El Gobierno ya tiene el 8,5% de Telefónica tras gastar 1.942 millones y supera a La Caixa
La adquisición del paquete se ha hecho a un precio medio por acción de 4,0113 euros, según ha comunicado a la SEC
El Gobierno ha comunicado al regulador español (CNMV) y estadounidense (SEC) que ya posee el 8,419% de Telefónica a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), un porcentaje que ha subido hasta el 8,538% tras la última reducción de capital. Esto supone que el Estado ya es el primer accionista absoluto de la operadora de telecomunicaciones tras superar a La Caixa que tiene el 7,5% a través de su 5% en Criteria y su 2,5% en Caixabank y está a la espera de que Saudi Telecom mueve ficha y pida la autorización para subir hasta el 9,9% de la compañía española.
En total, la inversión del Estado en Telefónica asciende a 1.942 millones de euros tras realizar sus adquisiciones de manera escalonada a un precio medio de 4,0113 euros, presionados en las últimas semanas por el elevado valor de la cotización de la compañía, que ha rozado máximos en casi dos años.
Recordemos que la SEPI tiene autorizados 2.000 millones por parte del Ministerio de Hacienda, por lo que ahora deberá producirse una aportación extra de al menos 350 a 400 millones de euros para completar el objetivo del Gobierno de tener el 10% de la operadora de telecomunicaciones, para lo que solo le resta adquirir un 1,5%.
El Estado y Telefónica
Las compras de acciones de Telefónica por parte de la SEPI han sido frenéticas desde que declarara su primer paquete del 3% a finales del mes de marzo. Seis semanas después roza su objetivo planteado en diciembre y se confirma lo publicado por este diario en relación a que se espera llegar al 10% a más tardar durante el verano y en todo caso antes de que comience el próximo curso.
Ahora se seguirá la compra restante y siempre con pequeños paquetes, declarando posiciones cuando se supere un punto de participación. La idea es poder completar la gran parte de este porcentaje entre los meses de mayo y junio, con la esperanza que se produzca un bajón en el precio de las acciones de la compañía e intentar reducir el valor final a pagar.
Esto supone que el Estado está cerca de completar sus objetivos en Telefónica tras incorporar a Carlos Ocaña como consejero de la compañía de telecomunicaciones la semana pasada. El Gobierno puso la primera piedra de su plan para tener voz y voto en la operadora de telecomunicaciones, calificada como estratégica por el propio Ejecutivo.
Carlos Ocaña
Con Ocaña, designado consejero dominical, Moncloa tendrá garantizada una voz que defienda sus intereses en Telefónica, lo que sumado a la presencia de Javier de Paz como destacado consejero de la operadora y reconocido socialista, garantiza un núcleo duro que se moverá a favor del Gobierno.
En el sector incluso no se descarta que el Estado pueda pedir hasta un segundo representante, pero de momento se esperará hasta completar el 10% de participación, un porcentaje que se alcanzaría probablemente antes de que comience el próximo curso. De hecho, en Telefónica están a la espera solo de que se resuelva la situación de STC para incorporar un representante de la operadora saudí al consejo de administración.
La SEPI es el primer accionista individual y absoluto de Telefónica con el 8,538%, por encima del 5,007% de Criteria Caixa, del 4,983% de BlackRock, del 4,9% de Saudi Telecom, del 4,839% del BBVA y del 2,5% Caixabank. Pero si se suman las participaciones del grupo Caixa -que llegan al 7,5% en conjunto- pasaría a ser el segundo máximo accionista de Telefónica.