Yolanda Díaz contrata a la consultora Deloitte para acabar con el caos del SEPE
El Ministerio de Trabajo se ha visto obligado a acudir al sector privado para resolver los ‘hackeos’ y ataques informáticos que se producen desde 2021
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz. | Europa Press
El Ministerio de Trabajo y Economía Social ha decidido tirar de fondos europeos, incluidos en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, para poner en marcha una profunda renovación y desarrollo tecnológico e informático del Servicio Publico de Empleo Estatal (SEPE). El organismo encargado de sellar el paro, pagar subsidios de desempleo o gestionar decenas de prestaciones se enfrenta al envejecimiento de su plantilla, la obsolescencia tecnológica y una elevada carga de trabajo que causa importantes demoras en la gestión.
El SEPE gestiona 14 millones de citas y resuelve 122 millones de trámites electrónicos al año. El número de perceptores mensuales supera los dos millones, con picos como el creado por la pandemia y los ERTE de cinco millones de beneficiarios. El número de solicitudes diarias, que debe gestionar una plantilla de apenas 7.200 trabajadores, ronda las 35.000, que se convirtieron en 300.000 en 2020. Estos volúmenes complican la resolución rápida de incidencias y ralentizan las gestiones. Problemas como lo hackeos y ataques informáticos de 2021 y 2022 hacen inviables los servicios durante días e, incluso, semanas.
Para asumir los retos tecnológicos, el ministerio de Yolanda Díaz formalizó el pasado mayo la adjudicación de un contrato para el desarrollo de las aplicaciones tecnológicas del SEPE valorado en 31 millones. Dividido en dos lotes, el primero, fue a parar a Deloitte Consulting, el área de consultoría estratégica, de operaciones, de recursos humanos y tecnológica de la big four, que ofertó 8,2 millones.
Las necesidades del SEPE
El segundo, con un importe ofertado 10,3 millones, recayó en la UTE formada por Capgemini-Babel. La líder tecnológica y la consultora dejaron en el camino a Indra, Accenture y KPMG. Según los pliegos del contrato, a los que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, Deloitte deberá diseñar soluciones que aumenten la capacidad tramitadora y de gestión de las prestaciones actuales y de las nuevas. Además, deberá automatizar y unificar, de una forma sencilla, operaciones, tareas, liquidaciones y pagos.
En las manos de Deloitte también está garantizar el desarrollo de una base de datos única e integrada y garantizar un dato único financiero de los perceptores. Esto permitirá un análisis adecuado y la detección de fraude, sobre todo relacionado con las ayudas a la formación. Por su parte, Capgemini y Babel tendrán que desarrollar un nuevo sistema de programación y seguimiento de la formación, que sustituirá al actual, ya obsoleto. También nuevos sistemas de intermediación de empleo, políticas activas de empleo, prestaciones de paro y gestión interna.
Otro contrato millonario
Hace ahora un año, el SEPE adjudicó otro contrato millonario, en este caso valorado en 59 millones de euros, con un importe de licitación de 17 millones y sin financiación europea, para el desarrollo y evolución de aplicaciones informáticas. Deloitte Consulting se hizo con el lote 1 -con un importe de licitación de tres millones- para la evolución de las aplicaciones relacionadas con los servicios de intermediación del empleo.
Mientras, la UTE Babel-Sopra IPA consiguió el lote 5 para prestaciones de desempleo por un importe de 4 millones. Por su parte, Indra-sistemas de formación para el empleo–, Altia Consultores -gestión interna-, Drago Solutions -análisis de la información- y Bilbomática -diseño web-, se hicieron con las otras partes del contrato. La ejecución del contrato licitado por el organismo encargado de pagar el paro está fijada para 12 meses, un periodo que se puede prolongar hasta cuatro años.
La plantilla del SEPE, pequeña y envejecida
La plantilla del SEPE está formada por apenas 7.246 efectivos y cerca de un 15% cuenta ya con más de 61 años. De estos, 4.978 eran funcionarios de carrera; 807, laborales, y hasta 1.461 eran eventuales. Seis de cada diez trabajadores que pagan las prestaciones de desempleo tiene más de 50 años. Picos de gestiones, como los producidos por Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), que en algunos momentos llegaron a afectar a 900.000 trabajadores, o los efectos de los hackeos han obligado a la reducida plantilla a realizar jornadas maratonianas y a acudir al centro de trabajo los sábados y domingos.
Según recogía THE OBJECTIVE hace solo unos días, el deterioro en los servicios públicos dificulta a los ciudadanos gestiones como la renovación del pasaporte, del DNI, solicitar la prestación de desempleo o pedir la jubilación. El último Barómetro de Gestores Administrativos deja patente que el 72% de encuestados suspende servicios como el SEPE, que depende del Ministerio de Trabajo y Economía Social. Mientras, el 67% de sondeados suspenden los servicios tramitados por el Ministerio de Seguridad Social que dirige José Luis Escrivá.
El sondeo de los Gestores Administrativos ha destapado la situación insostenible que se vive en las administraciones públicas respecto a la deficitaria atención al ciudadano y a los gestores. Trámites como la cita previa, telemática o presencial de algunos organismos como la Seguridad Social; las gestiones relacionadas con la jubilación, la pensión o la incapacidad se llevan la palma del descontento.
