MyTO

Sánchez, cual bandolero de Sierra Morena

«Sánchez va a pasar a la historia por su bandolerismo fiscal. Nunca ningún gobernante español subió todos los impuestos preexistentes y creó tantos nuevos»

Opinión

Ilustración. | The Objective.

Que Pedro Sánchez va a pasar a la Historia es algo difícilmente discutible. Será así debido a los muchos méritos que ha ido acumulando para lograrlo entre los que, sin vocación de exhaustividad, podemos citar algunos. Pasará a la Historia por ser el primer presidente de nuestra actual democracia que ha introducido a comunistas en el Gobierno. Por ser también el primero que se ha apoyado en una mayoría parlamentaria en la que, además de aquellos, se integran los herederos políticos del terrorismo y los independentistas que delinquieron contra la Constitución. Sánchez será asimismo recordado por presidir el Gobierno que indultó a los reseñados delincuentes y por impulsar una reforma ad hoc del Código Penal para favorecerles. La Historia también hablará de Sánchez por ser el primer presidente de Gobierno que ha suscrito acuerdos internacionales de los cuales los españoles nos hemos enterado por la prensa extranjera. Y le guardará un hueco para recordar que presidió el Gobierno más elefantiásico y caro que jamás hubo en España. Por éstas y por muchas otras, Sánchez será históricamente recordado.

Sin embargo, para mí y dada mi condición de estudioso de la Hacienda Pública, Sánchez pasará a la Historia por su bandolerismo fiscal. Nunca ningún gobernante español fue capaz en tan pocos años de subir todos los impuestos preexistentes y, al tiempo, de crear tantos otros nuevos. Hasta ha cometido el atraco de utilizar espuriamente la inflación como impuesto. No contento con el expolio perpetrado, Sánchez se regodea con aquellos a los que atraca, de manera que las sucesivas víctimas de sus sucesivos atracos son objeto de vilipendia por él y por sus juglares siendo acusados de ganar dinero, de ser ricos o ¡de ser antiespañoles! Y del vilipendio tampoco se escapan los que se atreven a criticar el expolio sanchista, pues resultan calificados de brujos o chamanes.

«El Constitucional deberá dictaminar sobre la invasión de competencias autonómicas que supone el Impuesto sobre Grandes Fortunas»

Merece la pena detenerse en el proyectado Impuesto sobre las Grandes Fortunas por ser el último de los atracos que ha anunciado Sánchez. Poco antes del verano, desde la tribuna del Congreso de los Diputados, la representante del grupo parlamentario socialista explicaba la negativa del PSOE a aceptar la propuesta de Podemos para su implantación. Y lo hacía argumentando que, debido al desarrollo legislativo constitucional, la imposición que grava el patrimonio de las personas naturales era una competencia autonómica, por lo que legalmente el Estado no podía crear semejante impuesto. Tan solo unos meses después, el Gobierno ha anunciado que se propone realizar lo que unos meses antes era contrario a la legalidad. Semejante fechoría la están cometiendo Sánchez y sus juglares sin perder la compostura, es evidente que saben comportarse como unos tahúres profesionales. 

Junto a esta descarada invasión de las competencias autonómicas sobre la que en su día deberá dictaminar el Tribunal Constitucional, no son pocas las demás aristas que ofrece el nuevo atraco que se propone perpetrar Sánchez. Para empezar su posible efecto confiscatorio, pues muchas de sus nuevas víctimas no podrán pagar el nuevo impuesto con el importe de su renta, debiendo pagarlo con la venta de sus propiedades. También sobre eso deberá manifestarse el Tribunal Constitucional. Como también habrá de resolverse judicialmente la legalidad o ilegalidad de la posible irretroactividad que parece proyectar el Gobierno para la aplicación del nuevo tributo. 

«El bandolerismo de Sánchez se basa en el uso y abuso ilegítimo del poder del Estado»

Aún con todo, el aspecto mas siniestro contenido en el proyecto de Sánchez es la articulación de su nuevo tributo con el actual Impuesto sobre el Patrimonio. La evidente identidad entre sus respectivos hechos imponibles determina una flagrante doble imposición, circunstancia que el Gobierno va a evitar considerando que la cuota del Impuesto sobre el Patrimonio sea deducible de la que resulte en el nuevo impuesto. Hasta ahí bien. Lo auténticamente escandaloso es que la cuota deducible será el importe efectivamente pagado en el actual impuesto, lo que supone dejar materialmente sin efecto las competencias normativas que haya podido ejercer la Administración autonómica, lo que constituye un auténtico atraco a mano armada por el cual el Gobierno de Sánchez se va literalmente a apropiar de las bonificaciones que un gobierno autonómico haya concedido a sus contribuyentes.

Explicándolo de otro modo. Una vez que la Comunidad de Madrid o la de Andalucía han aprobado la bonificación del 100% de la cuota del impuesto y liberado así de su pago a los madrileños o andaluces, llegará la AEAT de Sánchez y les cobrará directamente el importe que les fue bonificado por su gobierno autonómico. Es decir, lo que bonifica tu gobierno autonómico, se lo va a quedar el Gobierno central. Por todo el morro, con el mayor de los descaros, sin perder la compostura. Lo dicho, son unos tahúres profesionales que superan a los bandoleros de Sierra Morena. Pero éstos lo hacían con más gracia y además se jugaban la vida. Por el contrario, el bandolerismo de Sánchez se basa en el uso y abuso ilegítimo del poder del Estado, sin ninguna gracia y sin ningún riesgo personal. En mi opinión, aquéllos tenían más épica.

7 comentarios
  1. Pepecola

    Muchas gracias tendríamos que dar a Sánchez y a sus recaudadores implacables por cobrarnos tan bien y con tanto celo recaudatorio. Que Dios se lo pague con creces y que nunca se le caiga el pelo, como decía mi abuela.

  2. Pepecola

    Vale lo de los bandoleros de Sierra Morena trabuco en mano, y más lo que explica de los viles trampantojos expropiatotrios de Sánchez y sus esbirros fiscales cachicuerna al cinto para hacerte una ‘paralela’ o ‘paralelo’ si no te ha dado tiempo a cambiar de género en el registro de la propiedad corporal..

    Quien no recuerda a Curro Jiménez, tan salao y tan Gallardo con su cachicuerna en la faja tubular, al malvado Caravel, al hermano de Guerra que montó un despacho para despachar por libre en la delegación del gobierno, a los Siete Niños de Écija que eran todos sietemesinos y oriundos de Montoro, a El Pernales y a los bandoleros pijos que desvalijaban a los viajantes de corbatas y géneros de punto y confección para hombres blandengues, y atemorizaban a los pobres paisanos que se atrevían a cruzar las fronteras del terruño para ir vendiendo sus cosillas al terruño de al lado que no fuese el propio en el que estaban mucho mejor considerados.

    Pero puede que la imagen que mejor se ajuste es la de una reunión supersecreta de Spectra, sociedad en comandita, en algún lugar supersecreto sin aparatos de localización ni nada, a peloputa como suele decirse en los ambientes delincuenciales de altos vuelos, preparando el presupuesto recaudatorio y para que el Dr. No (es No) acaricie al gato a contrapelo que le mola mazo, con lo mejorcito de cada capo di famiglia de cuerpo presente, y echándoles un chorreo tremendo a los jefes de las famiglas del sur, un suponer, por recaudar poquito y en malas condiciones, y a los del cupo vasco que ya es la leche, aunque se supone que aquí en Eskalherria chimpún solo hay troncolaris y jugadores pobres que hacen del pelotilleo a sus señoritos el centro de su vida, y que ni entran ni salen con los ricos propios, los ricos que entran por los que salen con el famoso cupo. Hay que exprimir más a los contribuyentes propios, que la protección que les brindamos a los estaditos asociados propios de proximidad de nuestros mandamases asociados a los servicios de protección ahora que pintan bastos, como estadillos hipertextuales asociados, nos salen por un cajón de mico entre picos y flautas, palas y azadones de gran capitán Tan, y para que no se nos salgan de madre los sujetos pasivos que unos me dan leche y otros me dan lana para toda la semana. O sea que ojo al parche y a recaudar como cobrones, que está mejor el dinero del erario en mi bolsillo que en el vuestro.

    O sea que lo suyo sería que nos lo retuvieran todo al cien por cien a los currinches y a los jubilatas ricos, y que nos devolvieran lo que nos pertoca después de pagar todos los gastos, con la correspondiente liquidación por finiquito, después de presentar, eso sí, en el ministerio de la presidencia del subsecretario de certificados y otras bicocas del estado, el certificado de pernales (dos años de condena mínimos sin cumplir para cobrar el subsidio de penalidades), el de buena conducta de que si quieres arroz Catalina lo volveremos a hacer, y el de adhesión inquebrantable a los principios fundamentales del movimiento plurinacional sanchista, expedido por las delegaciones autonómicas de la cosa plurinacional, los ayuntamientos y las diputaciones, y te diesen una cartilla de racionamiento igualitaria para que todos podamos tener una tele panorámica 8K de más de 50 pulgadas por banda, para ver algo de Netflix o algún partidillo de la liga de champiñones, viento en popa a toda vela. Es lo mejor, por tu bien y por el del gobiernucho que es el tuyo y que está más bollullo que tú, pedazo de pagafarras. Tú votame tonto, que la paguita de consolación ya la tienes asegurada, y un par de huevos duros ovalados de la gallina de los huevos de oro.

  3. ruizvinto

    Y el gallego y el pavo real valenciano del PP, resucitándole. Se va a enterar el tal Feijoo de lo que en la España actual vale un peine.

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