Disputa de patentes de la vacuna ARN para la covid: EEUU apoya a Pfizer y Europa a Moderna
Las farmacéuticas han ingresado decenas de miles de millones con la venta de sus inyecciones contra el coronavirus

Logo de Pfizer. | EP.
La disputa de patentes sobre la vacuna ARN para la covid entre Moderna y Pfizer-BioNTech se recrudece con decisiones enfrentadas en Estados Unidos y Europa. Esta semana, la Junta de Apelaciones y Juicios de Patentes de EEUU (PTAB) ha fallado a favor de Pfizer-BioNTech y ha dictaminado que dos de las patentes de Moderna son «inválidas» sobre la base de un «estado de la técnica». Una derrota posiblemente sorprendente para la farmacéutica con sede en Massachusetts, ya que en paralelo un tribunal de Düsseldorf (Alemania) ha resuelto que Pfizer y BioNTech sí violaron una patente europea de la vacuna contra el coronavirus de Moderna y, por tanto, deben pagar una «compensación adecuada», aunque aún no se ha establecido cuánto.
Una situación que evidencia la dificultad de este tipo de procesos, con miles de millones de euros en juego, además de una pérdida de prestigio y reputación. Sin embargo, las leyes de patentes en Estados Unidos y Europa son diferentes, lo que puede llevar a decisiones distintas en cada territorio. Por eso Moderna está valorando apelar la decisión del tribunal estadounidense. «Moderna está desacuerdo con la decisión de la PTAB y está evaluando sus opciones de apelación», ha indicado un portavoz de la compañía.
Por su parte, Pfizer-BioNTech también señala que apelará la decisión del Tribunal del distrito de Düsseldorf. «La decisión no tiene ningún impacto inmediato en Pfizer, BioNTech o Comirnaty. Seguimos creyendo que la EP949 no es válida y, por lo tanto, no se infringe», explica la empresa biotecnológica alemana. Además, Alemania es un mercado clave para BioNTech (donde tiene su sede), por lo que un fallo adverso podría afectar a sus ingresos en Europa.
Moderna demanda a Pfizer-BioNTech en 2022
Todo se remonta a 2022, cuando Moderna denunció tanto en EEUU como en Alemania a Pfizer y BioNTech por infringir patentes clave relacionadas con la tecnología de ARNm. En sus demandas, Moderna argumentó que fue la primera en descubrir que «el uso de la codificación de ARNm para una proteína de pico de coronavirus de longitud completa en una formulación de nanopartículas lipídicas era altamente eficaz para producir anticuerpos neutralizantes». El laboratorio considera que Pfizer y BioNTech copiaron dos características clave de sus tecnologías patentadas que son fundamentales para el éxito de las vacunas de ARN mensajero y busca una compensación económica por daños y regalías por el uso no autorizado de su tecnología. Sin embargo, no solicita la retirada de la vacuna de Pfizer-BioNTech del mercado ni busca bloquear su distribución.
Mientras, Pfizer y su socio alemán defienden que las patentes de Moderna son «inimaginablemente amplias» y cubren una «idea básica que se conocía mucho antes» de su fecha de invención de 2015. Con lo cual, según su consideración, las patentes de Moderna son «inválidas» porque sus innovaciones habían sido señaladas en publicaciones desde 2004.
Ingresos por la covid
Durante la pandemia, Pfizer, BioNTech y Moderna ingresaron decenas de miles de millones con la venta de sus vacunas contra el coronavirus. Pfizer y BioNTech obtuvieron más de 3.300 millones de dólares en ingresos por las ventas globales de su vacuna Comirnaty el año pasado, mientras que Moderna ganó 3.200 millones de dólares por su vacuna Spikevax, según informes de las empresas.
No obstante, las ventas de ambas vacunas disminuyeron significativamente entre 2023 y 2024. Un informe del Centro de Investigaciones Multinacionales SOMO, con sede en Holanda, consultado por THE OBJECTIVE, señala que las cuatro grandes farmacéuticas productoras de vacunas covid, Pfizer, BioNTech, Moderna y Sinovac obtuvieron beneficios de hasta 90.000 millones de dólares durante 2021 y 2022 por sus productos relacionados con la covid-19. Este estudio sitúa a Pfizer (35.000 millones), BioNTech (20.000), Moderna (20.000 millones) y Sinovac (15.000 millones) como los laboratorios que más dinero han ganado, con unos márgenes de ganancias netas situados entre un 62% y un 76%.
Solo en Estados Unidos hay más de una decena de demandas pendientes por patentes de vacunas contra la covid-19, según un resumen de Big Molecule Watch. Los litigios se extienden mucho más allá de Estados Unidos, con pleitos en los tribunales del Reino Unido, Europa, Canadá, Suiza y Japón que tendrán graves repercusiones financieras para cualquier parte perdedora.