La productora de la serie sobre Pedro Sánchez no encuentra televisión que la quiera emitir
Secuoya sigue sondeando el mercado, pero las cadenas no quieren arriesgarse con un producto al que no le ven rentabilidad comercial y sí muchos riesgos políticos.
La serie sobre Pedro Sánchez comienza a encontrarse con sus primeros problemas. Secuoya y The Pool -encargadas de su producción- están teniendo serios problemas para encontrar una ventana de emisión después de llevar varios meses comercializándola. Según ha podido confirmar THE OBJECTIVE con fuentes del sector audiovisual, a día de hoy el proyecto bautizado como Las cuatro estaciones no tiene televisión, pese a los diversos contactos que se han sostenido con televisiones privadas y plataformas en streaming.
De hecho, pese a que en algunas publicaciones se da por hecho su fichaje por Netflix, las fuentes consultadas por este diario indican que no hay nada firmado con la plataforma internacional. Oficialmente en el gigante audiovisual dicen que «no hay comentarios». En el caso de Secuoya, indican que «no pueden dar ninguna información» y en el caso de que se llegue a un acuerdo «corresponde a la televisión anunciar la compra de la serie».
Pues ni lo uno ni lo otro. Hasta este viernes los encuentros con diferentes televisiones habían sido infructuosos. Las fuentes consultadas indican que las cadenas no quieren arriesgarse con un producto al que no le ven rentabilidad comercial y sí muchos riesgos políticos. En el primero de los casos, en las cadenas consideran que Sánchez es un producto televisivo amortizado y así lo demostró su última aparición en La 1 con un share del 6,7% y apenas 900.000 espectadores.
Televisiones privadas
Como ha explicado este diario, tras el estallido de la guerra de Ucrania y los malos datos económicos, la audiencia de las entrevistas concedidas por el líder del Ejecutivo en televisión revela un declive sostenido en el tiempo. Si hace un año Sánchez superaba siempre la barrera del 10% de audiencia, el pasado martes bajó del 8% al 6%.
Por otro lado se encuentran los condicionantes políticos. Ninguna televisión privada quiere arriesgarse a que le identifiquen con Pedro Sánchez ni menos con las elecciones municipales y generales a la vuelta de la esquina. En el caso de las plataformas, tampoco quieren emitir un producto altamente politizado que solo puede tener salida en el mercado local. En este punto se ha hablado de Netflix e incluso de Amazon, aunque hasta ahora no hay nada cerrado con ninguna de las dos.
En el caso de TVE, las fuentes consultadas indican que sería un «escándalo» que la televisión pública se prestase para emitir lo que algunos grupos políticos de la oposición califican de «propaganda gubernamental». Lo mismo pasa con las cadenas autonómicas en donde hay decenas de sensibilidades políticas y gobiernos de diverso color que no quieren verse identificados con el actual Ejecutivo, ni con Sánchez.
Dos capítulos para Pedro Sánchez
El BOE del pasado sábado recogió el convenio entre la Secretaría de Estado de Comunicación y las dos productoras del documental. La serie tendrá dos capítulos en su primera temporada, llevará por título «Las cuatro estaciones» y según Moncloa será un ejercicio de «transparencia acorde con la democracia del siglo XXI» y «en ningún caso», dice Presidencia, incluirá «propaganda política o partidista».
«Se trata de mostrar a los ciudadanos la organización de la Presidencia del Gobierno, sus principales actividades y la labor de las personas que prestan sus servicios para asegurar su correcto funcionamiento, realizando un ejercicio de transparencia acorde con la democracia del siglo XXI», se lee en el Boletín. El documental se estructurará en una temporada de dos capítulos de, aproximadamente, 45 minutos de duración cada uno, «teniendo derecho los productores, que no obligación, a la grabación de una segunda temporada de otros dos episodios adicionales».
Así, el convenio recalca que la serie, que se emitirá en año electoral, «constituye un instrumento idóneo para trasladar a la sociedad las funciones y el quehacer diario de la Presidencia del Gobierno, incluyéndose de manera primordial en su contenido a abordar, con el carácter propio de una serie documental, la realidad del trabajo de la figura del Presidente del Gobierno y su cometido diario».
Inversores de Secuoya
El rodaje será dirigido por Curro Sánchez Varela, ganador de un Goya e hijo de Paco de Lucía, y se inspira en «la presencia en el mercado de trabajos documentales» de características similares que han tenido «una importante acogida». Comenzó a grabarse en febrero, días después de la invasión de Rusia a Ucrania. Desde esa fecha las cámaras de Secuoya y The Pool han acompañado a Sánchez en eventos como su viaje a Ucrania en plena guerra o la inauguración del AVE a Extremadura.
Secuoya fue fundada por Raúl Berdonés, directivo que ha sido históricamente un directivo del mundo audiovisual ligado al Partido Popular (PP) y cercano a la exvicepresidenta Soraya Saenz de Santamaría, aunque en el sector se reconocen sus esfuerzos en los últimos años por acercarse al PSOE y al entorno del presidente de Gobierno, Pedro Sánchez.
La serie se realizará por Secuoya Studios, un spin off societario de Secuoya Grupo de Comunicación lanzado en enero de 2021 por Berdonés para potenciar una factoría de contenido de ficción para plataformas, productores, operadores y broadcasters de Estados Unidos, Latinoamérica y España. La productora está dirigida por James Costos, el que fuera embajador de Estados Unidos en España durante la etapa del presidente Barack Obama e icono del progresismo en nuestro país.
Dueños de The Pool
En cuanto a The Pool, la productora está relacionada con exsocios históricos de Globomedia. Andrés Varela -socio del grupo Prisa- participa a través de su sociedad MGVH 2000 y Écija Holdings and Investments también está representada en el consejo de administración. Esta última es propiedad de Hugo Écija, hermano de Daniel Écija.
Junto con José Miguel Contreras y Emilio Aragón, Antonio Varela y Daniel Écija fundaron en 1995 el grupo que posteriormente vendieron a la Mediapro de Jaume Roures. Los cuatro han estado vinculados ideológicamente a proyectos progresistas y en el caso de Contreras tiene una importante cercanía con Pedro Sánchez y anteriormente con José Luis Rodríguez Zapatero. Este último les concedió en 2006 una licencia de TDT para emitir en abierto de la que nació La Sexta.