Puente dice que el Gobierno «hará todo lo posible» para frenar la OPA húngara sobre Talgo
Magyar Vagon prevé adquirir el 100% de la empresa por 617 millones de euros
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha asegurado que el Gobierno hará «todo lo posible» para frenar la Oferta Pública de Adquisición (OPA) que se prevé que lance la empresa húngara Magyar Vagon sobre el fabricante de trenes español Talgo.
En declaraciones a Grupo Prensa Ibérica, organizador de un evento de movilidad que ha tenido lugar este miércoles en Madrid y al que ha asistido el ministro, Puente ha trasladado que podría haber inversores rusos detrás de esta empresa húngara, lo que explicaría su oposición a que se haga con el control de la empresa española.
En público, Puente no ha querido manifestarse sobre esta inminente operación, ni en las declaraciones al conjunto de la prensa ni en su intervención durante la clausura del evento, pero sí lo ha trasladado a los organizadores del evento.
Magyar Vagon prevé adquirir el 100% de la empresa por 617 millones de euros. Hace unas semanas, estuvo a punto de formular esta OPA, pero la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) encontró un problema regulatorio a la misma, que los bancos pueden cancelar sus préstamos con Talgo si cambia el propietario de la compañía.
Por eso, el grupo húngaro está negociando con las entidades esta cláusula para encontrar una solución y poder finalmente tramitar la operación. En las cuentas de la compañía figuran 23 entidades con unos créditos de 329 millones de euros.
Todo esto transcurre mientras el Gobierno sigue esperando a que Talgo le entregue las primas unidades de los trenes Avril, con casi dos años de retraso, que permitirán una mejor movilidad en Galicia y Asturias.
Este miércoles, el ministro ha evitado comprometerse con nuevos plazos respecto a la entrega de los trenes Avril, a la espera de que Talgo culmine las pruebas y los entregue definitivamente al Gobierno con casi dos años de retraso. Sobre la compañía pesa una reclamación de 116 millones de euros por parte de Renfe por no entregar los trenes a tiempo.