Cómprate un atril

Lo único que crítico es que a estas horas echo de menos un atril como el de la foto. Un atril que en Estados Unidos es utilizado cada 6 horas por la Secretaría de Estado para dar la cara en su crisis del Ébola.

No voy a hablar de falta de protocolos ni de incumplimientos. No soy experto. Esta vez me estoy limitando a escuchar y luego, a lo mejor, opinar o indignarme. Pero aun siendo periodista me falta información. En otros casos más oscuros hemos accedido a más datos y esta vez hay que jugar al Pulizter para obtener algún dato nuevo que calme a nuestros miles, millones de ávidos y acojonados espectadores.

Repito. Comprendo los fallos. Comprendo los protocolos. Comprendo que es muy complicado la gestión de la crisis y la comunicación de la misma. No envidio para nada a mis compañeros que trabajan para Presidencia o los ministerios. Lo único que crítico es que a estas horas echo de menos un atril como el de la foto. Un atril que en Estados Unidos es utilizado cada 6 horas por la Secretaría de Estado para dar la cara en su crisis del Ébola. Un atril que ha sido utilizado por el Presidente Obama al menos en cuatro ocasiones por este tema. Un atril que todavía no ha llegado al Carlos III ante los ojos de la opinión pública de medio mundo. Tenemos que conformarnos con hacernos sitio a codazos y en plena calle para meter lo que llamamos “canutazo” a la subdirectora del Hospital en cuestión.

¡Es tan importante la puesta en escena! Algo a lo que en España no estamos acostumbrados ni queremos acostumbrarnos. El vacío, el silencio, los partes médicos y demás despropósitos. Y la población no protesta, los periodistas tampoco. Y nos parece normal.

Repito, es difícil, la gestión es difícil. A eso le sumamos que nuestra enferma Teresa, no quiere que se informe de su estado de salud, algo respetable y legal, pero incomprensible ante un caso que tiene en emergencia sanitaria no a un solo país sino a toda una OMS. Ahí Teresa no estoy de acuerdo. Con esto nos la jugamos todos. Tranquilidad y serenidad sí, creo que lo estamos demostrando. Pero compremos atriles. Llenemos nuestras crisis de Estado de atriles. Respondamos aunque sea a través de un plasma pero muchas veces al día. No necesito ni tocarte. Pero apóyate y responde. Cómprate un atril.