El Estado necesitará al menos 300 millones más de lo previsto para comprar Telefónica
La operadora de telecomunicaciones cerró el martes en su precio más alto en bolsa desde septiembre del año 2022
El Estado necesitará como mínimo 300 millones de euros más de lo previsto inicialmente para cumplir con su plan de comprar hasta un 10% de las acciones de Telefónica. Los cálculos de expertos bursátiles consultados por THE OBJECTIVE indican que, considerando el actual precio del mercado –que ha marcado el récord de los últimos 19 meses– y el porcentaje que ya se ha adquirido, el gasto total de fondos públicos se dispararía por encima de los 2.330 millones.
La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) –organismo mandatado por el Ministerio de Hacienda para realizar la operación– remitió esta semana a la Securities and Exchange Commission (SEC) los detalles de la compra de su primer 5% de Telefónica, reconociendo que hasta la fecha se han gastado 1.134 millones de euros tras adquirir un total de 289.502.340 acciones a un precio medio de 3,9185 euros entre los meses de marzo y abril.
Unas compras que «se financiaron con aportaciones de capital realizadas a la SEPI por el tesoro público español», según reconoció la sociedad pública en su nota remitida al regulador de Estados Unidos, donde también cotiza la teleco española. De esta manera, se confirma lo adelantado por este medio en diciembre en relación a que los fondos utilizados para estas adquisiciones salen de los Presupuestos Generales del Estado, en este caso los prorrogados del año 2023.
Subida en bolsa
THE OBJECTIVE publicó además a comienzos de este mes que el Ministerio de Hacienda consignó 2.000 millones de euros en las cuentas públicas del mes de febrero en concepto de transferencia patrimonial a la SEPI. El informe de Ejecución del Presupuesto de la Administración General del Estado indicaba que este montante se había obtenido de restar 500 millones al Fondo de Financiación a Entidades Locales y 1.500 millones al Fondo de Financiación de las Comunidades Autónomas.
Esto significa que a finales de febrero la previsión del Ejecutivo para comprar el 10% de Telefónica estaba en los 2.000 millones de euros, una cifra similar a la cotización de la compañía el pasado 19 de diciembre, cuando el Estado anunció su intención de adquirir las acciones de la compañía. Ese día la acción cerró en los 3,57 euros, lo que suponía valorar una décima parte de la operadora en 2.067 millones.
Sin embargo, desde entonces -y al calor de los constantes mensajes del Gobierno indicando que su desembarco en la operadora era inminente– la acción de Telefónica no ha hecho más que subir. En cuatro meses ha crecido un 15,97% hasta los 4,14 euros que cerró este martes, el récord desde septiembre de 2022, lo que ha encarecido notablemente la operación de compra de acciones.
Compra de STC
Si nos atenemos a la información aportada por la SEPI, solamente le quedarían por gastar 866 de los 2.000 millones que les transfirió el Ministerio de Hacienda en febrero, cifra que no cubre el 5% restante que se han comprometido a invertir en Telefónica. Por otro lado, y a los actuales precios de mercado, necesitaría 1.198 millones para adquirir este porcentaje, lo que supone que deberían pedir una nueva inyección al Ministerio de Hacienda de 332 millones.
En cualquier caso, los analistas consultados por este diario coinciden en señalar que ahora la operadora ha entrado en una espiral alcista, ganando un 16% desde mediados de febrero, por lo que si la SEPI decide seguir comprando en la segunda quincena de abril y a comienzos de mayo, es probable que este coste siga aumentando al calor de una cotización que tiene un potencial de crecimiento inédito en los últimos dos años.
Esto supone que -dicen los analistas- si el Gobierno tiene prisas por alcanzar este 10%, deberá asumir una penalización y estar dispuestos a pagar un sobrecoste por las acciones de Telefónica, un precio que manteniendo la actual cotización, se eleva por encima de los 330 millones estimados inicialmente. Por este mismo paquete a comienzos de septiembre la operadora saudí STC pagó 2.000 millones, un 14% menos que lo que terminaría pagando el Estado español si se mantienen los valores actuales.
Accionistas de Telefónica
Respecto del futuro, la SEPI indicó en su comunicación a la SEC de esta semana que «tiene intención de adquirir periódicamente acciones adicionales que, junto con las acciones ya adquiridas, pueden representar en conjunto hasta un máximo del 10% del total de acciones en circulación de Telefónica. Sin embargo, no se puede garantizar que se realicen dichas compras adicionales de acciones», han señalado.
Un mensaje que es interpretado por el mercado como una señal para evitar que el precio de la acción siga subiendo y poder retomar la compra de participaciones en la medida que la cotización retome un ciclo bajista. Este diario ya ha explicado que uno de los principales motivos por el cual se ha disparado el precio es por los constantes mensajes del Gobierno confirmando la adquisición del 10% de Telefónica.
Desde que la SEPI comunicó la semana pasada que superaba el 5,034% de Telefónica, se ha convertido en el primer accionista individual de la compañía por encima del 5,007% de Criteria Caixa, del 4,983% de BlackRock, del 4,9% de Saudi Telecom, del 4,839% del BBVA y del 2,5% Caixabank. Pero si se suman las participaciones del grupo Caixa -que llegan al 7,5% en conjunto- pasaría a ser el segundo máximo accionista de Telefónica.