Díaz recula tras el varapalo de Podemos y cita a los agentes sociales para negociar el subsidio
Convoca el diálogo social a partir del viernes, el mismo día que cerrará el acuerdo sobre el SMI
Yolanda Díaz, ministra de Trabajo, este miércoles en el Senado. | Europa Press
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha anunciado este jueves desde Namur (Bélgica), donde participa en una reunión informal de ministros de Empleo y Política Social de la UE, que está dispuesta a reunirse con los agentes sociales, a partir de este viernes -día en el que se cerrará el acuerdo o no del SMI que oscila, entre el 3% de CEOE, el inicial 4%, ya al alza del Ejecutivo y, entre el 5 y el 8% de los sindicatos-, para negociar, «ahora, sí», la reforma que afecta al subsidio de desempleo, uno de los hitos incluidos en el IV desembolso de los fondos Next Generation, que España envió a Bruselas en el pasado mes de diciembre, con más de ocho meses de retraso.
Tras el varapalo de Podemos, que como socio de investidura ayer bloqueó uno de los reales decretos que se votaron este miércoles en el Parlamento español, y en el que además se incluía la petición del PNV de hacer prevalecer los convenios autonómicos en el mercado laboral, la líder de Sumar se ha comprometido a negociar con los agentes sociales estos aspectos, junto al subsidio por desempleo, toda vez que ha admitido que este punto no había entrado a formar parte del diálogo social, según explico la titular de Trabajo, porque el Gobierno tenía que enviar la solicitud de los fondos Next Generation antes de que acabara 2023, y por tanto, no había tiempo.
En este sentido, Díaz ha señalado -como ha podido recoger THE OBJECTIVE– que, por el contrario, sí que hubo debate sobre esta cuestión concreta, en el seno del Gobierno, entonces con Nadia Calviño de vicepresidenta primera y ministra de Economía. Un debate en su opinión «intenso», acerca de un materia que supone un desembolso por parte del Estado de «700 millones de euros».
Ahora, Díaz anticipa que se abre a la mejora de este punto, teniendo en cuenta las peticiones de los sindicatos y sin decir nada de las organizaciones empresariales. Lo que no ha aclarado desde Europa, sin embargo, es si tendrá en cuenta las demandas de Podemos, que consideran que la propuesta de la dirigente gallega suponen un recorte para los mayores de 52 años, lo que Trabajo no comparte de ninguna de las maneras. En cualquier caso, la número dos del Ejecutivo de Pedro Sánchez ha aprovechado su encuentro con los medios, para recordar que ayer se pusieron en juego 10.000 millones de euros, lo que hoy no ha podido sostener, dado que ahora le parece bien que se vaya al diálogo social con este punto, que de ser aplicado empezaría a ser efectivo en junio de 2024.
«Nunca damos una batalla por pérdida»
También este jueves, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, Maria Jesús Montero, ha manifestado que no no entiende que Podemos votase, junto con PP y Vox, en contra de la reforma del subsidio por desempleo, contribuyendo con su voto a tumbar la medida que, no obstante, no entraba en vigor hasta el 1 de junio de 2024.
«No se entiende, porque la mayoría de izquierda y del sector progresista de este país lo que quiere es que se aumente la cobertura a las personas desempleadas, y esta reforma profundiza justo en eso», ha lamentado a su llegada al desayuno informativo organizado por Nueva Economía Forum protagonizado por la vicepresidenta Tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
Según ha expresado ve con «tristeza» que la formación liderada por Ione Belarra votase junto al Partido Popular y Vox. «No expresa de forma clara cuáles son sus valores y cuáles son sus ideologías», ha reprochado.
Aún así, para Montero lo importante es que ahora desde el Gobierno retomen esta cuestión para ver cómo impulsarla. «No damos nunca una batalla por perdida», ha incidido.
«Una realidad que tenemos que aceptar»
Al ser preguntada por la incertidumbre que se generó ayer durante el Pleno y los acuerdos alcanzados con la formación independentista, Junts, minutos antes de la votación final de los decretos. Montero ha asegurado que al Gobierno le gustaría que 24 o 48 horas antes de que se produjese la votación estuviese todo ya hablado.
Pero que las negociaciones llevan a que los grupos políticos entiendan que tienen margen para conseguir «cosas adicionales» hasta que se aprieta el botón y aunque al Ejecutivo le gustaría cerrar las negociaciones antes, «va a ser difícil que alguien renuncie a su política de máximos» y por tanto, según Montero, es una «realidad que tenemos que aceptar».
