Sánchez solo reparte en cheques el 1,2% de lo recaudado por no ajustar el IRPF a la inflación
El PP afea al Gobierno que parte de su último paquete anticrisis sea una copia de medidas ya propuestas por el líder de la oposición y que llegan tarde
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. | Europa Press
Dentro del último paquete de medidas anticrisis del Ejecutivo para paliar los efectos de la inflación agravados por el conflicto bélico derivado de la invasión rusa de Ucrania, el Gobierno de Pedro Sánchez anunció al cierre de 2022 un cheque de 200 euros para ayudar a las familias más vulnerables en la compra de alimentación.
El montante potencial destinado a esa finalidad -en función de los requisitos para percibir el cheque- apenas alcanzará el 1,2% de lo sobrerrecaudado por las arcas públicas el año pasado en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) a causa de la inflación, según cálculos de los economistas consultados por THE OBJECTIVE.
Se estima que esa ayuda de 200 euros, con claro tinte electoral, beneficiará a 4,2 millones de hogares a partir de este mes de enero. El cheque se limita a rentas inferiores a 27.000 euros anuales y entre sus destinatarios se excluye a los perceptores del Ingreso Mínimo Vital (IMV) o a los pensionistas del Régimen General y Especiales de la Seguridad Social, así como a los pertenecientes al de Clases Pasivas, y a los administradores de sociedades mercantiles.
Mitigación tardía del impacto de la inflación
Teniendo en cuenta que, según cálculos demográficos, la media de personas por hogar es de 3,6 integrantes, el cheque de alimentación llegará previsiblemente a 1,2 millones de perceptores, totalizando un montante de 240 millones de euros.
Sin embargo, durante 2022, el rechazo del Gobierno en general -y del Ministerio de Hacienda en particular, encabezado por María Jesús Montero- a deflactar la tarifa estatal del IRPF; es decir, a ajustar los tramos de renta del tributo a la galopante inflación -en máximos de casi tres décadas durante gran parte del ejercicio pasado-, ha generado una sobrerrecaudación que ronda los 18.900 millones de euros, unos 900 euros de media por contribuyente de IRPF, según cálculos del economista Javier Santacruz para TO.
Así pues, el Gobierno libera 240 millones de euros en ayudas a los contribuyentes de rentas inferiores a 27.000 euros anuales -con restricciones- frente a los 18.900 millones sobrerrecaudados, lo cual supone el 1,2%. Y, además, explican los expertos consultados, lo hace cuando ya las familias llevan meses padeciendo una fuerte inflación en los alimentos.
Engaño monetario
Como explica el profesor del Centro de Estudios Financieros (CEF) Juan Fernando Robles, «el cheque de 200 euros es una ínfima devolución del aumento de la presión fiscal que ha producido la inflación, no solo en general -en las cifras totales-, sino también para la mayoría de beneficiarios».
Prueba del argumento de Robles es la comparación no de las cifras globales, sino la de los 200 euros de cheque frente a los 900 euros medios de sobrerrecaudación por contribuyente, que es del 22%.
Santacruz abunda en el argumento al explicar que «la comparativa entre el cheque y la no deflactación del IRPF muestra hasta qué punto es desacertada una política de rentas en términos reales para el contribuyente y hasta qué puto puede provocar una cierta ilusión monetaria». Como explica el economista, «el cheque para alimentación se ve, mientras que no deflactar no se ve: se sufre mucho más, pero no es tan evidente».
Hay autonomías que sí deflactaron
De hecho, en contra del criterio estatal, hay comunidades autónomas, como Madrid o Galicia, que sí han ajustado el tramo autonómico de IRPF a la inflación para que la carga impositiva se ajustase al nuevo poder adquisitivo de los ingresos, minado por fuertes tasas de IPC, que se mantuvieron por encima de dos dígitos durante junio, julio y agosto, con especial impacto en los componentes de alimentación y energía.
Es más, la rúbrica de Alimentación y bebidas no alcohólicas, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), ha estado rebasando los dos dígitos desde abril inclusive hasta cierre de 2022, a falta del dato desglosado de diciembre, ya que del IPC del último mes del año pasado solo existe el dato avanzado y no el definitivo con parcelación por rúbricas y grupos.
En noviembre de 2022, cuando los contribuyentes ya estaban sobrepagando a Hacienda por el tramo estatal, productos básicos como la leche marcaban un alza interanual del 31%; o la harina, del 37,6%; frente al encarecimiento del 27,1% de los huevos; del 13,2% de la carne de vacuno; o del 16,6% de la de ave.
«Copia» de propuestas del PP
Desde el Partido Popular, el vicesecretario de Economía, Juan Bravo, manifestaba este lunes que «está claro» que su formación no va a votar en contra del último paquete de medidas anticrisis, pero ha recalcado que espera que el Gobierno no mezcle las medidas del decreto, que para el PP son una «copia» de sus propuestas, con otras que resulten «imposibles» de votar por parte de su partido.
Bravo reivindica que medidas que ya ofreció el PP son las que finalmente se van a aplicar, aunque con retraso y advierte de la necesidad de acometer «reformas estructurales», porque el paquete anticrisis solo «anestesia la situación». En su opinión, el cheque debería hacerse efectivo vía minoración del IRPF a las rentas medias y bajas. En esa mejora del paquete anticrisis, el PP cree que debería recogerse una deflactación de la tarifa del IRPF para rentas de hasta 40.000 euros anuales.
