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Economía

El auge del empleo público dispara los afiliados a Muface pese al debate sobre su continuidad

Mientras los beneficiarios caen drásticamente por la entrada de la mujer en el mundo laboral, los titulares se duplican

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, junto a otros ministros del anterior Gabinete y la responsable de Sanidad, Mónica García, en segundo plano. Coincidieron en el acto de celebración del Día de los Trabajadores. | Europa Press

La Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (Muface), un organismo público que da asistencia sanitaria y social a 1,5 millones de empleados públicos, será objeto de debate a lo largo de la legislatura. La mutualidad, que nació unos meses antes de la muerte del dictador Francisco Franco, depende del Ministerio de Hacienda y Función Pública. Sin embargo, la responsable de Sanidad, Mónica García, tiene en el punto de mira a estos mutualistas.

El primer partido en incluir en su programa electoral la disolución de Muface fue Más País, formación de García. Además, Sumar propuso en su programa electoral para las elecciones generales del 23 de julio sacar a los funcionarios de las mutuas de prestación sanitaria privada (Muface-Mugeju-Isfas) de forma «paulatina».

Pese a todo, los titulares no paran de crecer, gracias al aumento de las plazas de empleo público que el presidente Pedro Sánchez presenta como históricas. Mientras, los familiares vinculados al mutualista caen. Todo tiene una explicación y no hay desbandada a la Seguridad Social. Es evidente que hay funcionarios que prefieren este último sistema y pueden cambiarse sin problemas. También que hay trabajadores con edad avanzada y al borde la jubilación que optan por tratarse en la Seguridad Social. Los tiempos de espera marcan las decisiones.

La evolución de Muface

Las estadísticas y proyecciones a las que ha tenido acceso THE OBJECTIVE evidencian el incremento. Hay 750.000 titulares más que en 1976 y el doble de mutualistas que en 2000. Lo que sí ha caído, de forma considerable, son los beneficiarios adscritos al titular, que han pasado de 828.000 en 2000 a apenas 461.200 en 2021. La entrada de la mujer en mundo laboral, con protección de la Seguridad Social y la caída de la natalidad justifican para Muface esta importante caída.

Sin embargo, los pronósticos apuntan a un auge de afiliados en Muface. Desde 2020, han entrado en la AGE a través de la oferta de empleo público ordinaria 132.ooo trabajadores. Pese a todo, un número muy importante, según aseguran a este medio Comisiones Obreras y Unión Sindical Obreras, no ha tomado posesión del cargo. Las demoras superan el año y medio. Por su parte, Muface apunta un aluvión de personal docente como mutualistas.

Personal docente y funcionarios

Entre 2023 y 2024 está prevista la incorporación de 90.000 nuevos docentes como personal funcionario en cuerpos de ámbito estatal. El motivo de este incremento, según destaca la Mutualidad, es el Real Decreto 270/2022, de 12 de abril que regula y diversifica los procedimientos selectivos de ingreso en los cuerpos docentes con el objetivo de reducir la temporalidad en el empleo público.

En este contexto, el sector privado que aporta su infraestructura para que funcione Muface teme que el concierto, recogido en uno de los mayores contratos del Estado, esté a punto de desaparecer. Algunos miran a los programas electorales de Más Madrid y Sumar. «Su programa deja muy claro que todos los ciudadanos tienen que tener el mismo sistema sanitario publico sin privilegios de los funcionarios. No se va a renovar», aseguran a THE OBJECTIVE.

El último contrato suscrito con Muface termina en 2025. Mientras el desembolso público es importante, las empresas entienden que es muy limitado para el servicio que ofrecen. En cualquier caso, el funcionamiento de Muface evita una carga muy pesada a la Seguridad Social. Mientras, las empresas que ofrecen sus servicios sanitarios consideran que el servicio no puede suspenderse sin compensar a aquellos funcionarios que han estado dentro de este modelo «pagando por él durante muchos años» cuotas que oscilan entre los 21 y 51 euros.

La desaparición del modelo Muface, más cerca con la llegada de Mónica García a Sanidad La desaparición del modelo Muface, más cerca con la llegada de Mónica García a Sanidad 

El último contrato suscrito con empresas privadas contempla el pago de 3.500 millones de euros a las aseguradoras hasta 2024. Desde 2016, se han beneficiado del concierto con Muface las aseguradoras Asisa, DKV, Igualatorio Médico-Quirúrgico Colegial y Segurcaixa Adeslas.

¿Cómo funciona Muface?

Los funcionarios de carrera de la Administración Civil de Estado están incluido en Muface. También personas funcionarias en prácticas que aspiren a ingresar en los Cuerpos de dicha Administración y personas funcionarias que pudieran acceder a tal condición en virtud de un ejercicio de derecho de opción establecido por una norma de carácter especial.

Quedan excluidas del Mutualismo Administrativo las personas funcionarias de los Cuerpos y Escalas propias de otras Administraciones Públicas, así como las personas funcionarias de Escalas propias de los Organismos Autónomos y el personal de administración y servicios propios de las Universidades.

La incorporación inicial al Régimen del Mutualismo Administrativo es obligatoria, única y permanente -salvo variaciones y bajas- desde el momento de la toma de posesión o, en su caso, desde el comienzo del periodo de prácticas.

Mientras, causarán baja como mutualistas con carácter obligatorio los funcionarios y funcionarias que pasen a la situación de excedencia voluntaria en cualquiera de sus modalidades. Los funcionarios y funcionarias civiles del Estado de ingreso posterior al 31 de diciembre de 2010 mantienen su encuadramiento en el Régimen del Mutualismo Administrativo, como mutualistas de Muface, sin perjuicio de que a efectos de pensiones queden encuadrados en el Régimen General de la Seguridad Social.

1 comentario
  1. MiguelAe

    Si quienes pueden elegir entre seguridad social o seguros privados, eligen la segunda opción, será porque funciona mejor.
    En resumen, con estas nuevas políticas se va a obligar a que ya no haya elección, y todos queden obligados a ir al peor sistema.
    Si quieren que seguridad social se llené, mejoren el servicio prestado o al menos reparta equitativamente los fondos entre los diferentes sistemas autonómicos de salud, en lugar de favorecer a los de siempre en detrimento de otros.
    Por cierto, la sanidad prestada por MUFACE resulta más barata que la de seguridad social, y presenta un mejor servicio como así demuestran las afiliaciones.

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