El fichaje del nuevo CEO de Vodafone se complica por su contrato con MásMóvil
Las negociaciones para liberar al ex consejero delegado de Euskaltel de su pacto de no competencia están estancadas
José Miguel García, candidato a ser consejero delegado de Vodafone cuando Zegona tome el control de la compañía. | Euskaltel.
El fichaje de José Miguel García como consejero delegado de Vodafone se complica por el acuerdo de no competencia que el directivo tiene suscrito con MásMóvil hasta diciembre de 2024, fruto de su salida como CEO de Euskaltel. Fuentes del mercado han indicado a THE OBJECTIVE que pese a que existieron negociaciones preliminares para liberarle de este pacto hasta la fecha no ha habido avances, lo que complica los planes de Zegona para que esté desde el primer día a los mandos de la nueva etapa de la operadora española.
Cuando faltan pocos días para que expire el año y un mes y medio después de que se anunciara la compra de Vodafone por parte de Zegona por 5.000 millones de euros, José Miguel García sigue teniendo la cláusula de no competencia (non-compete agreement) con MásMóvil que imposibilita su fichaje por Zegona. Al ser una empresa cotizada y estar sujeta a un rígido código de compliance, el fondo británico no puede contar con el ejecutivo mientras exista este contrato y el acuerdo esté en vigor.
Al respecto, las partes involucradas han declinado hacer comentarios a este diario, aunque en el caso de Zegona se remiten a las declaraciones de su consejero delegado, Eamonn O’Hare, en una reciente entrevista a El Mundo. En ella dijo que el pacto con MásMóvil no «es un problema» y que García «estará disponible para ser nuestro CEO desde el primer día que lleguemos a la compañía».
Compra de Vodafone
El problema es que los plazos avanzan más rápido de lo esperado. Las fuentes consultadas por este diario indican que Zegona tiene el convencimiento de que contará con todas las autorizaciones formales del Gobierno durante el primer trimestre del próximo año o incluso antes. La compañía pidió todos los permisos necesarios (a Moncloa por ser activo estratégico y por espectro radioeléctrico, a la CNMC por competencia y a Bruselas por haber pedido ayudas públicas) a primeros de diciembre y espera tenerlas como tarde al finalizar el mes de febrero.
De esta manera, si es que Zegona quiere que García esté desde el primer día en su proyecto en Vodafone deberá mover ficha rápidamente. Existieron conversaciones «informales» como publicó El País, pero no se ha vuelto a avanzar. Las fuentes consultadas indican a este diario que la única manera en que se resuelva el contrato es que, además de que García renuncie al año que le queda de este pacto de no competencia, se indemnice a MásMóvil o se establezca un acuerdo que les compense por la ruptura anticipada del acuerdo.
José Miguel García firmó el pacto cuando la operadora liderada por Meinrad Spenger compró Euskaltel en agosto de 2021, teleco de la que el directivo era hasta esos momentos consejero delegado. La compra se certificó por 2.000 millones y para asegurarse que de que García no compartiera información de la empresa con otro competidor firmaron el non-compete agreement hasta diciembre de 2024 mediante un pago que en el sector se cifra como «muy importante».
Plazos de Zegona
Vodafone es un competidor de MásMóvil y lo será de la futura joint venture con Orange que en estos momentos en negocia en Bruselas. Los últimos acontecimientos indican además de que tanto las autorizaciones de Zegona como la fusión podrían certificarse en fechas similares (primer trimestre), lo que haría que las dos compañías empiecen ya con sus nuevos equipos en paralelo a partir de mediados de 2024.
Para nadie es un misterio que José Miguel García es uno de los directivos con mejor reputación del mercado español y su fichaje es una noticia que no agrada a la competencia. Le ven como un directivo que comercialmente puede sacar mucho rendimiento a la nueva Vodafone y por ello que en MásMóvil no se acepta que su liberación se produzca sin un proceso ordenado y acordado entre todas las partes.
En cualquier caso, en el sector se esperaba que la firma del acuerdo entre Orange y MásMóvil con Digi por los remedies despejara esta interrogante. En una comunicación a los mercados de hace unas semanas Zegona indicó que Vodafone estaba dispuesta a fusionarse con MásMóvil si es que fracasaba su operación con los franceses, algo que no sentó bien entre los integrantes de la joint venture. Sin embargo, ahora queda prácticamente descartada la posibilidad tras los pactos enviados a Bruselas esta semana aunque -hasta la fecha- no ha servido para que se aceleren las negociaciones para liberar a José Miguel García.
