BBVA reduce en España su plantilla en 1.500 trabajadores más que lo pactado en el ERE
La entidad disminuye en 4.485 el número de empleados en 2021, de los que 2.888 se circunscriben al expediente colectivo
BBVA ha recortado en España 1.552 trabajadores más que lo pactado en el ERE con los sindicatos. La entidad disminuyó en 2021 su plantilla en 4.485 empleados en nuestro país, una cifra que supera con creces los 2.935 despidos de tope acordado en el expediente colectivo el pasado mes de julio.
Según señalan fuentes del banco a THE OBJECTIVE, esta diferencia se explica porque el ERE solo afectaba a la unidad bancaria y al centro corporativo y que, por tanto, en otras filiales (como las aseguradoras o las firmas tecnológicas) se han producido bajas de personal ordinarias. Es decir, prejubilaciones y retiros anticipados que se hacen generalmente cada año, derivadas de la «rotación habitual» de una compañía tan grande.
Además, sostienen que una parte de la disminución se debe a prejubilaciones realizadas en la primera parte del año, antes de la puesta en marcha del ERE y otra, a ventas de alguna división, como la consultora tecnológica a Quipro. Las mismas fuentes precisan que las salidas por el ERE fueron de 2.888.
Con este recorte, la fuerza laboral de BBVA en España se sitúa en 24.843 personas, lo que supone una merma del 15,2% con respecto a diciembre de 2020. Una disminución que, de acuerdo con lo declarado por sus directivos, no volverá a ocurrir en 2022.
«No más reducciones de plantilla en 2022»
El presidente de BBVA, Carlos Torres, señaló este jueves en la presentación de resultados que en este ejercicio «no habrá una nueva reducción de plantilla». El consejero delegado añadió asimismo que tampoco se esperan más cierres de sucursales.
La entidad clausuró 471 oficinas de las 480 acordadas. Los nueve que faltan se ejecutarán, eso sí, en los próximos meses. Con ello, BBVA dispondrá de una red física de venta que se situará en los 1.896 puntos.
El ajuste de plantilla se suma al descenso sustancial de los agentes financieros (colaboradores externos que comercializan sus productos en las zonas rurales o gestionan carteras de altos patrimonios). BBVA ha bajado el número de estos autónomos un 22%, en contraposición con el incremento del 25% del Santander. En la actualidad los agentes del banco de origen vasco suman algo más de 400.
BBVA, como el resto de los bancos, pusieron en marcha el año pasado expedientes colectivos para despedir a cerca de 19.000 empleados, con el objetivo de adaptarse al entorno digital y ahorrar costes operativos. El propósito del banco es rebajar los costes en 250 millones de euros anuales con el ERE, en torno a un 10% de los actuales.
El banco azul siempre ha defendido su apuesta por los servicios digitales, unos servicios que están dando resultados positivos. El presidente del banco, de manera recurrente, hace hincapié en el volumen de transacciones y de ventas que realiza el banco por los canales remotos. Aunque, del mismo modo, recalca la importancia que tiene la red física para los servicios de valor añadido para los clientes.
En concreto, las ventas digitales de BBVA en España representan el 70% del total en unidades y un 50% en valor económico. Unas cifras que le colocan al frente de la banca digital en nuestro país, pero que están todavía por debajo de las que consigue en otros mercados donde opera.
Compras de fintech y neobancos
La estrategia online de la entidad, no solo se traslada a nivel operativo, sino que también forma parte de su política de operaciones corporativas. BBVA cuenta con un capital sobrante de unos 2.200 millones de euros una vez descontado el dinero para recompras de acciones y la opa sobre el turco Garanti. Un dinero que, a juicio de Torres, se destinará a oportunidades que puedan surgir en las fintech y los neobancos, principalmente en Europa.
Torres considera que en el mundo digital en el que vivimos, que es un fenómeno generalizado, la visión sobre posibles compras se focalizará en este tipo de operaciones. De esta manera, daba casi por hecho que el banco no volverá a intentar negociar una fusión con el Sabadell.
En los últimos años, BBVA ya ha llevado a cabo diferentes incursiones en este campo. En la actualidad tiene el 40% del noebanco británico Atom, el 16% del germano Solarisbank y el 10% del brasileño Neon. Además, dispone de un fondo de capital, Propel, en el que invierte en fintech, seis de las cuales se han convertido en unicornios.
Para desembarcar en nuevos países, el banco también está en disposición de replicar la iniciativa impulsada en Italia, que no es otra que entrar con un banco digital desde cero con su propia marca. Pero la intención es comprobar primero los resultados que tenga, tanto en captación como en satisfacción y rentabilidad, en el país transalpino.