Caixabank, optimista pese a la guerra: «La banca es sólida a diferencia de la crisis financiera»
El presidente de la entidad, José Ignacio Goirigozarri, defiende que el banco está preparado para afrontar los riesgos de la invasión por su capital y liquidez
Caixabank ha alertado este viernes de las consecuencias de la invasión de Ucrania, pero ha lanzado un mensaje de confianza y optimismo. El presidente del banco, José Ignacio Goirigolzarri, ha indicado en la junta de accionistas que el sector financiero español cuenta con una posición de solidez. A diferencia de lo sucedido en la crisis financiera que se inició en 2008. Además, ha remarcado que la entidad que lidera cuenta con bases aún mejores que sus rivales, por sus elevados ratios de liquidez y capital, además de su liderazgo en España tras la absorción de Bankia. «Soy optimista», ha remarcado el banquero.
Goirigolzarri ha indicado que la guerra ha producido «un cambio radical» en el escenario económico, aunque ha confiado en que «la recuperación continúe este año». A su juicio la incertidumbre es «muy alta», como demuestra la volatilidad en los mercados financieros y de materias primas, especialmente las energéticas.
Hasta la invasión de Ucrania, ha explicado, el entorno era «claramente positivo», a pesar de los peligros de la inflación que iban apareciendo de forma nítida. Tras ella, «nuestra estimación actual para la economía española supone una rebaja del crecimiento del PIB de 1,3 puntos porcentuales, desde el 5,5% que teníamos en nuestra previsión anterior hasta el 4,2% que prevemos ahora». Por su lado, nuestra expectativa de crecimiento de la inflación media anual es del 6,8% para este ejercicio.
El descenso de las perspectivas se une a las disminuciones pronosticadas por otros bancos y organismos, como el Banco de España, la Airef o BBVA, que en los últimos días han actualizado con ajustes el crecimiento de nuestro país.
Cambios geosestratégicos y en las empresas
«Los efectos de esta invasión superan con creces el impacto a corto plazo en nuestras economías», ha añadido Goirigolzarri. El presidente de Caixabank ha considerado que el conflicto bélico «va a suponer cambios geoestratégicos de enorme calado para el mundo y, muy en especial, para Europa». Una valoración que ya expresó recientemente el presidente de BBVA, Carlos Torres.
Asimismo, ha manifestado que también va a afectar a la estrategia de muchas empresas, porque «los paradigmas en los que se asentaban están en un claro proceso de revisión». Y porque «el impacto en la redefinición de las cadenas de suministros es un claro ejemplo».
Sueldos y dividendos
Por otro lado, el presidente de Caixabank ha realizado un repaso a la gestión realizada el ejercicio pasado, en la que se ejecutó la fusión con Bankia. Ha defendido el ajuste laboral de más de 6.500 trabajadores, al igual que la política de retribuciones de la cúpula. Hay que tener en cuenta que su propio sueldo se ha visto casi triplicado con respecto a lo que percibía en la extinta entidad nacionalizada.
Del mismo modo, Goirigolzarri ha hecho referencia a la política de dividendos del banco. Así, ha subrayado que el consejo de administración acordó proponer a la junta de hoy la distribución de un dividendo en efectivo de 0,1463 euros brutos por acción con cargo a los beneficios del ejercicio 2021. Este dividendo se abonará en el segundo trimestre de este año, una vez sea autorizado.
Con el pago de este dividendo, el importe de la remuneración al accionista será de 1.179 millones de euros, equivalente al 50% sobre el resultado consolidado ajustado por los impactos extraordinarios de la fusión con Bankia.
Además, el máximo responsable de Caixabank ha recordado que el dividendo de 2022 se elevará hasta una horquilla del 50-60% de los resultados, al margen del programa de recompra de títulos que pretende poner en marcha. Con este programa la entidad abre una vía para que el Estado pueda vender parte de su participación en el capital, que asciende al 16,1‰.