La derechita sanchista
«Por mucho que los actos de autoafirmación patriótica y/o constitucional sienten muy bien en el alma inmortal de sus participantes, no son en absoluto aconsejables en este momento político»
Manifestación contra el gobierno de Sánchez en Madrid. | Europa Press
Vladimir Ilich Ulianov, también conocido por el nombre artístico de ‘Lenin‘, fue sin duda una de las cabezas políticas más sobresalientes de su tiempo, un tipo que fue capaz de organizar una revolución obrera en un gigantesco latifundio agrario y teocrático y tras esto, convertirlo en una potencia global.
Una tarea compleja en la que, además de con las resistencias de la aristocracia terrateniente, las de la burguesía, las de la Iglesia y las del ejército, tuvo que lidiar con una miríada de grupos revolucionarios que competían además unos contra otros por la hegemonía del proceso revolucionario y que además poseían estrategias antagónicas para derrotar al antiguo régimen.
Sobre estos espinosos asuntos Ulianov escribió un librito en el destiló toda su capacidad estratégica -y todo el veneno del que su mente era capaz, que por cierto era bastante- llamado Qué hacer, un breve opúsculo en el que con una enorme brillantez práctica, dedicó sus mejores esfuerzos en caracterizar las fallas estratégicas y estructurales de los movimientos de masas con los que otros grupos revolucionarios pretendían derrocar al zarismo y que a su juicio solo lograban reforzarlo, singularmente las movilizaciones espontáneas, oportunistas y sin un fin concreto que alejadas de una estrategia revolucionaria centralizada solo contribuían a dificultar la creación de una conciencia política de clase unitaria capaz de ganar la batalla al régimen zarista.
Les cuento esto porque, tras ver las imágenes de la manifestación madrileña contra Pedro Sánchez, corrí a releer algunos párrafos de este libro y me quedé maravillado tanto de la capacidad de análisis de Lenin como de la absoluta aplicabilidad de sus máximas a todas y cada una de las movilizaciones que hasta ahora ha producido la derecha española y que, como ya avisaba Lenin, gracias a su anomia política y estratégica, solo han servido hasta el momento para reforzar al actual inquilino de la Moncloa.
Y es que cualquiera con dos dedos de frente que haya estudiado con un mínimo aprovechamiento la situación política española sin apriorismos interesados se habrá dado cuenta de que, por mucho que los actos de autoafirmación patriótica y/o constitucional sienten muy bien en el alma inmortal de sus participantes, no son en absoluto aconsejables en este momento político.
«Sánchez no va a perder las próximas elecciones generales por la movilización de la derecha»
Y la razón es evidente: Sánchez no va a perder las próximas elecciones generales por la movilización de la derecha – esa se presupone-, sino por otros dos elementos bien distintos: el primero, la desmovilización de una parte de los votantes del PSOE hacia la abstención, y el segundo, por el salto de los más moderados y decepcionados de entre estos hacia el PP, y a ninguno de estos dos hitos favorece llenar las calles de Madrid de banderas rojigualdas y discursos enardecidos.
De hecho y por mucho que a algunos les cueste comprenderlo el happening de ayer en las calles de Madrid solo tiene dos beneficiarios: el primero no es otro que el actual presidente del Gobierno, que vivirá en las próximas semanas una nueva luna de miel demoscópica, y el segundo, sus aliados políticos de Vox, un partido que ya ha demostrado en innumerables ocasiones que son el mejor y más leal aliado de Sánchez en su batalla por permanecer cuatro años más en Moncloa y que ya se han ganado con largura el poder ser denominados como la única y genuina derechita sanchista de nuestro país.
Qué visión tan interesante y tan reiterada en España.
Durante toda la transición se alegó que a los nacionalistas había que darles lo que pidieran para quitarles la razón, y que enfrentarse a ellos les daría más alas. Recuerdan cuando decían que el PP de Rajoy era una «fábrica de independentistas»?? Recuerdan el de «no hay que judicializar la política»?
La clave del éxito mediático del sanchismo no está en los que apoyan al presidente, sino en los que paralizan la alternativa. La corrección política pronto recomendará no votar a la derecha para no provocar. No decir lo que se piensa para no polarizar. En Cataluña dicen «no te metas en líos que no merece la pena».
Para que triunfe el mal solo hace falta que el bien no haga nada. El germen de la tiranía.
Me pregunto si en España la merecen…
«Sánchez no va a perder las próximas elecciones generales por la movilización de la derecha»
Puede que no o puede que sí. El triunfo en las elecciones obedece a distintos factores y a causas muy diversas. Lo que parece improbable es atribuirlo a una sola. Sin embargo, ¿Qué pinta la estrategia de Lenin en este asunto? No necesitaba irse tan lejos, César. Le recuerdo una manifestación constitucionalista y patriótica que se celebro en Barcelona en octubre del 2017 y que fue igual que la de Cibeles, un éxito rotundo y sobre todo, un triunfo de la sociedad civil que salió a la calle contra todo pronóstico. Contra todo pronóstico del independentismo, que al igual que el gobierno de Sánchez y cía tenía asumido aquello de: «la calle es nuestra».
Pues bien, no tardaron en llegar las elecciones autonómicas en Cataluña y el triunfo del constitucionalismo en las urnas fue incontestable.
A partir de ahí se fraguó el matrimonio de conveniencia entre los republicanos y los convergentes, que para consumar la unión necesitaban meter en su cama a los antisistema de la CUP.
Con este precedente que Sánchez ha conseguido reproducir en el gobierno y conocidos sus efectos devastadores en las instuticiones democráticas tomadas por asalto y en los ciudadanos/as del país, incluidas todas las mujeres víctimas de agresiones sexuales desprotegidas con la ley del solo sí es sí, puede que la movilización que usted atribuye a la derecha, sea realmente de la sociedad civil, plural y diversa que sale a defender la democracia y que ya no pica el anzuelo de la alerta antifascista, porque sabe que el verdadero fascismo emana directamente de las acciones y legislación implantadas por el gobierno.
Calderón, que nos cuentas del ‘Plan de calidad institucional’ que hoy ha presento el PP?
Se lo he oído nombrar de refilón a Feijoo en el telediario, he ido a buscar el programa político del PP y me he encontrado con eso: ‘Plan de calidad institucional’. Recomiendo su lectura a los participantes del foro. Por el momento, es todo lo que el PP ofrece. Pero ojo lo ofrece al PSOE, no a los ciudadanos, no nos confundamos. Para poder implementar este plan necesitaría mayoría absoluta en el Congreso/senado y aún así no está claro que pudiera realizarlo.
Este Plan tiene 60 puntos y está diseñado para que los ciudadanos vean como se negocia entre PP y PSOE. La mayoría de los puntos tratan de como gestionar las Instituciones, tratando de evitar la intervención de los partidos.
Si el PSOE tiene claro que pierde las elecciones dirá que sí, un poco antes o un poco después , porque le conviene como oposición. Si el PSOE tiene claro que gana o que estamos más o menos ahí, dirá que no. Nada de lo que contiene ese ‘Plan de Calidad institucional’ le conviene a un gobierno que piensa gobernar saltándose la Constitución y las leyes, a la vez que controla todas las Instituciones.
Para los ciudadanos quizás lo más interesante es la propuesta de que gobierne el partido ‘más votado’. Para ayuntamientos podría funcionar con condiciones. Pero para el gobierno del estado no lo tengo tan claro.
Supongamos que el PSOE dice que lo acepta. Supongamos que el PP saca mayoría de votos en las elecciones al Congreso pero no mayoría absoluta. Supongamos que el PSOE cumple lo prometido y acepta que gobierne Feijoo. Podrá Feijoo cambiar todas esas leyes que dice que va a cambiar? (Si es si, secesión, malversación,… ) Sin el acuerdo del PSOE no será fácil.
En primer lugar el Plan de calidad Institucional no es un programa de gobierno completo. No incluye aspectos importantes como relaciones exteriores, agenda 2030, vehículos combustión interna/eléctrico, racionalización de las autonomías, impuestos, inmigración.
En mi opinión el PSOE dirá que no, por el momento. No le conviene limpiar las instituciones con lo que le ha costado ensuciarlas.
Entonces que pretende ese plan? Probablemente arrinconar a VOX y no dejarle gobernar. .
El PP saca mayoría pero no absoluta, entonces el PSOE a regañadientes dice que acepta el plan y deja gobernar a Feijoo. Este no podrá cambiar ninguna de las leyes que dice cambiaría al no contar con el apoyo del PSOE. Entonces se volverá a VOX y le dirá o votas conmigo y sacamos estas leyes o estas con Sanchez y su banda. Pero ojo solo en aquellas leyes que Feijoo considere, el entramado legal/institucional que ha montado Sanchez podría quedar intacto. Este es el GRAN peligro del plan.
Todo para arrinconar a VOX. Un partido Constitucional y cuyo programa es la ‘Agenda España’ de 20 puntos muy claros. El que ataque a VOX, por favor, indique que punto de la Agenda España no está de acuerdo. Así podremos discutir sobre una base.
Efectivamente. Este plan de que gobierne la lista más votada solo tiene el fin de que VOX no forme parte del gobierno y se alterne con el PSOE. …no es una alternativa sino alternancia con el PSOE .