


Vox, el Atleti y la tercera urna
Melancolía. Es un soplo la vida y veinte años no es nada, que diría Gardel. Como en el tango, me sorprendo al descubrir que ya hace casi 3 decenios desde que Ruiz Mateos agrediera al exministro Boyer delante de las cámaras de televisión. Mayo del 89. Todo un suceso. El escenario, las semanas previas a unas elecciones al Parlamento Europeo. Los protagonistas, Ruiz Mateos y su agrupación de electores, artefacto hoy de moda para Manuela y Manuel. Desde luego, fue eficaz, porque logró dos escaños de golpe. Eso sí, a golpe de “que te pego, leche”.

Los ministros y la medicina de Sánchez
No hay semana sin escándalo que ponga en la picota a un ministro de Sánchez. Desde Maxim esto es un sin vivir. Que si un currículo, un master, un plagio, una conversación antigua, un maricón, una nenaza, unos menoreros…. La cosa está que arde, pero es que los ministros de Sánchez están probando la medicina que suministra su presidente, el campeón en exigir a los demás aquello que él no cumple. Sánchez y sus socios pusieron el listón muy alto y ahora sus ministros no llegan y andan apurados. El último Pedro Duque, el astronauta silencioso, que las pasó canutas en una comparecencia bochornosa en la que dio hasta lástima. A él le han sacado un asunto de elusión de impuestos, utilizar una sociedad para evitar pagos a Hacienda, una conducta de la Que Pedro Sánchez dijo que era incompatible con estar en la política.

Periodistas y mariconazos
“¿A qué te dedicas, Miguel Ángel?”. “Soy profesor. De Ética. Por ejemplo, Ética del periodismo”. “Ah, pero ¿los periodistas tienen ética?”. He escuchado el mismo chiste tantas veces. Supongo que todos soportamos monotonías semejantes con nuestro trabajo: a Jordi Hurtado seguro que le han hecho mil chanzas sobre su eterna juventud. Y a fe que tiene especial mérito en su caso: no es fácil aguantar la misma broma doscientos años.

Una nueva centralidad (más a la izquierda)
El semanario The Economist y el diario Financial Times son dos publicaciones británicas de cabecera para los liberales, también en España. En esto hay incluso consenso entre las distintas familias –muchas de ellas, contradictorias entre sí– que se autocalifican como tales.

Captain Renault c’est moi
El caso es que el caso de la ministra de justicia Dolores Delgado no consigue escandalizarnos como debiera, dejando el morbo de sus conversaciones aparte. Lo gordo es que ha mentido en racimo durante varios días, versión sobre versión y, sobre versión, otra.

La cháchara federal
España es un país donde algunas ideas políticas están francamente devaluadas. Esa devaluación se produce generalmente porque la inteligencia patria las ha utilizado con fines distintos para las que fueron pensadas. Sin embargo, en otras ocasiones, la praxis histórica ha dejado un mal sabor de boca, como es el caso del republicanismo y el federalismo. Déjenme que me centre en el segundo concepto, en estos tiempos de turbulencias territoriales.

Un artículo feminista y banal
Para escribir este artículo feminista, podría adentrarme en intelectuales derroteros, o simplemente, ser una feminista banal, como banal es el forofo de un equipo de fútbol que se pone a dar saltos y gritos cuando gana su equipo. A mí, en este momento, en el que a Esther García le dan el premio nacional de cinematografía y de paso, en el festival de San Sebastián se firma la carta por la paridad promovida por CIMA, me salen solo los saltos y gritos forofos de la feminista banal.

Facebook en pie de guerra
El pasado lunes Facebook inauguró una sala muy especial en sus oficinas. La compañía de las relaciones, la amistad y los likes, parece querer asumir su responsabilidad en la contienda política global construyendo un centro de operaciones contra la manipulación de los contenidos colgados en su red.