Bruselas suaviza posiciones para contentar a España y cerrar un pacto sobre el gas
La decisión final se tomará este martes en un Consejo extraordinario de Energía donde los países esperan ponerse de acuerdo sobre el plan definitivo
Negociaciones a contrarreloj en Bruselas. La Comisión Europea y los Estados miembro se encuentran este lunes negociando un acuerdo político sobre el plan del Ejecutivo europeo de que cada país reduzca un 15% el consumo de gas con vistas al invierno, ante el temor a un corte total del suministro por parte de Rusia. España fue el primer país en rechazar la propuesta original de Bruselas, una posición a la que después se sumaron otros como Portugal y Grecia, por lo que el plan está siendo suavizado y flexibilizado con múltiples anexos y excepciones para poder lograr un consenso lo antes posible.
Aunque la meta del 15% sigue siendo el objetivo base, el nuevo borrador plantea que se modifiquen, entre otras cuestiones, las cláusulas relativas a la activación obligatoria de los recortes de gas buscando elevar de tres a cinco el número de países que deben solicitar esta reducción, lo que haría más difícil de poner en marcha el mecanismo. En todo caso, tanto si lo pidiera la Comisión Europea como si es fuera a iniciativa de cinco Estados miembros, la declaración de alerta solo podría ser adoptada con el respaldo de una mayoría cualificada de países.
En este sentido, el borrador del pacto mantiene el objetivo de un recorte voluntario del 15% del consumo de gas entre el 1 de agosto y el 31 de marzo de 2023, pero introduce matices que pueden facilitar que este recorte sea menor en países críticos como España y Portugal. Para ello, descontará del cómputo de gas consumido el utilizado para rellenar las reservas, por lo que el porcentaje de reducción se aplicará a un volumen menor. Es más, la versión más reciente del proyecto también recoge la llamada «excepción ibérica», que ya aparecía en el texto de la Comisión y que permitiría a España y a Portugal reclamar una rebaja en el esfuerzo de ahorro.
Además, las reglas solo se establecerían por un año, en lugar de los dos propuestos y las reducciones también podrían ser menores si los países envían gas a otros dentro del bloque, una opción que ya había sido planteada por el Gobierno español. Por otro lado, los países no conectados directamente a otro también podrían optar por no participar en el sistema.
En cualquier caso, la actual situación refleja las tensiones que está viviendo el bloque comunitario para mantener un frente unido contra la Rusia de Vladimir Putin y responder de esta manera a la invasión de Ucrania. Hasta la semana pasada, prácticamente todas las medidas se habían centrado en el lado de la oferta, buscando nuevas fuentes de combustibles fósiles y aumentando la a cuota de las energías renovables, pero esta línea de acción se ha revelado insuficiente. Ahora toca actuar por el lado de la demanda y alentar tanto a industria como a ciudadanía a reducir su consumo, lo que política y socialmente hablando es mucho más difícil.
Muchas «cuestiones abiertas»
Pese a los avances hay «todo un conjunto de cuestiones abiertas, algunas de carácter legal, otras de carácter político o ético», que los Estados siguen debatiendo, incluida la particular situación de las islas, como Malta, que no tiene conexiones energéticas. Sobre la posición de España con vistas a la reunión de este martes, el país tiene «un compromiso fundamental con la solidaridad» y la «convicción de que debemos permanecer unidos y a la vez de manera efectiva y proporcionada», indican fuentes diplomáticas a EFE.
«No podemos acelerar las cosas y adoptar medidas que no estén bien calibradas», señalaron las fuentes, e indicaron que la clave es la unidad, ya que mostrarse divididos favorecería los intereses de Rusia. Por otra parte, los ministros hablarán el martes en el Consejo de la seguridad del suministro energético y de las posibles medidas para animar a los consumidores a reducir la demanda.
En particular, explicarán cómo pretenden estimular la reducción de demanda de los consumidores protegidos (que incluyen al sector sanitario o educativo), qué medidas se pueden aplicar para asegurar el suministro estable y cómo hacer uso de medidas adicionales.
En el almuerzo de trabajo, los titulares europeos mantendrán una reunión por videoconferencia con el titular de Energía de Ucrania para debatir las medidas para reforzar la seguridad energética y los mercados de la electricidad y el gas en ese país.