Los españoles cancelan la misma cantidad de hipotecas que las nuevas que contratan
La amortización total de los préstamos para vivienda avanza con fuerza ante la subida del euríbor y crece ya en tasa interanual un 13%
El negocio de las hipotecas se resiente de manera acelerada. El incremento abrupto de los tipos de interés por parte del BCE para contener la inflación y la pérdida de poder adquisitivo están pasando factura a un mercado que desde el estallido de la pandemia se había convertido en un pilar fundamental para el crecimiento de la actividad el sector financiero.
La situación ha cambiado de manera radical y las entidades ya está registrando tantas cancelaciones de préstamos para viviendas como nuevas operaciones de financiación. En enero, según los últimos datos de la Asociación Hipotecaria Española (AHE) recabados por THE OBJECTIVE, el número de créditos para inmuebles que se dieron de baja alcanzaron los 47.957, frente a los 48.501 que se originaron.
Fuentes financieras sostienen a este periódico que en la actualidad ya hay, incluso, más cancelaciones que formalizaciones nuevas, debido a que, por un lado, las primeras se han venido incrementando por las mayores amortizaciones anticipadas por parte de los clientes y, por otro, las segundas están bajando de forma significativa.
La finalización de las hipotecas incluye no solo aquellos préstamos que se cierran por adelantado sino también los que vencen de manera natural al llegar la fecha de vencimiento. Pero el sector está detectando un mayor ritmo de financiación que se decide anular antes de la liquidación establecida, aprovechando los ahorros acumulados tras el estallido de la covid-19, para evitar la carestía por el alza desbocado del euríbor ante la política monetaria del BCE.
Se acelera el cierre de hipotecas
Las cancelaciones, debido a este factor, han aumentado su velocidad hasta un 13%. A mediados del pasado ejercicio. este tipo de transacciones subían un 9%. Un porcentaje que estaba dando en plena avance de los tipos de interés oficiales.
Los bancos han explicado en las últimas semanas que una parte de la caída del saldo de depósitos obedece al incremento de las amortizaciones anticipadas de las hipotecas, aunque han señalado que es difícil detallar cuantitativamente el volumen que se ha destinado a tal fin.
Del mismo modo, han advertido del desplome que se está observando en la concesión de préstamos para la vivienda. Una alerta que se está verificando con los datos de otros organismos, como los del Consejo General del Notariado, que ayer aseguraba que en marzo las hipotecas se hundieron algo más de un 26% debido al batacazo de la compra venta de pisos.
Detrás de este frenazo del sector inmobiliario esta la subida de tipos del BCE. El organismo monetario ha pasado de fijar el precio oficial del dinero en el 0,5% negativo al 3,75% positivo en menos de un año. Un hecho que ha provocado que el euríbor se desboque hasta el entorno del 4%, haciendo cada vez más costoso la financiación y, por tanto, el acceso a un préstamo para la adquisición de la vivienda.
La AHE sostiene en su último informe trimestral que 2022 se perfiló como el ejercicio más dinámico desde que se inició la recuperación de la economía en 2024, al otorgar la banca 67.000 millones para hipotecas con un alza del 17%, pero que «no parece razonable que vayamos a seguir asistiendo a estos niveles de actividad a juzgar de los últimos indicadores, que parecen apuntar hacia una etapa de enfriamiento».
«Un enfriamiento que dependerá del actual ciclo monetario pero también, en gran medida, de la dinámica que muestre el empleo, una magnitud que hasta ahora ha respondido de forma razonablemente bien», añade la asociación de las entidades, que se muestra más optimista que muchos de sos socios de manera individual.
El BCE ha moderado el alza de las tasas oficiales en su reunión de este jueves, pero ha avisado de que volverá a aplicar más incrementos en los próximos meses, ya que la inflación aún no está controlada y no da síntomas de una bajada para que llegue al objetivo de que descienda hasta el 2-3% en la zona euro.
El mercado no sabe a qué atenerse y modifica sus previsiones cada cierto tiempo. No se descarta que los tipos alcancen el 4,5% y que el euríbor llegue al umbral del 5%. Pero todo está en manos de los pasos y los mensajes que lance el organismo que preside Christine Lagarde.