THE OBJECTIVE
Economía

Telefónica redobla la presión a la CNMC tras caer un 2% sus ingresos minoristas en España

El operador se suma a las críticas que llevan varios meses planteando los otros dos principales actores del mercado: Orange y Vodafone

Telefónica redobla la presión a la CNMC tras caer un 2% sus ingresos minoristas en España

José María Álvarez-Pallete, durante la presentación de los resultados de 2021. | TELEFÓNICA

Telefónica ha vuelto a levantar la voz contra las autoridades de la competencia española y europea, subiendo un nuevo peldaño en la intensidad de sus críticas al marco regulatorio establecido en el continente. Este jueves ha sido el propio presidente ejecutivo de la compañía, José María Álvarez-Pallete quien ha vuelto a pedir las mismas reglas para todos los operadores y una equiparación de las obligaciones. 

En la rueda de prensa de sus resultados anuales, Pallete fue más allá y apuntó contra la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) pidiéndole directamente que revise los remedies impuestos a Telefónica tras la compra de Digital+ en 2015. Estos remedies limitan su participación en la puja de derechos audiovisuales y le obligan a compartir sus contenidos con su competencia a precios que a veces están por debajo del mercado.

Unas críticas que ya se han trasladado al regulador español, según ha confirmado THE OBJECTIVE y que van más allá de los requisitos impuestos a Movistar+. El operador español ha trasladado a la CNMC la necesidad de modificar completamente el marco regulatorio y levantar las restricciones para Telefónica, no solo en el ámbito audiovisual, sino que en el de las redes tanto móviles como fijas.

Movistar+ y Netflix

«Nosotros ya no somos el incumbente», dicen en Telefónica refiriéndose al nuevo mercado en el que ellos tienen menos cuota de mercado que hace una década y donde los nuevos actores no son fiscalizados por el regulador. Telefónica tiene el carácter de incumbente a efectos regulatorios al heredar el viejo monopolio de la telefonía y todas las redes construidas en la etapa de la compañía como operador público. 

Sin embargo, tras la liberalización del sector a finales del siglo pasado y la entrada de actores como Vodafone, Orange -que han competido en igualdad de condiciones y han construído sus propias infraestructuras- todo ha cambiado. Del mismo modo, la proliferación de nuevos actores que han redoblado la presión comercial han generado un escenario en el que la actual regulación de la CNMC no hace más que fomentar la extrema competitividad que ha llevado al sector a tener una década de deflación. 

En la reunión con analistas de este jueves, Pallete recordó que según los datos de la CNMC, Movistar+ es el principal actor del mercado con 3,7 millones de clientes. Sin embargo, agregó que este registro no incluye a los nuevos operadores como Netflix, Amazon Prime, HBO o Disney+, los que suman prácticamente 10 millones de abonados en España. De hecho, solo Netflix casi duplicaría los datos de Telefónica.

Mismas reglas

«Necesitamos las mismas reglas, no menos reglas, sino que las mismas para todos los actores que compiten con nosotros en el mercado audiovisual, pero también en el digital y en el de innovación tecnológica», demandó Pallete.

Telefónica también está de acuerdo con se flexibilicen las condiciones para las fusiones, que se deje de beneficiar a los operadores pequeños que no invierten en redes y que se acabe con la política de desguazar a las compañías que intentan fusionarse, obligándoles a vender en el mercado activos a precio muy por debajo del mercado.

Éstas demandas son las mismas que vienen pidiendo desde hace años Orange y Vodafone. Primero Vodafone pidió que se acabaran las condiciones para comprar el fútbol hace ya cuatro años y luego le siguió la operadora francesa; y recientemente han movido ficha para pedir que se facilite un eventual escenario de fusiones. 

Telefónica y los ‘remedies’

Si hay muchos remedies (condiciones para aprobar la fusión) una integración pierde atractivo y se engorda a pequeñas operadoras que vuelven a comenzar con la guerra comercial que desangra al sector. Por tanto, cuando las operadoras piden un escenario propicio para las integraciones se refieren a que la CNMC modifique su histórica política de bloqueo de fusiones.

Unas declaraciones y una ofensiva que se ha intensificado tras una nueva oleada de resultados adversos para las principales operadoras españolas. Según los resultados presentados este jueves, el Ebitda de Telefónica España se redujo un 33% aunque la operadora lo atribuye a las provisiones de 1.382 millones de euros por el Plan de Salidas Incentivadas (PSI) pactado a finales del año pasado

Por su parte, los ingresos llegaron a los 12.417 millones de euros en 2021 en el mercado español, un 0,1% de crecimiento. Sin embargo, se produjo una caída del 2,1% de sus ingresos mayoristas hasta los 9.699 millones, prueba de que la guerra comercial y la canibalización de precios también pasa factura al principal operador. 

Clientes convergentes

Telefónica España ha podido contener las caídas gracias a los clientes de empresas, cuyos ingresos mejoraron un 0,7%, pero no pudo evitar que sus clientes convergentes cayeran un 4% en un año (hasta 4,64 millones de contratos) y que el Arpu (ingreso por cliente) se redujese un 2,5% hasta los 89,2 euros. 

En el mercado español también perdió en el último año un 4,1% de sus clientes de banda ancha, un 2,6% de los de móviles y un 5,5% de clientes de televisión de pago. En este último caso, han pasado de superar los cuatro millones al finalizar marzo de 2020 hasta los actuales 3,71 millones, una pérdida de 300.000 accesos.

Una situación más preocupante han vivido sus competidores. Orange registró una caída del 12,7% en sus beneficios operativos (Ebitda) hasta los 1.251 millones (182 millones menos) en 2021; y un retroceso de sus ingresos del 4,7% hasta 4,720 millones. Si se comparan los datos de facturación con el año 2017, el retroceso es de casi 700 millones de euros.

Orange y Vodafone

La compañía se aleja de los 5.000 millones de euros que facturó en 2019, antes del impacto de la covid en sus negocios. En cuanto a los ingresos por servicios, los residenciales, esta caída ha sido más pronunciada. La operadora facturó 3.198 millones de euros, lo que supuso una caída anual del 8%. 

Vodafone ingresó en España 3.167 millones de euros en los primeros nueve meses de su año fiscal (de abril a diciembre), lo que representó un crecimiento interanual del 2% respecto de los datos de 2021. La operadora ha seguido reduciendo sus ingresos residenciales (acumulados y trimestrales) y pierde clientes en todos sus segmentos: móviles, fijos y por televisión.

En este mismo periodo, los ingresos por servicios cayeron un 0,9% hasta los 2.805 millones. Una cifra que está muy por encima de trimestres anteriores, pero que no logra detener la caída y que convirtió a la española en la filial con peores números de todo el holding británico.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D