! Si la RFEF puede reunirse con Yamal, si de la Fuente lo hizo con Le Normand o si Albert Luque, director de Fútbol de la misma, puede visitar a lesionados como Gavi por qué no destilar una pizca de interés en el hispano-marroquí.
No hay una respuesta lógica. Se trata de una actitud negligente se mire por donde se mire.
Luis de la Fuente miente
Les puedo asegurar que no han sido días agradables para Brahim Díaz. Y es que escuchar insinuaciones sobre «exigencias» o «chantajes» de boca del seleccionador nacional español no es plato de buen gusto. Sobre todo, cuando son «mentira» tal y como me ha asegurado el entorno más íntimo del futbolista.
Esta indignación del círculo más cercano surge de dos vertientes principales. La primera, de la ausencia de contacto verbal entre el entrenador y el jugador como así ha reconocido Luis de la Fuente. «Convendremos en que si ni siquiera han llegado a hablar, es complicado que Brahím le haya exigido nada» me explican.
La segunda brota de su supuesta decisión por jugar con Marruecos. El seleccionador afirma que «no llamo a Brahím porque el 9 de marzo renuncia a jugar con España». Y esta es la madre del cordero ya que los que están cerca de Díaz dan una versión muy diferente de la historia: «Brahim no renuncia a España en ningún momento. El 9 de marzo la FIFA emite un comunicado en el que se informa de que el futbolista tiene doble elegibilidad. Si hubiera querido llamarle, le podría haber llamado. Luis de la Fuente ha mentido y sabe que ha mentido».
Lo que les decía: negligencias, mentiras y un talento malagueño que Luis de la Fuente regala a la selección que nos echó del último Mundial. No me extrañaría que en Marruecos estén ‘choteándose’ de nosotros en estos precisos momentos.
