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BBVA se alía a tres grandes plataformas de coches para proteger su trono en México

La entidad española pretende impulsar la financiación de automóviles y blindar el reinado en el país, amenazado por la venta de Banamex por parte de Citi

BBVA se alía a tres grandes plataformas de coches para proteger su trono en México

Sede de BBVA | BBVA

BBVA no está dispuesto a ceder su trono en México tan fácilmente. La venta de Banamex (filial de Citi) es una clara amenaza al reinado que disfruta desde hace quince años, por lo que despliega todas sus armas para protegerse. Una de ellas es el acuerdo que ha alcanzado recientemente con tres de las principales plataformas de venta de coches en el territorio azteca.

Según ha podido saber THE OBJECTIVE, ha llegado a una alianza estratégica con los portales Mercado Libre, Solocautos y Seminuevos, con el fin de potenciar su negocio de financiación de vehículos. Una actividad en la que ya es líder con una cuota de mercado del 25%.

El pacto de BBVA con estas plataformas forma parte de su política de impulsar los canales digitales, que son más rentables, ya que los términos del mismo estipulan el análisis y concesión de la financiación en línea de los vehículos, vía remoto, gracias al desarrollo de las herramientas de banca abierta.

La amenaza de su liderazgo en juego por Banamex

El acuerdo permitirá a BBVA apuntalar su crecimiento, siempre y cuando la formalización de préstamos se incremente sustancialmente, y hacer frente al nuevo gran jugador que surja de la adquisición de Banamex.

El grupo que se haga con el negocio minorista se convertirá previsiblemente en el segundo gran jugador. Depende de quién sea, se colocará relativamente cerca de la posición que controla BBVA en el país. Su cuota general de mercado alcanza casi el 24%.

El grupo de origen vasco ha señalado que analizará sus opciones, aunque con la boca pequeña y sin gran interés, debido a a este peso de dominio y a que su estrategia se centra en crecer vía orgánica y a través de adquisiciones de fintech y neobancos.

El Santander también ha indicado que estudiará la operación para poder participar, pero que para ello no va a ampliar capital. De esta manera, ha rebajado sus expectativas ya que una compra, de acuerdo con los analistas, le obligaría a emitir acciones para poder financiarla. Se estima que el valor de Banamex alcanza un mínimo de 4.000 millones, aunque algunas fuentes elevan el precio que pedirá Citi a los 10.000 millones.

El Santander, de tomar este negocio, sería uno de los jugadores que pondrá en aprietos el liderazgo de BBVA en México, ya que con esta operación llegaría al entorno del 23% de la cuota en el mercado latinoamericano. Un porcentaje que sería ligeramente inferior en el caso de que sea el mexicano Banorte el que se haga con la filial del conglomerado norteamericano.

Las presiones del Gobierno azteca

El Gobierno azteca de Andrés Manuel López Obrador vigila de cerca el proceso de venta de Citi por la magnitud de la transacción y porque se trata de un antiguo banco público. El propio mandatario no solo está pidiendo a los inversores mexicanos a que se hagan con Banamex, sino que ha advertido con bloquear o torpedear una adquisición por grupo extranjero.

El llamamiento ha tenido respuesta por parte de empresarios y banqueros mexicanos, que han levantado la mano para participar en la subasta que se abrirá en primavera. Desde el dueño de Banorte hasta el magnate Carlos Slim, propietario de la entidad Inbursa.

Hace unos días López Obrador ha reiterado su deseo para que Banamex vuelva a ser de propiedad local y ha asegurado que utilizará las medidas regulatorias a su alcance para imposibilitar que sea traspasado a un inversor foráneo.

Citi no ha aportado aún ningún tipo de información sobre cómo realizará la operación. Y pocos detalles han trascendido. Tan solo algunos apuntes que ha avanzado el propio presidente de México. En alguna de sus intervenciones recientes el mandatorio azteca ha llegado a señalar que la desinversión será en bloque, es decir, que Citi cederá todo el negocio a un mismo comprador, descartando así la colocación de cartera por segmentos.

Una partición de Banamex haría más factible una compra por parte de los dos bancos españoles, aunque BBVA está más centrado en el crecimiento orgánico. De hecho, el año pasado captó en México más de dos millones de clientes, buena parte de ellos por los canales remotos. Afianzando, así, un trono que se ha puesto en riesgo por la decisión de Citi con Banamex.

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