Toni Ponce y Miguel Luque inauguran el medallero español en los Juegos Paralímpicos
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El nadador barcelonés Miguel Luque ha logrado la primera medalla para la delegación española en los Juegos Paralímpicos de Tokio al colgarse la plata en la prueba de los 50 metros braza, clase SB3 de discapacitados físicos. Por su parte, el también nadador Toni Ponce ha conseguido la medalla de plata en los 200 metros libre S5.
En contexto: son los sextos Juegos Paralímpicos de Luque y esta es la séptima medalla de la carrera del nadador, de 44 años. Por su parte, Ponce ha conseguido la segunda medalla española en su segundos Juegos Paralímpicos.
Luque ha parado el cronómetro en un tiempo de 49.08, solo por detrás del ruso Roman Zhdanov, que lo hizo en 46.49. La medalla de bronce se la colgó el japonés Takayuki Suzuki.
El nadador ha debutado por la mañana en el Centro Acuático de Tokio y se ha clasificado para la final de los 50 metros braza con el segundo mejor tiempo (50″06). En el momento decisivo, ha vuelto a corroborar que esa prueba es su especialidad.
«Esta ha sido la mejor medalla que he sacado en mi carrera deportiva. Después de 21 años, conseguir una medalla y hacer el mejor tiempo en unos Juegos significa que he hecho muy bien el trabajo en estos últimos años, también gracias a los entrenadores que he tenido», ha dicho el jugador en declaraciones a los periodistas, recogidas por el Comité Paralímpico Español. «Se la quiero dedicar, en especial, a mi hijo», ha añadido.
Con este resultado, Luque obtiene su séptima medalla en seis Juegos Paralímpicos, seis de ellas en los 50 braza (oro en Sidney 2000 y Atenas 2004; plata en Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020, y bronce en Pekín 2008) y una en el relevo de 4×50 estilos (bronce en Atenas 2004). Además, cuenta en su palmarés con otras 18 medallas entre campeonatos mundiales y europeos (nueve oros, seis platas y tres bronces), según señala el Comité Paralímpico Español.
Por otra parte, Ponce ha tocado la pared de cada largo a la piscina siempre en segunda posición, por detrás del italiano Francesco Bocciardo.
Tras concluir la prueba, Ponce ha dicho sentir «mucho orgullo de poder conseguir una plata para España». «Personalmente, estoy muy contento porque son muchos compitiendo al máximo nivel. Estos últimos cinco años han sido muy difíciles, pero gracias a mi gente y a los patrocinadores del Comité Paralímpico Español, he podido seguir. Sabíamos que el italiano está en otro mundo y estoy muy contento del trabajo realizado», ha dicho en declaraciones recogidas por el Comité Paralímpico Español.
Junto al nadador barcelonés había en la final masculina de los 200 metros libre (S5) otros dos finalistas españoles: el debutante Luis Huerta, que ha quedado cuarto, y el veterano Sebastián Rodríguez, que ha quedado octavo.
